El documento describe a la rosa como la reina de las flores debido a sus bellas cualidades y variedad. Explica que la virtud teológica de la caridad también ha sido proclamada reina de todas las virtudes. Finalmente, propone presentar una rosa a María como símbolo del amor a Dios y al prójimo, y comprometerse a amar con todo el corazón a Dios y a los demás.