Las células eucariotas se distinguen de las procariotas en que poseen un núcleo celular delimitado por una doble membrana nuclear. Las células eucariotas pueden ser autótrofas como las células vegetales que producen su propio alimento a través de la fotosíntesis, o heterótrofas como las células animales que obtienen nutrientes de otros organismos. Las células procariotas no tienen un núcleo definido y su material genético se encuentra disperso en el citoplasma.