Este documento contiene varios poemas góticos, surrealistas y dark de dos autoras, Sabra y Euridice Canova. Los poemas tratan temas como la muerte, el dolor, la locura y el amor de una manera oscura y melancólica, utilizando imágenes sombrías y descriptivas.

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POESÍA GÓTICA,DARK,SURREALISTA
LIBRO 13

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POESÍA DE SABRA
UMBRAL DE MUERTE
MI RAZÓN DE TI
JUGADA FATAL
INDIFERENCIA...
MI ÚLTIMA MORADA
MIS LABIOS SELLADOS
NADA...
MIMETIZADOS EN LA MUERTE
¡ROMPO EL TÚNEL!
COSAS BORRADAS...
SER ERRANTE...
¡IMPOSIBLES!
POESÍA DE EURIDICE CANOVA
EL ESPANTO DE TODOS MIS TEMORES
LA VÍA LÁCTEA DEL DOLOR
ODIÁNDOME POR RESPIRAR
SANGRAN LAS PAREDES
EL CAOS DE MI IRREALIDAD
TU CALVARIO
ENCADENADO
RODEADO DE CRÁNEOS
EL SABOR AMARGO DE MI LOCURA
ME DESPOJÉ DE MIS ENTRAÑAS
EL MARTIRIO DE LA TORTUOSIDAD
MIS OJOS ESTÁN MUERTOS
Poemas
de
Sabra

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UMBRAL DE MUERTE
La muerte rodea mis sueños más profundos,
cree que no me percato de su intromisión
pero yo la alejo aferrándome a la vida graciosa,
desarmando su vestidura negra y silenciosa.
Me alienta a visitar su castillo negro tenebroso,
consigue enredar mi aura con su letal perfume;
mastica hasta triturar mis ideas de no fenecer,
me quita la luz tan pálida del nuevo amanecer.
La muerte tiene artimañas que nadie desmorona,
sabe elegir el momento esperando por el zarpazo;
más mi coraza ataja los sables en arremetida,
las zanjas son profundas y sangrante la herida.
Versa con el papel en las manos empuñadas,
la prosa consume, la farsa es su lema apreciado,
su poema de amor me atrae sobremanera...
como que me apasiona el saberla tan altanera.
La muerte se desliza en mi velo taciturno,
acaricia mis laderas con su tacto de espinas;
no cesa de rozar mi ardiente pasión engañada,
se aprovecha de mi estado de mujer enamorada.
Su manjar degusto cual miel de panales en racimos,
me ha convencido para rendirle mi venia en reverencia;
en mi nueva morada la recibo traspasando el umbral...
feliz por su éxito la muerte ya reanima mi mueca fatal.

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MI RAZÓN DE TI
En la maravillosa paz del cosmos inmenso,
te acercas al infinito de mi ser inmaculado;
mi pared espejo detiene meteoritos fugaces
que penetran el alma de mi esencia acorazada.
Rompe este silencio que rodea mis mares,
inclina latitudes y elévame cual alba gaviota;
navega mi amado por el espacio de mil átomos,
convierte tus dagas en besos con rictus de locura.
Acerca tus labios derritiendo mi témpano solitario,
mis ojos cerrados divisan la onda brumosa de caricias;
en la galaxia inverosímil divaga mi ansiedad de tenerte
y de esculpir tus piedras transformándolas en capullos.
Azul reflejo del aura mimetizada en ambos rostros,
conciencias tímidas ocultas entre nubes pasajeras;
deseos de abrazarte para lograr la fusión inevitable
y esparcir las trazas sobrantes en desiertos áridos.
Siente la pasión desmedida en este jardín de sueños,
regálame al fin ese beso robado a la estrella fugaz;
demuestra que eres mi amado y maravilloso guerrero...
la eternidad infinita clamará mi tremenda razón de ti.

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JUGADA FATAL
Jugadas desatadas del tablero y la vida,
recorren y acarician la sorpresa ... siempre ida,
mendigan y suplican por contactos perdidos,
se adornan de marfil y diamantes deslucidos.
El juego gracioso de mesurada simpleza,
abrió mi blanca alma que se entregó en entereza;
pensante jugador y pensante retador,
no alcanzaste a saborear el reír... ¡el temor!
¡La vida es así! corriendo con desdén y prisa,
no espera la meditación, ¡no espera la risa!
nos da mieses de sabor exquisito y sabroso,
no espera jugada final... ni el toque gracioso!.
Sigo mi rumbo ya trazado con mano firme,
aquel desvío me pareció... casi sublime,
jugada fatal diste soñador de ilusiones...
jugada fatal que rompió ...¡todos mis rincones!
INDIFERENCIA...
Reluce perfecta tu espalda de mármol,
arrancando el grito de las campanadas;
retrocedo en el tiempo de largo vacío,
frágil ancestro del rayo certero,
me doblo cual hoja en el otoño,
esperando el puntapié arrasador;
para caer en el lecho de espinas,

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hiriendo el centro de la jaspeada dura.
Feto incipiente, verdoso e inútil,
esperando la no armonía rosada,
pecho recubierto de ningún elixir;
retiras de mi vista la claridad fugaz,
el farol apagado y tu indiferencia;
no vuelvo al sol ni al acicalado mar,
entrégales mi ensordecedor silencio…
muero ya sin retorno…
…muero en la blanca arena.
MI ÚLTIMA MORADA
En este lecho dejo mi rosa muda,
levanto el símbolo de la crudeza
pernoctando en la blanca nube...
corro el velo de la cruel aspereza.
Amor que no evade el rojo labio,
lado central apunta a la espina;
mirada perdida del viento silente,
mente en gris, la ladera se empina.
Siento respirar humos de gran vacío,
amado termina de observar mi reino;
acaricia mis alas de negro plumaje,
deja que mi gemido en ti sea eterno.
Cruzando horizontes de mil caricias,
muero en el misterioso eco resonante;

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desierto en el río que fluye sin cascada
esperando el reposo del fiel amante.
Alcanzar el minuto colado en el mármol,
solo tu altanera capa calienta mi llanto;
tarde es la carrera después del ocaso,
aprisiona mi alma que vivió....
... ¡y te amó tanto!
MIS LABIOS SELLADOS
Sellaste los versos que escapaban de mi boca,
cese inmediato de mi carrera que disloca
detuviste el aliento que ya se deslizaba,
con sangre en la frente me mantendré callada.
Mano negra acaricia mis cabellos ralos,
lacios y escasos para cubrir mi tristeza;
pensaste eliminar mi tangible realeza,
desgranaste astillas en rígidos palos.
Labios mudos que callan en secuencias,
rabia sin sentido delirando incongruencias;
el clamor de la ofuscación brilla en la esfera,
remueve el alma en su impaciente espera.
Fatal el desenlace con rostro de muerte,
consigna de despecho en profundo declive;
paredes carcomidas por el tiempo inerte,
un símbolo siniestro resalta y ya describe.
Alejar el mal, erradicarlo de la mente,

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correr por el pasillo de eco intermitente;
retrospectiva silenciosa en espejo y ardor,
candados en los latidos aplastarán mi dolor.
NADA...
Demuestras la miseria,
de tus impúdicas lanzas;
no aciertas en su blanco,
ensayas y fracasas;
intentas tus maleficios,
disfrazados de belleza;
contaminados y excéntricos,
remites tu hedor abierto,
maloliente,
pasoso,
fétido,
nada...
Piensas que no te conocen,
más el registro se estampa;
y la intención se devuelve,
con la misma servil bofetada;
que sacas con perfumarte,
vestirte de lujos asiáticos,
comer exquisitos manjares,
si el alma está vedada,
enmohecida,
enlodada,
turbia,
nada...

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MIMETIZADOS EN LA MUERTE
Morir de a dos es la consigna de este ocaso,
desaparición de la tibieza en tramos reales;
la conjunción de las almas en sopor infinito
y de los pasos que unidos saltaban las vallas;
reunirse en el lecho de descanso y término.
Morir de a dos es acariciar el crepúsculo naciente,
alcanzar la bola roja en extinción incontrolada;
suavizar la esperanza de permanecer sin latidos
para sostener la caída precipitada en pendiente;
y así oscurecer los espíritus que aman y lloran.
Morir de a dos mi amado confirma nuestro lema,
aquel de pensarnos en el gran ocaso de la muerte;
y de recordar tantas vivencias que no se borrarán
ni aún talando el roble de nuestros besos ansiosos;
ni deshaciendo las praderas con el fuego arrasador.
Morir de a dos siempre mantendrá esta luz viva,
porque nos reuniremos en el limbo de las ilusiones,
seguiremos los mandamientos de ambos corazones;
buscaremos el túnel menos oscuro para la travesía,
mimetizados alcanzaremos el horizonte lejano...
...¡Algún día!

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¡ROMPO EL TÚNEL!
Silenciosa noche oscura,
me pierdo en tu remanso;
grito mi dolor tan callado,
quisiera morir...
¡tener descanso!
Siniestras sombras azules,
danzan con velos ralos;
me envuelven los pedazos,
siento la carrera...
¡y morir el ocaso!
Misteriosa nebulosa gris,
penetra mi cuerpo lacio;
me acosa con su densidad,
flechas certeras...
¡latir despacio!
Vela que apenas arde,
esperma ligera en mi mano;
murmullos agrestes me rozan,
cierro mi pecho...
¡desgarro al villano!
Al fin el adorado silencio,
que acuna con su cantar;
columpio de vida pasada,
rompo el túnel...
¡dejé de razonar!

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COSAS BORRADAS...
Saliendo de mis lóbulos frontales ideas tangibles,
esperanzas me recorren, los reptiles son sensibles;
recovecos deslizados en estrepitosa carrera,
la Muerte ya anunciada, con cortesía me aterra.
Borradas del pensamiento esperanzas del devenir,
me revuelco en el lodo de Muerte a punto de parir;
seres grotescos de la madre Muerte acicalada,
fantasmas disfrazados de Muerte enamorada...
Llévame contigo al estrecho delta de tus mares,
llévame contigo al Paraná de tus bellos trigales;
te sigo embelesada amiga Muerte intransigente,
como cosas borradas deambulas por mi pueril mente.
Te siento sigilosa escarbar la tumba profunda,
te retrato de cuerpo entero y te niego así rotunda;
Muerte de condominios y parajes atestados,
de muertes más sencillas con murmullos aterrados.
Cosas borradas dibujaste Muerte despiadada,
cosas borradas de mi corazón en erupción consolidada;
borro todo de mi ser interno para no sucumbir,
cosas borradas para siempre...
¡me olvido Muerte de la palabra porvenir!

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SER ERRANTE...
Te tragó la tierra al sentirte amanecer,
comiste santidades y no logras crecer;
mataste el rocío que destila por tus venas,
colmaste de heces los arroyos y colmenas.
Bramidos estruendosos en mi cabeza,
No comprendo ¡tanta tanta bajeza!
sorpresas vanas brillan con clamor,
manchaste la huella recorrida con temor.
Corres precipicio abajo como desaforado,
no te detienes ni para mirar a un lado;
escupes murciélagos de alas extendidas,
sin avisar la eminente y estruendosa caída.
Salpicas tinta a chorros descontrolados,
manoseando cuerpos de tintes morados;
precipicio de insultos vas siempre rodando,
fuego negro desilusión vas regalando.
Lavas encendidas a tu paso candente,
una esmeralda pulida te mira insolente;
límpiate el saco raído viejo caminante,
avanza ya sin huellas... ¡Eres un ser errante!

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¡IMPOSIBLES!
Camino por avenidas del horizonte,
quiero alcanzar los pájaros felices;
como si quisiera que me trinaran,
pero no me cantan... son solo pájaros.
Troto por los vaivenes deshabitados,
quiero tocar las nubes desoladas;
como si deseara que me consuelen,
pero no me susurran... son sólo nubes.
Corro por los montes encadenados,
quiero atrapar mariposas de colores;
como si ansiara que me acariciaran,
pero no me palpan... son solo mariposas.
Divago por la selva impenetrable.
quiero penetrar en la tierra del gusano;
como si añorara su amor de olor húmedo,
pero no me invitan... son solo gusanos.
Acelero el paso en la travesía final,
quiero amansar las hermosas palomas;
como si escuchara su eco en la penumbra,
ellas sí me dan paz...
¡Merodeando en mí tumba!

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EL ESPANTO DE TODOS MIS TEMORES
Camino entre los seres humanos
ellos simulan que no me pueden ver
y aun así me alimento de su carne
orino sin conciencia en sus posesiones
defeco ensuciando sus pulcras guaridas
los cazo con la complicidad de la noche
los espero como un animal indefenso
y me los devoro sin piedad a escondidas.
Cazo segregando toda mi adrenalina
libero en cada víctima el instinto asesino
irrumpo con ira en sus soberbios hogares
me rio de los que intentan comprarme

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y arranco con ferocidad sus corazones
los maldigo por creerse invulnerables
y reflejo en el terror de sus miradas
el espanto de todos mis temores.
LA VÍA LÁCTEA DEL DOLOR
Transitas perdida en el tiempo
entre las brillantes novas titilantes
tu bello corazón es mi único enlace
con este amor que se niega a morir.
¿Dime como he de rescatarte?
No encuentro manera de descifrarte
vives aferrada al terrible pasado
aquel que yo sepulté en el caos.
En la inmensa vía láctea del dolor
la felicidad sufre su cruel destierro
del alma brotan lágrimas de sangre
sobrevivir es una utopía enajenable.
Busco en cada parábola del universo
tu amado nombre a cielo abierto
lo rescato en una estrella a la deriva
y me uno a la simbiosis de tu infierno.

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ODIÁNDOME POR RESPIRAR
Trato de masacrar mis sesos
hundirlos hasta disgregarlos
en el maldito y pavoroso infierno
pero el patético fracaso suicida
es parte del bestial sufrimiento
y aun así siempre lo intento.
.
¡Me auto eliminé tantas veces!
Renazco consciente en cada ocaso
en las noches de pura adrenalina
en cada abrir y cerrar de ojos
en mis alucinaciones borrosas
en que siento que me ahogo.
Golpeo mi cabeza contra las paredes
no siento nada, ni siquiera dolor
saboreo con devoción mi propia sangre
inmerso entre la locura y el placer
me miro sonriente en el espejo
odiándome por respirar y ser.
SANGRAN LAS PAREDES
Sangran las paredes de la ambición
se hunden en la metamorfosis del mal
aferrándose a la cruel supervivencia.
No existe la remisión de las almas.
el credo fue corrompido por la violencia

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sin fe, ni salvación solo tendrán el karma.
Se espera el apocalipsis de los muertos
marcharán incendiando las ciudades
atravesando con sus dagas el pecado.
Ya es muy tarde para el perdón anhelado
la sangre fue contaminada por los impuros
asesinos sin valía que no verán el futuro.
Todo será destruido en pocos segundos.
¡Fagocita tu dinero si quieres preservarlo!
Masticarán tus vísceras para recuperarlo.
Sangran las paredes pero no lo puedes ver
te mutilaste los ojos por un rato de placer
y aun así ambicionas reinar en el poder.
EL CAOS DE MI IRREALIDAD
La fría noche quebró el vuelo
hasta la ilusión de una despedida
tétrica e irreversible fue la partida
la soledad hizo su propio duelo
la tumba tenía su número puesto
las rosas resignaron su vanidad
los despojos se enfriaron al rocío
como mármol quedó el cuerpo
el alma se apoderó de otra vida.
Atrapé el suspiro de los muertos
hasta su ambición desmedida

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el dolor cubrió todas las heridas
el sueño invadió la eternidad
el mañana se transformó en utopía
en su ansiado viaje a la deriva
en su fantasmal sepulcro abisal
entre el cielo y el infierno
entre el caos de mi irrealidad.
TU CALVARIO
Tus ruegos son para tu dios
no para el alma de la bestia
siente el dolor como un puñal
masacrando el hedor de tu piel.
Es tu calvario que hiere, penetra
todo esta escrito en las escrituras
las que están lacradas y sepultadas
en el bendito reino de la oscuridad.
El instinto es profanar lo legítimo
ser el dueño de la barbarie absoluta
sentir el poder en las venas sin culpa
venciendo la hoz de la muerte sin dudar.
Tus ángeles murieron en mi mundo
tus estigmas fueron hechas al azar
devora el cerebro de los impíos
siente el hambre del poder del mal.

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ENCADENADO
Agonizo agazapado entre la ventisca
sobrevivo vulnerable en posición fetal
pienso que si naciera nuevamente
todo me daría exactamente igual.
Debería soportar todas las maldiciones
el tormento con sus tétricos bemoles
el viento facineroso con sus canciones
o las sinfonías muertas que me corroen.
La tristeza encubierta me parasita
la tempestad transita el alma infinita
me rompe el corazón como un cristal
la mente se pierde mas allá del mal.
He nacido con el dolor incorporado
cambio cuando me siento amado
o me resiento si me han abandonado
encadenado vivo en este mundo real.
RODEADO DE CRÁNEOS
No queda el cementerio en pie
ni siquiera el nombre de tu lápida
busqué tu cruz entre tanta desgracia
el río horadó hasta los cimientos
los cadáveres flotan entre las aguas.

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El barro cubre tu derrumbada tumba
Y así estés putrefacta te sigo buscando
dime si tiene sentido seguir excavando
cada hueso encontrado lo voy besando
lo hago parte de mi ser y de mis labios.
La putrefacción me cubre el cuerpo
me hundo rodeado de miles de cráneos
maldigo mi existencia por no encontrarte.
¿Por qué no consigo ya escucharte?
Tal vez estoy demente por no olvidarte.
EL SABOR AMARGO DE MI LOCURA
En nombre de lo que te ha amado
comprende que lo intenté todo
hasta traté que no sientas dolor
pero aun no me he perfeccionado
desangrarte fue enloquecedor.
Entiende que los celos me ciegan
te observé en esa lujuriosa fiesta
el pánico se apoderó de mi psiquis
te juro que dañarte jamás quise
y estallé hasta perder la razón.
Y ahora admirándote dormida
pienso en tu reencarnación.
Me esperarás en la otra vida
como el alma oscura que transita
en cada una de mis pesadillas.

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Amputarás todos mis sueños
sublimarás mi odio interno
serás la vengadora sin dueño
la conciencia que me tortura
el sabor amargo de mi locura.
ME DESPOJÉ DE MIS ENTRAÑAS
Me despojé de mis entrañas
para agasajarte esta noche
me hundí en la oscuridad sublime
desangrándome en posición fetal
cubrí mis heridas con amoniaco y sal
gritando tú nombre amado en soledad
caminé por ti sobre cenizas de fuego
arrastré los carruseles del infierno
donde lo más oscuro de mi vive allí
sin importarme las leyes a infringir
siempre que te tenga en mi lecho
te codicio, te amo en el pecado
donde somos uno sin despecho.
EL MARTIRIO DE LA TORTUOSIDAD
Deja que te acaricie en cada vuelo
el saborea tu sangre sin compasión
roe hasta el tuétano de tus huesos
desgarra tu carne de manera atroz
dejando en tu boca su olor pestilente
vomitando su maldad sobre tu vientre.

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Poco importa si eres buena o decente
fuiste elegida en tu manso desierto
donde las cenizas lo cubren todo
y el viento se mofa del suave hedor
donde descansan en paz los muertos.
Siente el martirio de la tortuosidad
entrégate sin sentir asco y de frente
en el goce de la agonía espeluznante
sin claudicar ante el dolor aberrante
y sin suplicar que te llegue la muerte.
El ángel negro te devorará con honor
como una letal cobra te envenenará
con su saliva morbosa te mutilará
masticando tus vísceras sagradas
despellejándote a gritos el alma
hasta que sientas que no eres nada.
MIS OJOS ESTÁN MUERTOS
Mis ojos están muertos
hielan la sangre cuando miran
la gente temerosa me evita
escupen el suelo que transito
se refugian en sus temores
o en sus miserias malditas.
Entierran la cabeza en el lodo
creyendo que lo saben todo
arman cadenas de oraciones

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obviando sus convicciones
buscando el falso perdón
vendiendo hasta su honor.
Mis ojos están muertos
hielan la sangre cuando miran
busco una respuesta razonable
o un símbolo de revelación loable
o el códice de la santísima trinidad
que me devuelva la fe en dios .
Pero es tarde para revelarme
demencial seria exorcizarme
hoy al observarme en el espejo
comprendí cual era mi misión
triturar los corazones destruidos
y devorar las alma en sumisión.
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