La política establece las normas para el monitoreo de la red universitaria con el fin de mantener la seguridad e integridad de la información y la infraestructura de red. Autoriza al personal del Centro de Cómputo a monitorear la red para resolver problemas, diagnosticar fallas y detectar amenazas de seguridad, siempre que se mantenga la confidencialidad de la información. Prohíbe a los usuarios interceptar o acceder a información ajena, y establece sanciones por violaciones a esta política.