De relámpagos y recuerdos… Minería y tradición de lucha serrana por lo comúnCrónicas del despojo
Según Gustavo Esteva, quizá el lector deba adoptar las mismas precauciones que la autora ante este libro singular: caminar de puntillas, al borde siempre de algún precipicio, al incursionar por intimidades y territorios vedados al extraño. Sólo una sensibilidad conscientemente femenina, inspirada a veces por curiosidad gatuna, pudo realizar esta tarea sin perder rigor de la mirada técnica. Cada des-cubrimiento estuvo al servicio de algún en-cubrimiento. Revelar es aquí lo que la palabra dice y lo contrario: Elia quitó velos, mostró lo que había tras ellos para darle relieve y hacerlo relevante, y al mismo tiempo lo veló de nuevo, lo ocultó, le puso doble velo…
Se entiende así por qué este libro dice del extractivismo minero algo más de lo que todos sabemos o habla asuntos de la Sierra Norte de Oaxaca o de la comunalidad que no habían sido abordados, a pesar de la reciente invasión de interesados en ellas que parecían haber cubierto todo el terreno.
Se explica bien, en este libro, que la memoria y el olvido son siempre selecciones, extractos, abstracciones: separan algo del conjunto. Se explica también por qué la memoria y el recuerdo son procedimientos diferentes, que cumplen funciones distintas. Y todo esto se hace con gusto por la palabra, para permitirnos una percepción más profunda y sagaz de lo que siempre ha estado ahí pero no nos atrevíamos a ver.
Representación de la memoria del conflicto armadoMayra Álvarez
Este informe contiene los resultados del trabajo de grado titulado Volver al pasado para construir el futuro: la representación de la memoria del conflicto armado en el grupo Mujeres Caminando por la verdad de la Comuna 13, el cual fue realizado por la estudiante Mayra Álvarez, del Pregrado en Comunicaciones de la Universidad de Antioquia.
"De la memoria suelta a la memoria emblemática"Igor Espinoza
Esta presentción busca informar respecto a como la memoria, y en especial la oralidad en la construcción histórica permite construir espacios y estructuras que permiten darle sustentabilidad y rigurosidad a una investigación histórica
Palabras e imágenes donde se encarnan sentires amistosos, deseos de diálogo entre quienes, transitando por caminos sociales, por puentes interpersonales, por búsquedas interiores, por los rigores de la ciencia, por desfiladeros filosóficos, por los horizontes espirituales, por senderos metafísicos, por jardines poéticos, por el compromiso con el juego de los niños… van anhelando y construyendo una cultura de paz, de justicia, de armonía con la naturaleza, de relevancias del sentido.
De relámpagos y recuerdos… Minería y tradición de lucha serrana por lo comúnCrónicas del despojo
Según Gustavo Esteva, quizá el lector deba adoptar las mismas precauciones que la autora ante este libro singular: caminar de puntillas, al borde siempre de algún precipicio, al incursionar por intimidades y territorios vedados al extraño. Sólo una sensibilidad conscientemente femenina, inspirada a veces por curiosidad gatuna, pudo realizar esta tarea sin perder rigor de la mirada técnica. Cada des-cubrimiento estuvo al servicio de algún en-cubrimiento. Revelar es aquí lo que la palabra dice y lo contrario: Elia quitó velos, mostró lo que había tras ellos para darle relieve y hacerlo relevante, y al mismo tiempo lo veló de nuevo, lo ocultó, le puso doble velo…
Se entiende así por qué este libro dice del extractivismo minero algo más de lo que todos sabemos o habla asuntos de la Sierra Norte de Oaxaca o de la comunalidad que no habían sido abordados, a pesar de la reciente invasión de interesados en ellas que parecían haber cubierto todo el terreno.
Se explica bien, en este libro, que la memoria y el olvido son siempre selecciones, extractos, abstracciones: separan algo del conjunto. Se explica también por qué la memoria y el recuerdo son procedimientos diferentes, que cumplen funciones distintas. Y todo esto se hace con gusto por la palabra, para permitirnos una percepción más profunda y sagaz de lo que siempre ha estado ahí pero no nos atrevíamos a ver.
Representación de la memoria del conflicto armadoMayra Álvarez
Este informe contiene los resultados del trabajo de grado titulado Volver al pasado para construir el futuro: la representación de la memoria del conflicto armado en el grupo Mujeres Caminando por la verdad de la Comuna 13, el cual fue realizado por la estudiante Mayra Álvarez, del Pregrado en Comunicaciones de la Universidad de Antioquia.
"De la memoria suelta a la memoria emblemática"Igor Espinoza
Esta presentción busca informar respecto a como la memoria, y en especial la oralidad en la construcción histórica permite construir espacios y estructuras que permiten darle sustentabilidad y rigurosidad a una investigación histórica
Palabras e imágenes donde se encarnan sentires amistosos, deseos de diálogo entre quienes, transitando por caminos sociales, por puentes interpersonales, por búsquedas interiores, por los rigores de la ciencia, por desfiladeros filosóficos, por los horizontes espirituales, por senderos metafísicos, por jardines poéticos, por el compromiso con el juego de los niños… van anhelando y construyendo una cultura de paz, de justicia, de armonía con la naturaleza, de relevancias del sentido.
Palabras e imágenes donde se encarnan sentires amistosos, deseos de diálogo entre quienes, transitando por caminos sociales, por puentes interpersonales, por búsquedas interiores, por los rigores de la ciencia, por desfiladeros filosóficos, por los horizontes espirituales, por senderos metafísicos, por jardines poéticos, por el compromiso con el juego de los niños… van anhelando y construyendo una cultura de paz, de justicia, de armonía con la naturaleza, de relevancias del sentido.
Alguna vez se ha preguntado ¿Por qué si somos iguales, existen tantas desigualdades?
Esta nota nos trae análisis y reflexión al respecto, al conmemorarse 17 años de proclamación del Día Internacional para la Tolerancia.
Nota publicada en el Diario La Industria de Trujillo - Perú.
16 de Noviembre de 2012.
Autora: Mariana Carranza Ancajima - Comunicadora Social.
CO.INCIDIR 106 SEPTIEMBRE 2023 (PARTE 1).pdfmaliciapino
Palabras e imágenes donde se encarnan sentires amistosos, deseos de diálogo entre quienes, transitando por caminos sociales, por puentes interpersonales, por búsquedas interiores, por los rigores de la ciencia, por desfiladeros filosóficos, por los horizontes espirituales, por senderos metafísicos, por jardines poéticos, por el compromiso con el juego de los niños… van anhelando y construyendo una cultura de paz, de justicia, de armonía con la naturaleza, de relevancias del sentido
Palabras e imágenes donde se encarnan sentires amistosos, deseos de diálogo entre quienes, transitando por caminos sociales, por puentes interpersonales, por búsquedas interiores, por los rigores de la ciencia, por desfiladeros filosóficos, por los horizontes espirituales, por senderos metafísicos, por jardines poéticos, por el compromiso con el juego de los niños… van anhelando y construyendo una cultura de paz, de justicia, de armonía con la naturaleza, de relevancias del sentido.
Palabras e imágenes donde se encarnan sentires amistosos, deseos de diálogo entre quienes, transitando por caminos sociales, por puentes interpersonales, por búsquedas interiores, por los rigores de la ciencia, por desfiladeros filosóficos, por los horizontes espirituales, por senderos metafísicos, por jardines poéticos, por el compromiso con el juego de los niños… van anhelando y construyendo una cultura de paz, de justicia, de armonía con la naturaleza, de relevancias del sentido.
Alguna vez se ha preguntado ¿Por qué si somos iguales, existen tantas desigualdades?
Esta nota nos trae análisis y reflexión al respecto, al conmemorarse 17 años de proclamación del Día Internacional para la Tolerancia.
Nota publicada en el Diario La Industria de Trujillo - Perú.
16 de Noviembre de 2012.
Autora: Mariana Carranza Ancajima - Comunicadora Social.
CO.INCIDIR 106 SEPTIEMBRE 2023 (PARTE 1).pdfmaliciapino
Palabras e imágenes donde se encarnan sentires amistosos, deseos de diálogo entre quienes, transitando por caminos sociales, por puentes interpersonales, por búsquedas interiores, por los rigores de la ciencia, por desfiladeros filosóficos, por los horizontes espirituales, por senderos metafísicos, por jardines poéticos, por el compromiso con el juego de los niños… van anhelando y construyendo una cultura de paz, de justicia, de armonía con la naturaleza, de relevancias del sentido
Palabras e imágenes donde se encarnan sentires amistosos, deseos de diálogo entre quienes, transitando por caminos sociales, por puentes interpersonales, por búsquedas interiores, por los rigores de la ciencia, por desfiladeros filosóficos, por los horizontes espirituales, por senderos metafísicos, por jardines poéticos, por el compromiso con el juego de los niños… van anhelando y construyendo una cultura de paz, de justicia, de armonía con la naturaleza, de relevancias del sentido.
Instrucciones del procedimiento para la oferta y la gestión conjunta del proceso de admisión a los centros públicos de primer ciclo de educación infantil de Pamplona para el curso 2024-2025.
LA MEMORIA PARA LA CONSTRUCCIÓN DE PAZ: Deporte y expresiones culturales como formas creativas para construir y transmitir memoria
1. Universidad Nacional De Colombia
Facultad De Ciencias Humanas
Departamento De Trabajo Social
Práctica De Derechos Humanos, Desplazamiento Forzado Y Construcción De Paz
ESTUDIANTES:
David Alexander Herrera Mora
Diana Milena Marentes Hortua
LA MEMORIA PARA LA CONSTRUCCIÓN DE PAZ:
Deporte y expresiones culturales como formas creativas para construir y transmitir
memoria.
En los pasillos, en la calles, en los hogares, la escuela, el parque, la vereda, transitan historias,
que, como impulsadas por manos artistas, moldean la cotidianidad, hablan del pasado, del
presente y proyectan el futuro.
El contexto de guerra en el que vive la sociedad colombiana ha transformado las dinámicas
campesinas, sus relatos los han desbarato, desviado, robado y ocultado. A diario vemos en las
noticias las consecuencias nefastas de la guerra, algunas veces con tristeza, otras con resignación
contemplativa y es que esta nos ha parecido lejana como el ritmo agitado de la ciudad que no
nos permite pensar más allá de la inmediatez.
Bajo estas circunstancias, el proyecto de construcción de paz del que tanto se habla, requiere
para fortalecimiento del reconocernos como sujetos con poder de incidencia ante un escenario
que aqueja nuestra cotidianidad, en el discurso, la práctica y la vivencia. La paz entonces debe
sentirse como propia, no como un regalo de otros o un objeto que negocian quienes hemos
aceptado como poderosos. Aquí el poder para superar el conflicto armado está en cada uno de
nosotros, en nuestras palabras y en construcción de realidad que estas generan.
Así pues, el poder de la palabra es el de sentir, transmitir y comunicar hechos vivenciales. Para
esta ocasión, queremos resaltar algunas de las experiencias construidas y conocidas en el marco
de la práctica: Derechos Humanos, Desplazamiento Forzado Memoria y Construcción de paz,
indicando allí elementos comunes sobre aquello que llamamos memoria, así como sus impactos
en las comunidades que se aventuran a construir narrativas de vida bajo elementos creativos,
hablando del sentido de sus territorios y de su cotidianidad.
Todas estas prácticas artísticas, deportivas y culturales son “recursos expresivos” (memorias en
tiempos de guerra), que facilitan el fluir de las emociones, permitiendo contar de manera única
las experiencias, el dolor y los anhelos, así como narrar el horror y transformarlo en esperanza.
Nuestro país vive una larga historia de violencia, signada constantemente por los poderes
económicos y del mercado. A pesar de ello, la sociedad muestra una renovada capacidad de
resistencia, esto a través de la memoria y la lucha por la justicia y la reparación. La memoria
2. aparece entonces como un factor de denuncia y afirmación de respuesta ante la guerra y el
silencio impune que se querido imponer a las víctimas1.
Es así como pretendemos exponer de manera sencilla dichas experiencias, resaltando sus formas
creativas y la manera como llegan a ser necesarias en un ejercicio terapéutico. Así, veremos la
construcción de memoria como ejercicio narrativo posible bajo múltiples formas, que mueve los
sentidos y activa la creatividad. Se narra con sonidos, canciones, movimientos, puestas en
escena, gritos, silencios, esculturas, poemas, tejidos, se narra desde prácticas cotidianas de
resistencia ligadas al territorio y a la vida. Allí reside la importancia en transmitir y construir
memoria con los niños y niñas para que se apropien de su historia y la recreen.
MEMORIAS SENTIDAS Y CREATIVAS
La construcción de memoria como ejercicio dinámico y permanente, se materializa en múltiples
formas, donde el ser humano se compromete desde la razón y desde el sentir. La memoria pone
en juego la emoción, los sentimientos, permitiendo conectar un hecho con lo más profundo del
ser-, anclado a las personas en la historia y donde la historia marca a las personas.
Por esta razón, hablar de memoria implica apelar a narrativas vivas que conectan pasado,
presente y futuro, pero que repercuten en otros. Por tanto es la memoria un acto comunicativo,
conmemorativo y transformador. Tejer memoria indica necesariamente una relación con otros
que escuchan, interpretan, aceptan o cuestionan lo que escuchan, así como construyen sus
propias versiones, y aportan a la construcción de historias comunes.
Del texto Bojayá, memoria y río. Violencia política, daño y reparación. (2005), retomamos
elementos para entender el concepto de Memoria, así:
El trabajo sobre la memoria implica una apuesta para que la comunidad emprenda un
proceso de revisión crítica de su pasado que le permita fortalecer su identidad y
constituirse como “sujeto social”, esto es, con capacidad para asumir agencia y ser actor
del propio destino." (Pág. 164). "Trabajar sobre la memoria, en este orden de ideas, se
plantea por un lado como un ejercicio con un profundo valor terapéutico , en el sentido en
que permite que las personas, individual y colectivamente, encuentren un recurso para dar
trámite al dolor y por esta vía elaborar los duelos(...) La memoria entonces se traduce en
posibilidades de acción, por cuanto provee un repertorio de significados y sentidos que
permite que los sujetos, además de reconocerse como víctimas, se identifican como
actores, por lo que hicieron o por lo que pueden hacer." (Pág. 165)
La memoria se presenta como un ejercicio de denuncia, de reconstrucción de proyectos de vida,
de elaboración de duelos, de toma de conciencia, de empoderamiento sobre el territorio, así
como un ejercicio terapéutico. Hacemos memorias para rehabilitar espacios, para volver a pensar
1
Prólogo ¡Basta ya! Colombia: memorias de guerra y dignidad. 2002-2010 Grupo de Memoria histórica.
3. en futuros posibles, para pedir justicia, para vencer el miedo, para mover la solidaridad. Se hace
memoria para resistir. Los ejercicios de memoria son entonces procesos generadores, que
movilizan las ideas y acciones. Su objetivo no es recordar para que las personas sean víctimas
por siempre, sino por el contrario, se recuerda para resignificar y trazar nuevos caminos de vida.
ESCUELA DE FE Y ESPERANZA.
“quisiera que todos estuviéramos en el Magdalena...siempre que veía llover, salimos a
mojarnos, el cielo se ponía oscuro...corríamos hasta caernos!....... las casas eran de bareque, de
greda. Salía a jugar en la noche a la lleva, pochados, era muy travieso, salía con mis amigos,
tirábamos piedra a las casas.. Quisiera que las personas se sientan orgullosas de mí… Me gusta
estar solo en mi casa escuchando música, o salir a caminar por el barrio para intentar
componer, me voy a la laguna y allí puedo cantar” (Miguel, 15 Años)
La escuela Popular Fe y Esperanza, ubicada en Altos de Cazucá, Comuna IV del barrio el
Progreso en Soacha, es uno de los espacios de trabajo en la práctica. Allí en el encuentro con
niños y niñas se busca recuperar el sentido de la escuela junto al proceso desarrollado por el
profesor Nelson Pájaro. El encuentro con niños y niñas a partir del juego, la lúdica, la pintura,
los dibujos, la fotografía y el teatro permite construir, valorar y resaltar las habilidades de cada
niño y niña; así como la expresión de anhelos y miedos.
Por su parte, la fotografía social ha sido una de las metodologías más usadas, ya que permite
construir un tipo de narrativa a partir de las imágenes generadoras, donde se cuentan historias
propias, asociadas al territorio, la familia y los amigos. Así, la fotografía es una forma de
comunicar a los demás mis sentires subjetivos, de movilizar sentimientos e ideas, convirtiéndose
en una herramienta útil para el trabajo con niños y niñas que los convierte en protagonistas al
permitirles decidir sobre el qué, cómo y por qué fotografiar.
ESCUELA DE DERECHOS HUMANOS, DEPORTE Y CULTURA: RESISTENCIA Y
DIGNIDAD DESDE EL FÚTBOL
“Yo estaba con amigo jugando maquinas, cuando claro sonó un tiro. ¡Punn! nosotros salimos y
miramos, era Camilo que estaba muerto, era un chino vicioso. A nosotros no nos ofrecen vicio.
En otra ocasión, un tipo robo, ese mismo día lo cogieron y lo mataron en la curva.
Acá solo matan ñeros, pues la limpieza. Pero uno se descuida y lo pelan a uno, acá llega la
mano negra. Vienen en camionetas negras 4x4, blindadas y de noche o madrugada. Allí mataron
harta gente, cogieron con una mini busi y praaaa. A otro lo mataron allí al frente de una tienda,
a uno lo mataron y al otro chino le paso el tiro acá al lado, tenía la jeta abierta así, ejemplifican
pronunciando la letra a y sobrevivió” (Relato de un chico de 12 años).
El fútbol como práctica deportiva se convierte en un escenario generador de espacios de
encuentro, donde tanto niños como niñas comparten un mismo territorio a través del juego, con
ello resignifican un territorio atravesado por muertes, miedo y la zozobra. Llenar de sentido el
territorio de la cancha, implica ejercer sobre él prácticas de cuidado, tales como la pinta de arcos,
4. la recolección de basuras, la construcción colectiva y cooperativa de los materiales necesarios
para su cuidado, tales como la malla de arcos, junto a zanjas de desagüe y un mural de
apropiación.
Tras esta breve descripción, ¿la memoria cómo opera? En ese diálogo que acompaña la práctica
del fútbol, vienen las reflexiones sobre los amigos llevados por el consumo de sustancias
psicoactivas, asesinados tras la mal llamada “limpieza social”, algunos de sus cuerpos aparecen
sobre el territorio de la cancha y otros por los alrededores del barrio. Decimos entonces que la
memoria opera como ese recuerdo vivo de personas allegadas víctimas del accionar de grupos
armados ilegales. De igual manera entre los temas de conversación para los chicos y chicas está
el gusto por el barrio en relación con los lugares de procedencia, conversaciones que nos indican
el impacto del proceso de la escuela de deportes, al mostrarla en algunos casos como el único
referente de socialización y recreación al que tienen acceso los chicos y chicas.
Cabe señalar, que el mural a través de la transmisión de alegrías y tristezas de los chicos y
chicas, viene a ser una expresión de memoria, denuncia, duelo y de apropiación por el territorio.
“Entre los gustos por el barrio sobresale el jugar y hacer deporte en la cancha, la institución
educativa aledaña a la cancha llamada “El Progreso”. Adicionalmente, el gusto por el barrio
está directamente relacionado con las personas, su alegría y carisma, así como la práctica del
fútbol, el montar cicla y estudiar. (Fuente sistematización de encuestas, Escuela de Deportes,
Derechos Humanos y cultura)
SALÓN DEL NUNCA MÁS. PARA NO OLVIDAR
“La voz de las víctimas necesita ser escuchada. Hay un país que habita en todos los rincones. al
borde de los ríos, junto al mar, en la selva, en humedales, y en desiertos, en las calles, en
grandes mansiones y debajo de los puentes unos ven el país detrás del televisor, y detrás del
televisor no están las víctimas, las víctimas son de carne y hueso, y respiran y sufren, muchas
veces solas, la mayor parte del tiempo arrinconadas en el drama de sus lágrimas. Nadie puede
llorar por ellas, nadie puede pagar por ellas, perdonar por ellas, nadie puede pagar en oro los
abrazos que perdieron. La voz de las víctimas necesita y debe ser escuchada y detrás de las
voces, hay un sitio donde viven los ausentes. Hoy quisiéramos escuchar su respiración, ellos
necesitan de nuestra sonrisa, somos mensajeros de la vida. Ellos eran buenos porque tenían
sueños, y fueron niños, tuvieron juguetes, y en sus cunas también habitan Ángeles, y tuvieron
cascabeles y madres hermosas. La voz de las víctimas necesita y debe ser escuchada, el país
debe escuchar la voz de las víctimas, porque todos marcharemos. ¡Porque todos somos
víctimas!” (Salón del nunca Más. Granada Antioquia)
La experiencia de Granada Antioquia, nos muestra como una comunidad tras la incursión de los
grupos insurgentes hacia las décadas de los 80 y 90, se ve afectada en su conjunto por la guerra.
La oleada paramilitar a principios de este siglo, a través de masacres y asesinatos con sevicia
convirtió a la población en objetivo militar, desencadenando así una guerra que no discrimino a
la población civil.
Bajo este panorama, la memoria aparece como una herramienta que permite rescatar los derechos
5. y la dignidad de las personas en la vía del perdón por parte de una sociedad que reclama justicia
y verdad. Allí, cada persona desaparecida se conmemora tras la ilusión y la esperanza de que
algún día va a regresar, y si no por lo menos de que se verá la justicia operar, dándole a los
familiares de los desaparecidos el acceso a la verdad, la reparación y las garantías de no
repetición por parte de este Estado.
El salón del nunca más es un casa de memoria viva, porque cada elemento que allí se encuentra
tiene un lazo con el presente que lo sostiene para que no se olvide. Son múltiples los elementos
creativos que hacen memoria, un ejemplo de ello son las bitácoras: diarios individuales para cada
persona muerta o desaparecida, donde sus familiares, amigos, vecinos, escriben de forma libre y
espontánea. Es un ejercicio liberador porque en la escritura se exterioriza el significado de la
pérdida, afloran los sentimientos, los sueños y las formas de alcanzarlos. La bitácora es un buen
mecanismo para que los niños y niñas se conecten con los hechos del pasado, no olviden lo que
pasó en su territorio recordando a los suyos, así como la experiencia dolorosa que une a su
pueblo.
De manera que son amplias las formas de hacer memoria y resistencia para no olvidar,
denunciar y despertar a la realidad. Allí, experiencias como abriendo trochas por la vida, jugar,
puestas en escena, exorcizar los lugares, construir el salón del nunca más, son formas de decir
que somos personas con dignidad y con derechos, capaces de hacer y exigir. Por ejemplo exigir
apoyo en situaciones de desbordamiento, tener quien escuche, acompañe y que haya continuidad
del proceso.
Agregado a lo anterior, Granada resulta ser una experiencia exitosa y admirable de organización,
que funciona una vez se reactiva la conciencia, el compromiso y el sentido comunitario, ético y
político desde el empoderamiento de personas que se asumen como sujetos de derechos.
COMUNIDADES DE PAZ DEL BAJO ATRATO CHOCOANO: RESISTENCIA DESDE
LA MEMORIA
“ya paren la guerra, ya paren, que no la queremos vivir, no no no, porque a nuestro destino, a
traído miseria, miseria grande” (Resistentes)
Las comunidades de paz del Bajo Atrato Chocoano, se reunieron en la comunidad de paz de las
Camelias, abriendo sus puertas al grupo de Danza folclórico Pacandé. Estas comunidades a
mediados de los noventa, fueron víctimas de la violencia sociopolítica de distintas maneras, entre
ellas el desplazamiento forzado, las masacres, asesinatos selectivos, limitación de la movilidad
en los territorios, violaciones, falsas acusaciones. Entre los victimarios se identifican distintos
actores armados, quienes los sacaron de sus territorios para facilitar la expropiación y pasarlos a
manos de empresarios de palma africana junto a otro tipo de plantaciones.
A pesar de todo, algunos decidieron retornar a sus tierras, reapropiarse del territorio y construir
comunidades de paz, espacios donde los actores armados no son bienvenidos. La experiencia se
replica obteniendo apoyo entre las comunidades, quienes se solidarizan, construyen redes y
trabajan en la memoria como camino de resistencia. En la experiencia fue posible compartir con
6. comunidades como Camelias, Jiguamiando, Caracolí, Cacarica. Chicas y chicos entre los 13 y 20
años relataron sus historias de lucha frente a los visitantes a través de expresiones culturales
como la danza, la música, el teatro y la poesía. Muchos de estos chicos salieron del territorio
cuando eran bebes o niños de corta edad, algunos tienen recuerdos vagos de hechos de violencia,
de pérdidas de familiares, de desarraigo. Es un proceso de tradición particular, ya que para
algunos el desplazamiento que los hizo vivir en la ciudad a su vez implicó un desarraigo cultural,
sin embargo sus familias permanecen en los territorios, construyen identidades con su sello
particular, han sabido apropiarse de su historia, de las formas de mantenerla y transmitirla a
través de expresiones artísticas que mezclan lo urbano y lo tradicional. Para ellos las reuniones
implican lanzarse a contar un chiste, un anécdota. Después aventurarse con una canción,
improvisar una rima, contar cual ha sido su lucha y como con estos medios han sabido resistir. El
rap, fue una de las formas de expresión más usadas por las y los jóvenes reunidos, que
improvisando y cantando temas que los de otra generación les cantaron a ellos, mantienen la
memoria viva, con recursos que conectan con mayor facilidad y libertad las emociones, que
tiene que ver con su identidad, ejemplificando formas distintas de contar.
ELEMENTOS COMUNES EN LA CONSTRUCCIÓN DE MEMORIA.
De los espacios socializados, identificamos formas particulares de hacer memoria, a pesar de las
diferencias persisten palabras claves que atraviesan todas estas experiencias. Así, construir
memoria es un ACTO DE RESISTENCIA, que vence el miedo a pesar de que se continúa en
escenarios de guerra, donde impera la impunidad, la indiferencia y la rutina nos absorbe.
La memoria es una lucha por la VIDA Y LA DIGNIDAD, por ser reconocidos como víctimas
de un conflicto sociopolítico en el que el Estado por acción u omisión se des responsabiliza de
sus fines constitucionales tales como la defensa por la vida y el territorio, desconociendo a sus
ciudadanos como poseedores de derechos y libertades, miembros del pacto social primigenio que
dio origen al Estado.
Por su parte, LA GUERRA sustrae a las personas y comunidades de sus proyectos de vida, de
las maneras más abruptas y deshumanizantes. Hecho que nos hace un llamado a que estos actos
sean reconocidos y juzgados, para que haya verdad, justicia y reparación.
La SOLIDARIDAD, se entiende como una forma de vida que reconoce a las demás personas
como iguales en tanto sujetos de derechos y capacidades, el allí donde los ejercicios de memoria
nos hacen ver que no estamos solos a través de historias compartidas que nos remiten a un dolor
deshumanizante, entonces ¿por qué permanecer solos? si la unión hace la fuerza.
Así mismo, las experiencias sobresaltan la relevancia de los PROCESOS ORGANIZATIVOS,
ya que estos permiten pensar en comunidad a partir de acuerdos mínimos que respeten las ideas
de los otros, ubicándolos como formas de resistencia y lucha.
Por último cabe preguntarnos ¿que nos compete como Trabajadoras y Trabajadores sociales?.
Ante todo, las comunidades y personas que han sido víctimas de la violencia sociopolítica
7. reclaman espacios de escucha, espacios que permitan narrar lo sucedido desde la voz de las
víctimas, de tal manera que sea posible transformar esas palabras en nuevas narrativas que
apoyen la reflexión para un debate social y político abierto. Finalmente se reclaman espacios
generadores donde las víctimas como protagonistas de sus propias vidas planteen y ejecuten
ideas que les sean útiles para mantener su proyecto de vida en pie.
BIBLIOGRAFÍA
Prólogo ¡Basta ya! Colombia: memorias de guerra y dignidad. 2002-2010 Grupo de Memoria
hIstórica.
Bojayá, memoria y río. Violencia política, daño y reparación. (2005),
Memorias en tiempos de guerra. (2009). Grupo de memoria Histórica