Los agujeros negros son objetos astrofísicos extremadamente densos predichos por la relatividad general. Se forman a partir de estrellas masivas que colapsan bajo su propia gravedad, atrapando la luz dentro de un horizonte de sucesos. Existen diferentes tipos de agujeros negros clasificados por su masa, y pueden tener carga eléctrica o girar. Se detectan mediante su influencia gravitacional sobre otros objetos cercanos.