El poema describe la celebración del Carnaval en un colegio, donde los estudiantes y profesores se disfrazan de personajes relacionados con la huerta. Los más pequeños se disfrazan de frutas como sandías, uvas y arándanos. Los estudiantes mayores se disfrazan de granjeros y espantapájaros. Al final, los mayores van de luto por una sardina quemada. El poema invita a todos a disfrutar de la fiesta a pesar de los disfraces.