Las comunidades Mapuche de Coñaripe y Liquiñe se oponen a los proyectos hidroeléctricos de la empresa noruega SN Power en sus territorios ancestrales, debido a los impactos ambientales y al no reconocimiento de sus derechos como pueblo indígena. A pesar de la oposición de las 16 comunidades afectadas, SN Power continúa con sus proyectos sin el consentimiento de las comunidades.