La lavadora funciona introduciendo el agua y el detergente en un tambor que gira eléctricamente para mezclarlos con la ropa sucia durante el tiempo programado; las lavadoras tienen un sensor o bloqueo en la puerta que detiene el funcionamiento o impide abrirla mientras está en uso, compuesto por una resistencia que al calentarse activa un bimetal para cerrar el contacto eléctrico y encenderla.