El documento contrasta a los inmigrantes digitales, que han quedado fuera de las tecnologías, con los nativos digitales, que han crecido con ellas. Señala que la tecnología ha influenciado la conducta de los jóvenes nativos digitales de forma que es difícil para las antiguas generaciones de inmigrantes digitales seguirles el paso o comunicarse con ellos de manera efectiva.