Los protocolos determinan las reglas y formatos que permiten la comunicación entre dispositivos en una red. Los protocolos especifican el formato y el orden de los mensajes intercambiados, así como los eventos que desencadenan respuestas entre los sistemas conectados. Algunas propiedades clave de los protocolos incluyen que sean flexibles, escalables, independientes del hardware y del software subyacente, y que permitan la detección y corrección de errores.