La maqueta de una estructura arquitectónica se sometió a tres pruebas de caída desde 3 metros de altura para evaluar su comportamiento ante impactos. En la primera caída vertical, la maqueta recibió el impacto en su base y solo sufrió desacomodo leve. En la segunda caída horizontal, los elementos verticales se desplazaron hacia abajo pero la estructura se mantuvo unida. En la tercera caída vertical, se desprendió una pieza circular y hubo mayor desalineamiento, siendo el impacto más fuerte