Este documento discute el papel de las redes sociales y las nuevas tecnologías en la formación y dinámica de los movimientos sociales en la era digital. Explica que las redes sociales son indispensables para la organización de estos movimientos a nivel global y cómo permiten la movilización, expresión política y diálogo entre diferentes visiones del mundo. También sugiere que aquellos países sin una sociedad civil equipada digitalmente son menos propensos a generar movimientos sociales.