Las redes personales permiten a los usuarios comunicarse con dispositivos electrónicos en su entorno personal como su casa, trabajo o automóvil. Estas redes usan tecnologías inalámbricas como Bluetooth o infrarrojos para conectar dispositivos de forma rápida y efectiva. Para su desarrollo completo, las redes personales deben garantizar alta seguridad, ser adaptables a diferentes entornos, y proveer una amplia gama de servicios y aplicaciones de alta calidad multimedia y de bajo ancho de banda.