Kazajistán fue parte del Imperio Ruso y luego de la Unión Soviética. Obtuvo su independencia en 1991 bajo el liderazgo de Nursultan Nazarbayev, quien aún gobierna el país de manera presidencial. La economía de Kazajistán depende de la industria petrolera y minera, aunque también es importante la agricultura. La población está compuesta principalmente por kazajos y rusos, aunque hay más de 100 grupos étnicos representados.