1. El documento habla sobre San Pedro de Alcántara, un fraile franciscano nacido en 1499 que fundó conventos y guió a muchos hacia una vida espiritual. Murió en Arenas de San Pedro en 1562 y fue beatificado en 1622 y canonizado en 1669.
2. Tras su muerte, Arenas se convirtió en un importante centro de peregrinación debido a su tumba, lo que impulsó la economía local. San Pedro también guió a muchos fuera de España a través de los frailes misioneros.
Presentación de la vida y obra de San Juan de Ávila. La hemos encontrado en internet pero no aparece su autor. Si éste la identifica que lo comunique para indicarlo.
El cura de ars sacerdote ejemplar p. ángel peña o.a.rRaquel Z
La vida del santo cura de Ars es una obra maravillosa de
Dios. Él fue un ejemplo para todos, especialmente para los
sacerdotes, de quienes es patrono y modelo. Se preocupó por la
salvación de sus feligreses, que es y debe ser la primera y
principal tarea de todo sacerdote con cura de almas. Él oraba y
se disciplinaba por la conversión de sus fieles y de todos los
pecadores del mundo entero. También oraba incesantemente
por la salvación de las almas del purgatorio.
Los dos pilares fundamentales de su apostolado eran la
confesión y la misa, recomendando a todos la confesión y
comunión frecuentes.
Fue un sacerdote austero, preocupado por las necesidades
de los demás, que oraba por la salud de los enfermos y liberaba
a los oprimidos del maligno. Para evitar llamar la atención,
mandaba a los enfermos a hacer novenas a santa Filomena con
el fin de que no hablaran de él como un santo que hacía
milagros.
No fue brillante humanamente, ni en su porte exterior,
Guia de las cartas del tarot de el extraño mundo de jack.
Arcanos mayores y arcanos menores.
Primera guía cien porciento en español!
Con 5 tiradas para comenzar predicciones.
Aprende y utiliza este mazo para divertirte.
Más contenido relacionado
Similar a SAN PEDRO DE ALCÁNTARA, ANTORCHA VIVA DE ARENAS.pdf
Presentación de la vida y obra de San Juan de Ávila. La hemos encontrado en internet pero no aparece su autor. Si éste la identifica que lo comunique para indicarlo.
El cura de ars sacerdote ejemplar p. ángel peña o.a.rRaquel Z
La vida del santo cura de Ars es una obra maravillosa de
Dios. Él fue un ejemplo para todos, especialmente para los
sacerdotes, de quienes es patrono y modelo. Se preocupó por la
salvación de sus feligreses, que es y debe ser la primera y
principal tarea de todo sacerdote con cura de almas. Él oraba y
se disciplinaba por la conversión de sus fieles y de todos los
pecadores del mundo entero. También oraba incesantemente
por la salvación de las almas del purgatorio.
Los dos pilares fundamentales de su apostolado eran la
confesión y la misa, recomendando a todos la confesión y
comunión frecuentes.
Fue un sacerdote austero, preocupado por las necesidades
de los demás, que oraba por la salud de los enfermos y liberaba
a los oprimidos del maligno. Para evitar llamar la atención,
mandaba a los enfermos a hacer novenas a santa Filomena con
el fin de que no hablaran de él como un santo que hacía
milagros.
No fue brillante humanamente, ni en su porte exterior,
Guia de las cartas del tarot de el extraño mundo de jack.
Arcanos mayores y arcanos menores.
Primera guía cien porciento en español!
Con 5 tiradas para comenzar predicciones.
Aprende y utiliza este mazo para divertirte.
Fuente: Emeric Amyot d'Inville, C.M. "Anunciar la Buena Nueva de la Salvación siguiendo las huellas de San Vicente", Vincentiana: Vol. 41: No. 4, Artículo 7.
Esta guía es una ayuda para hacer por tu cuenta el retiro mensual, allí dónde te encuentres, especialmente en caso de dificultad de asistir en el oratorio o iglesia donde habitualmente nos reunimos para orar.
Diseña una experiencia de aprendizaje sobre lectura y escritura como
herramientas de aprendizaje transversal integrando recursos digitales.
La experiencia se debe planear en el formato 1 y luego, se socializa en
una presentación Power Point y se sube a un Slide Share, Issu u otro
recurso que genere un enlace para su visualización.
SAN PEDRO DE ALCÁNTARA, ANTORCHA VIVA DE ARENAS.pdf
1. SAN PEDRO DE ALCÁNTARA, ANTORCHA VIVA DE ARENAS
Buenos días a todos. Paz y Bien.
Muchas gracias Lucidio, por tu presentación y tus palabras.
Quiero empezar mi intervención dando las gracias a la Orden Franciscana Secular por decidir
realizar este Encuentro de Zona en nuestra ciudad de Arenas de San Pedro, coincidiendo con el
IV Centenario de la Beatificación y Patronazgo de San Pedro de Alcántara, año tan especial para
nosotros. Bienvenidos, espero que disfrutéis de nuestra ciudad.
Muchas felicidades a la Orden Local, a su ministra Sagrario Blázquez, y la anterior Valentina
Flores, y a la también arenense, Maria José Píriz, ministra de zona, por la excelente labor religiosa
y social que hacéis en nuestro pueblo, y gracias por haberme invitado en este Encuentro.
Para mi es un placer poder hablarles hoy de San Pedro de Alcántara, pero también una gran
responsabilidad, ya que en este salón hay muchos más expertos que yo en la materia, y tras este
año de conferencias sobre nuestro santo culminadas el fin de semana pasado en el Congreso
Nacional está todo dicho y el listón muy alto. Pero voy a intentarlo.
Mi objetivo hoy, en estos minutos que tengo es trasladar una idea clara de quién fue fray Pedro y
qué significa para nosotros. Para ello me centraré en cuatro bloques diferenciados:
1.Vida y muerte del Santo:
La historia de nuestro santo se remonta a 1499 cuando nace en Alcántara. Siendo el segundo hijo
de de Alonso Garavito, bachiller y licenciado, y María Vilela de Sanabria, ambos de familias
acomodadas de la villa. Le bautizan con el nombre de Juan de Sanabria, como su abuelo
materno.
Cuando tan solo tenía siete años muere su padre, y poco después su madre se casa con Alonso
Barrantes, persona adinerada e influyente.
En Alcántara cursa sus primeros estudios, y parece ser que ya se le veían buenas dotes
intelectuales. Años después estudia en Salamanca, aunque a día de hoy no se sabe con certeza
qué cursó, presumiblemente estaría relacionado con Leyes, como su padre, o estudios
eclesiásticos. Aunque lo cierto es, que no termina sus estudios y en 1515 por convencimiento
propio ingresa en el Convento franciscano de los Majarretes, tomando el nombre de Fray Pedro
de Alcántara. Su vocación religiosa, seguramente le viene de su madre, que profesó un gran amor
a Cristo y a la Virgen.
Hace el noviciado en los Majarretes, donde elige una vida de oración, penitencia y pobreza,
renunciando a todos sus bienes. Sigue con su formación humanística, teológica y franciscana y a
los 25 años se ordena sacerdote.
Pronto se convierte en un fraile andariego, que viajó de forma incansable por motivo de los cargos
que va ostentando dentro de la Orden Franciscana, como Ministro Provincial, con el objetivo de
fundar conventos y el deseo de reforma en la oración, penitencia, pobreza y descalcez.
1. Vida y muerte del Santo.
2. Proceso de Beatificación/Canonización y Patronazgo
3. ¿ Qué significó San Pedro de Alcántara para Arenas y para el resto
del mundo?
4. ¿Como celebra Arenas a su Santo, ayer y hoy?
2. Hay que ponerse en el contexto histórico de una iglesia que clama en reformas por toda
Europa, con Lutero entre otros. En España se formaron dos corrientes reformadoras: una, de
recogimiento, oración y contemplación; y otra, de evangelización, acción educativa y auxilio a
los pobres. Y fray Pedro se quedó con lo mejor de ambas.
Por tanto, estamos hablando de un hombre Reformador, Fundador de conventos, pero también
escritor y un gran guía espiritual.
En Portugal, promueve también un movimiento de reforma con el apoyo de la monarquía,
siendo muy amigo del Rey Juan III y guía espiritual de toda su familia.
Desde su convento de El Palancar hace una gran labor de evangelización por toda
Extremadura, Andalucía y Castilla, llegando a ricos y pobres, y todos buscan en él consejo.
Desde los más humildes, a los grandes personajes de la época, como Francisco de Borja o el
mismo Emperador Carlos V, que ya en su retiro de Yuste, le llama como confesor.
En su faceta de penitente, hay que destacar que dormía poco más de hora y media al día,
sentado, descansando su cabeza sobre un madero, y come con frecuencia solo cada tres días,
poco más que pan duro y hierbas.
Tampoco hay que olvidar que vive una intensa vida de oración, de la que es un eco su “Tratado
de oración y meditación” que ha llegado a nuestros días, siendo una de las obras de oración
más traducidas.
En 1558, pasa a formar parte de la nueva Custodia de San José formada por un pequeño grupo
de hermanos que buscan el retorno a la vida eremítica y la más estricta observancia de la
Regla franciscana. Es en abril de 1559 cuando estando en Roma, el Papa Pablo IV le nombra
“Comisario general de los frailes menores reformados”, con plena autoridad para fundar nuevas
casas y constituir una Provincia una vez que tenga suficiente número de conventos para ello.
Ahora vamos con la parte que más nos interesa a los arenenses, cuando conoce nuestra
entonces Villa, en agosto de 1560, en uno de sus viajes a Ávila para tratar con Guiomar de
Ulloa la reforma de uno de sus conventos.
La Cofradía de San Andrés, le ofrece la Ermita de San Andrés del Monte para la fundación de
uno de sus conventos. Fray Pedro, cuando conoce el lugar, accede a la petición y asombrado
por el entorno asegura que “Dios tiene grandes designios sobre este lugar.”
el 3 de agosto de 1561 es una fecha importante para nosotros, ya que se firma oficialmente la
cesión de la Ermita y los frailes toman posesión de la misma para establecerse en Arenas y
empezar con las obras del convento.
En Ávila conoce a Teresa de Jesús, y nace una profunda amistad entre ambos santos, por su
búsqueda similar del amor a Dios, sus ansias de reforma, y su alta contemplación. “Este santo
hombre me luz en todo" afirma la Santa. Le guía e impulsa en sus proyectos y ella, en el libro
de la Vida le describe y elogia con palabras como estas:
“Era muy viejo cuando le vine a conocer y tan extrema su flaqueza que no parecía sino hecho
de raíces de árboles. Con toda esta santidad era muy afable, aunque de pocas palabras, si no
era con preguntarle. En éstas era muy sabroso, porque tenía muy lindo entendimiento”.
Se hacen más asiduos sus viajes a Ávila para tratar con la Santa y con las autoridades sobre
sus fundaciones, fijando su residencia en Arenas en abril de 1562.
Desde ese momento, se hace muy presente en la vida de Arenas, predica en la Parroquia de
Santa María, visita a enfermos y da consuelo espiritual, ganándose el aprecio y cariño de las
gentes. Muchos vecinos aseguraron después que “ningún sermón oían que más les moviese
que una misa del santo fray Pedro”.
3. Su estancia en Arenas es como una antorcha, como una llama que guía y acompaña a los que
más lo necesitan, y la fama de sus prodigios recorre Castilla. Son varios los testigos arenenses
que dan fe de diversos milagros achacados a fray Pedro o por su mediación: son continuos sus
éxtasis en la oración y numerosas sus curaciones: la de una mujer enferma de la vista, la de
un niño de meses, …
Su enfermedad se agrava, y aun así asiste en Deleitosa a un Capítulo que preside, pero los
Condes de Oropesa, amigos del santo, le llevan a su castillo para que sus médicos le atiendan.
Allí, ve pronta su muerte y le pide al Conde ser trasladado a Arenas para morir con sus frailes.
En Arenas es atendido en la Casa del doctor Vázquez, que después fue enfermería y hoy
Residencia de Ancianos. Allí en la mañana del 18 de octubre, rodeado de sus frailes entregó su
alma, absorto en una visión de la Santísima Trinidad, y diciendo “qué alegría cuando me dijeron,
vamos a la casa del Señor”.
Rápido corrió la noticia por todo el pueblo y comarca, y nadie quiso faltar a despedir a fray
Pedro, acompañándole en el entierro al día siguiente hasta la Ermita de San Andrés, miles de
personas, en un día de lluvias torrenciales, que cesaron mientras duró el traslado.
“Todos llegaban a tocarle y besarle los pies y la manos –escribe su primer biógrafo, fray Ángel
de Badajoz (1584)–, comenzando luego a venerar su cuerpo y reliquias como de santo, y era
necesaria mucha guarda para guardarle de la gente que venía a verle y querían llevar algo de
él”.
Este es un signo claro de su santidad.
2.Proceso de Beatificación/Canonización y Patronazgo:
Como hemos visto en los acontecimientos de su entierro, su fama de santidad estaba ya en vida
extendida por toda la península, y eran muchos los que se acercaban a la ermita a visitar su
tumba, gentes de toda condición social. Muchos atribuían a su intercesión curaciones
milagrosas y sucesos extraordinarios.
Por este motivo los superiores de la Provincia franciscana de San José, a los cuatro años de la
muerte de fray Pedro, realizaron un primer reconocimiento de sus restos. El cuerpo del Santo,
cubierto con un licor como de aceite, despedía un olor suave.
En 1591, de alguna manera ya se reconoció por la Iglesia la santidad de Pedro y hacen el
primer traslado de sus restos elevándolo del suelo.
Pero pasan casi 30 años para que se inicie el Proceso de Beatificación. ¿Por qué se tarda
tanto? Según el historiador José Antonio Calvo, debido a que en aquellas décadas los distintos
Obispos de Ávila, prácticamente no viven en la ciudad, y no se hacen cargo de esta demanda.
No es hasta 1601, cuando el primer Obispo, tras la muerte del Santo, reside de continuo en
Ávila y conoce la situación, a petición del Ministro Provincial aprueba el inicio del Proceso de
Beatificación.
Los primeros testimonios se recogen en Arenas a 16 testigos, de los cuales 8 conocieron en
vida al Santo. Aunque en los años siguientes, se siguen recogiendo por toda la comarca, en
Ávila, en las diócesis de Toledo y Coria, en Plasencia y en la zona de Alcántara, cientos de
testimonios, es determinante la participación de los arenenses.
Arenas se vuelca en el Proceso, en proporción, la que más testigos aporta, quizá por sus
últimos años relacionados a nuestro pueblo, o quizá por el cariño especial de las gentes de
Arenas, y sobre todo porque aquí están sus restos. El caso es que gracias a los arenenses y
vecinos de nuestra comarca, sin olvidarnos de los frailes, podemos decir que se impulsó y llegó
a buen puerto la Beatificación y posterior Canonización.
4. En 1616 se trasladan de nuevo sus restos para la veneración en una capilla que se hace en el
lateral de la ermita.
Con todos los testimonios, y las reiteradas peticiones de la Orden Franciscana, Cardenales,
Obispos, Reyes, nobles y pueblo llano, el 18 de abril de 1622, el Papa Gregorio XV lo Beatificó,
permitiendo para él la gloria de los altares.
En cuanto se tiene noticia en Arenas, las autoridades comienzan con los trámites para
nombrarle Patrón, cosa que se hace oficial el 19 de octubre de ese mismo año en la Parroquia
de Arenas, donde le declaran Patrón de la Villa y su jurisdicción, señalando como día de fiesta a
perpetuidad el 19 de octubre.
Estas dos efemérides son las que estamos celebrando este año tan especial para nosotros, que
luego veremos.
Pero el Proceso sigue camino a la santidad, y por fin el 28 de abril de 1669 el Papa Clemente IX
lo Canoniza, siendo ya conocido en todo el mundo como San Pedro de Alcántara.
3. ¿ Qué significó San Pedro de Alcántara para Arenas y para el resto del mundo?
Ya desde su muerte, pero especialmente tras su Beatificación, y una vez que es nombrado
Patrón de Arenas, San Pedro se convierte en antorcha viva del pueblo de Arenas, como digo en
el título de la conferencia.
Antorcha y luz también como patrón, que guía espiritualmente a todo un pueblo, como referente
de humanidad, y de oración.
Arenas da un giro muy importante tras estos acontecimientos. Pasa de ser un pueblo más del
sur de Castilla, con cierta importancia por el lugar geográfico y estratégico donde nos
encontramos, pero al fin y al cabo una villa más; a ser punto de referencia religioso gracias al
sepulcro del santo. Desde entonces son miles las personas que acuden a la ermita de San
Andrés a pedir favores o agradecer los concedidos, y Arenas se pone en el mapa, no solo de
España, sino de gran parte del mundo.
Tras la canonización, ya que Sa Pedro es de Alcántara, Arenas es de San Pedro, uniendo para
siempre el nombre de la ciudad al de su santo.
En esta transcendencia religiosa de Arenas, a través del santo, hay que destacar también y
agradecer la labor de todos los frailes alcantarinos que han pasado por nuestro convento y
desde aquí han llevado el nombre de Arenas por todo el mundo. Estamos hablando del gran
siglo español, cuando en España no se ponía el sol, y estos valientes frailes fundaron conventos
por todos los territorios, desde América a las Filipinas, llevando la fe católica, hasta Japón, de la
mano entre otros, de nuestro paisano San Pedro Bautista, que salió del convento arenense.
Por otro lado está la relevancia cultural y artística que vive Arenas en el siglo XVIII. Con el
ímpetu de algunos frailes, y el apoyo del pueblo y la nobleza, se empezó la labor de buscar
financiación para construir un capilla digna para acoger los restos de tan alto santo.
En 1757 se puso la primera piedra de la Capilla, siendo obra del Arquitecto real Ventura
Rodríguez, y en la que intervinieron, hasta su conclusión, algunos otros de los artistas más
renombrados de la época: Francisco Gutiérrez, Francisco Bayeu, Francisco Sabatini y José
Antonio Giardoni. Al final, el propio Rey Carlos III, admite la Capilla bajo su real patronato, y en
1776 se colocan los restos del santo en la Urna sobre el altar mayor de la capilla, delante de un
preciado alto relieve de Francisco Gutiérrez.
Desde entonces, Arenas cuenta con una Capilla Real, que es sin duda una de las grandes joyas
del neoclásico abulense y español.
5. En esos años, el Infante don Luis de Borbón, hermano de Carlos III decide construir en Arenas
su palacio y fijar aquí su corte y residencia. Para ello elige de arquitecto también a Ventura
Rodriguez, que al estar trabajando en la Capilla Real, a buen seguro le habló de este lugar e
influyó entre otras cosas, para que el Infante decidiera instalarse en Arenas. Como decíamos,
haciendo crecer cultural y artísticamente nuestra pequeña villa, en la que pasó largas
temporadas Goya o el compositor Luigi Boccherni entre otros, pero eso es otra historia.
Con esto, vemos claramente el cambio al que se ve sometida la villa de Arenas, y la relevancia
que adquiere desde la muerte de fray Pedro.
Pero, la importancia del santo, va más allá de nuestras fronteras, ya que con la canonización se
universaliza la historia personal, la santidad y el culto en todo el mundo. Empieza a ser uno de
los santos más conocidos, llegando a ser a día de hoy el cuarto santo franciscano más
representado en todo el mundo.
Como prueba de ello, en la nave central de la basílica del Vaticano, se colocó una gran estatua
de San Pedro, frente a la de Santa Teresa, en 1752, que es un orgullo para los arenenses y
abulenses cada vez que visitamos Roma.
Sus méritos y fama le llevan a ser nombrado Patrón de Extremadura, de la Diócesis de Coria-
Cáceres, de Alcántara o de San Pedro en Málaga, con quien acabamos de hermanarnos.
También es nombrado Patrón de Brasil y de su ciudad Petrópolis.
Raro es el país católico, donde no te encuentras una Imagen del Santo, en alguna de sus
iglesias, y no os imagináis el orgullo que es para un arenense, encontrarte por sorpresa con San
Pedro estando a miles de km de su sepulcro.
4. ¿Como celebra Arenas a su Santo, ayer y hoy?
En este año de centenario estamos celebrando los 400 años desde que es nuestro patrón, y 400
años dan para mucho.
Nada más conocerse la noticia de su Beatificación, Arenas lo celebra a lo grande, con
pasacalles, pirotécnia, bailes, y por supuesto, con toros. Existen datos de aquel año de las
celebraciones taurinas en Arenas, encierros y corridas, y hasta nuestros días, nunca han faltado
los toros en nuestras fiestas.
La talla patronal, a la que los arenenses tenemos un especial cariño, cumple también 400 años,
creyendose esculpida por un artista que posiblemente conoció en vida al santo, o que tuvo muy
buenas referencias para hacerla a su imagen y semejanza. Desde entonces, ha presidido todas
las procesiones, y se ha convertido en la Talla más querida, junto a la de la Virgen del Pilar de
Arenas.
Desde los inicios ha sido tradicional y sigue siéndolo, realizar una Romería al Campillo, como
nosotros llamamos a los alrededores del Santuario, el día de la fiesta, el 19 de octubre. Desde
hace años declarada de Interés Turístico.
Seguro que hablo por boca de muchos, cuando digo que a pesar de todas las fiestas que
tenemos en Arenas, las de San Pedro son las más especiales. Ya días antes de la fiesta,
cuando empezamos la novena, se despiertan unos sentimientos que son difíciles de explicar.
Todos acudimos más a menudo al santuario, y muchos nos despertamos para rezar el rosario
andando ese camino tan nuestro a la oscuridad de las 6 de la mañana.
Ese rosario en la intimidad de la noche, aunque acompañado de cientos de devotos, andando,
reflexionando, pidiendo o dando gracias, es un momento único, que culmina con el
característico sonar de la campana, y el recibimiento por los franciscanos y la imagen del Santo,
en sus andas, recibiendo al peregrino.
6. Y tras la novena llega el día de la Fiesta. El día más grande de Arenas. Ese día te levantas con
otra alegría, olvidando los problemas, olvidando el día a día, ese día es San Pedro, es nuestra
fiesta.
Todos recordamos con cariño a nuestros mayores, con los que hemos estado disfrutando
siempre de ese camino, de ese Campillo, de esa procesión. El 19 de octubre, en familia o
amigos, la inmensa mayoría subimos al santuario a ver a nuestro Santo. Música, bailes
tradicionales, caballos, comida en el campo, misa de campaña, ese olor a otoño y a fiesta, a
devoción, a agradecimientos y peticiones que todos traemos a los pies del sepulcro.
Pero nuestro momento es el de las 4 de la tarde, donde miles de devotos esperan expectantes.
No hay arenense, que a las 4 de la tarde del 19 de octubre no esté presente o con el corazón
puesto en la salida procesional. ¡Cuantas lágrimas se han caído al tañir de la campana, al sonar
el Himno Nacional y atravesar el Santo Penitente la puerta de la iglesia! No se puede explicar
con palabras la emoción que la mayoríaa sentimos en esos momentos, y presentes o lejanos,
todos los arenenses estamos más unidos que nunca en ese momento.
Otra Romería que ha cogido mucha fuerza, es la que celebramos junto a Oropesa y Parrillas
unos días antes de la Fiesta, para conmemorar el último trayecto del santo antes de morir; y
siendo las fiestas religiosas, lo más importante de estas celebraciones, no faltan las fiestas
populares, y multitudinarias en la ciudad, los encierros, toros, verbenas, fuegos, toros de fuego y
cabezudos, que divierten a locales y visitantes y son un reclamo en toda la comarca.
Si en estos 400 años de patronazgo hay que destacar algunas fechas, sin duda son los
centenarios, donde la población y los frailes se vuelcan para honrar al santo con mayor
esplendor si cabe. Memorables han sido los últimos de la muerte en 1962, y del nacimiento en
1999, donde entre otras celebraciones se erigieron por suscripción popular dos esculturas en
nuestra ciudad.
Y ahora, estamos inmersos en el IV Centenario de la Beatificación y Patronazgo, que seguro se
hablará mucho con la perspectiva del tiempo, pero que hoy me atrevo a decir que está siendo
un año exitoso en todos los sentidos: religioso, cultural, histórico, artístico, festivo, turístico y
económico.
Gran parte del buen resultado se debe a la concepción de una Comisión Organizadora, donde a
parte de la Comunidad Franciscana, Parroquia y Ayuntamiento, están integradas todas las
asociaciones, organismos y sociedad civil de nuestra ciudad, y con el trabajo de todos ellos se
está llevando a cabo una gran programación de eventos de toda índole a nivel nacional,
suponiendo sin duda, un revulsivo cultural y turístico, a la par que económico para nuestras
pequeñas y medianas empresas durante todo un año, muy necesario en estos tiempos.
Relevancia nacional, encabezada por la Presidencia de Honor del Centenario, que son SSMM
Los Reyes de España, que además esperamos su visita a nuestra ciudad aún por determinar.
Aunque a lo largo del año está habiendo infinidad de actividades, el Centenario podríamos
dividirlo en 3 partes diferenciadas: las fiestas de apertura en octubre del 21, las de Beatificación
en abril del 22 y las de clausura y Patronazgo en octubre de este año.
En las primeras podemos destacar esa apertura solemne por parte del Presidente de la Junta,
Alfonso Fernández Mañueco en la Capilla Real, y el entusiasmo con el que se vivieron estas
fiestas tan esperadas, las primeras tras la pandemia.
En abril, sin duda, han sido las fiestas más especiales que los arenenses recordaremos en
años. Muchas emociones juntas en pocos días, siendo lo más importante la Bajada Procesional
de nuestro Santo a Arenas tras 23 años, y el recibimiento en la Triste Condesa por parte de todo
el pueblo y de la Virgen del Pilar de Arenas. Muchos estaréis conmigo, que ese momento fue
único y mágico. Todo un pueblo, miles de personas, venidas de todas partes, muchos que hacia
tiempo no volvían a su casa, nos dimos cita para recibir con todo el cariño a San Pedro de
Alcántara.
7. Pero no solo eso, al día siguiente y en la subida procesional de una semana después, se
vivieron momentos únicos, como el encuentro con Jesús de Medinaceli, o con la Divina Pastora,
o el paso del puente medieval, o el saludo a nuestros mayores en la Residencia y a nuestras
Hermanas Alcantarillas de Lourdes, … sencillamente inolvidables.
En lo puramente festivo, recuperamos un Vítor tradicional, que se hizo por primera vez cuando
Arenas tiene noticia de la Canonización, en septiembre de 1669, y que se perdió con el paso del
tiempo, pero recuperamos ahora con fuerza: caballos, luminarias, plegarias y cánticos por las
calles de Arenas, narrando el paso del Santo por nuestra villa, entre el fervor y devoción de los
vecinos.
Señalar también el Hermanamiento con San Pedro Alcántara de Marbella en estas pasadas
fiestas de abril. Ya en el centenario del 99 unimos la cuna y el sepulcro hermanando Arenas y
Alcántara, y ahora lo hemos hecho con esta ciudad malagueña donde tanto veneran al santo
penitente. Se fueron encantados del recibimiento de nuestra gente, y les devolveremos la visita,
más de 220 arenenses a finales de septiembre.
Aún tenemos por delante un importante calendario que cumplir, y por destacar algo, la obra de
teatro que representará la vida del santo “Hecho de raíces de árboles” en agosto en el Castillo
del Condestable Dávalos, con la participación de más de 150 vecinos entre músicos y actores.
Y como no, las fiestas de clausura en octubre, a las que estáis todos invitados, para vivir con
nosotros unos días de emoción y devoción en torno a esta figura universal.
A parte de estas fechas señaladas, todos los meses se ha celebrado de forma especial el
Jubileo en los días 19, y se han organizado conferencias, charlas, exposiciones, actividad
pastoral, …
Y en este año centenario, como ya es costumbre prácticamente, no podía faltar, el regalo del
pueblo de Arenas a su santo, y nuevamente se ha ubicado una escultura por suscripción
popular, de Miguel Ángel Sainz y Ángel Rasero en la Plaza del Santuario. “ San Pedro de
Alcántara Peregrino”, que acoge a todos los devotos, romeros y peregrinos, indicando que lo
importante está en la Capilla Real, su sepulcro, y la casa de Dios.
Para acabar como dice el Himno del Centenario:
Cuatro siglos de tu guía y protección,
hoy Arenas conmemora agradecida,
confiando que tu asidua intercesión,
la mantenga siempre fiel y encendida.
Pues que San Pedro de Alcántara, antorcha viva de nuestra ciudad, nos guíe a todos los que
acudimos a él y nos proteja siempre.
Muchas gracias.