Este documento describe las luchas que enfrentan muchos matrimonios, incluyendo los de pastores, y enfatiza la importancia de la gracia. El autor describe cómo sus celos destruían su matrimonio hasta que aprendió a apropiarse de la gracia de Dios, la cual lo liberó y le permitió amar a su esposa sin condiciones sofocantes. Concluye que para ser atentos y alentadores con sus esposas, los pastores necesitan de la gracia de Dios.