El documento describe un procedimiento en 10 pasos para analizar una muestra de suelo en el laboratorio. Se tamiza el suelo, se toma una muestra de 30 gramos y se coloca en un recipiente, donde se le añaden soluciones de peróxido de hidrógeno y ácido clorhídrico mientras se calienta y agita la mezcla. Finalmente, la muestra se seca, observa al microscopio y se pasa un imán para identificar los minerales presentes.