Investigadores de la UNAM han descubierto que la resina de desecho del guayule contiene compuestos anti-inflamatorios y potencialmente anticancerígenos. El guayule es una planta desértica que no requiere mucho cuidado o agua y puede cultivarse en grandes extensiones. Los hallazgos sobre los compuestos en la resina del guayule se han publicado en revistas científicas internacionales.