El sistema respiratorio se encarga de llevar oxígeno a las células y eliminar dióxido de carbono mediante una serie de mecanismos. Está regulado por el sistema nervioso autónomo localizado en el tronco encefálico y por el sistema nervioso voluntario. Existen dos patrones respiratorios principales: el patrón normal de unos 12 respiros por minuto y el patrón no efectivo presente en personas enfermas.