El documento analiza las características del realismo social como movimiento literario, señalando que la obra La Colmena de Camilo José Cela pertenece a este género. El realismo social utiliza una técnica objetiva para reflejar fríamente la realidad social, similar a cómo lo hacen las películas neorrealistas italianas. Carece de narrador y busca ser lo más objetivo posible. Enfatiza el diálogo y los personajes colectivos más que los protagonistas individuales.