La Iglesia Receptiva es una organización religiosa cristiana que promueve la inclusión y la aceptación de todas las personas. Busca crear un ambiente acogedor y de apoyo para aquellos que se sienten marginados o excluidos por su orientación sexual o identidad de género. Su mensaje central es que Dios ama a todos por igual, sin importar quiénes sean o cómo se identifiquen.