El estudio aplicó la prueba ICDL a 157 profesionales chilenos para medir sus conocimientos en programas como Word, Excel e Internet. Los resultados mostraron que sólo el 34,39% aprobó la prueba, mientras que el 65,61% reprobó, revelando una brecha entre las habilidades declaradas y las reales. Esto sugiere que en Chile hace falta una formación más sistemática en el uso de herramientas tecnológicas, considerando que en países desarrollados el 90% de los trabajos requieren estas capacidades.