Una central térmica es una planta donde se obtiene energía eléctrica mediante la combustión de combustibles fósiles como el petróleo, el gas natural o el carbón. El agua se convierte en vapor para mover la turbina y generar energía mecánica que luego se transforma en energía eléctrica en el generador. Europa tiene la mayor parte de las centrales térmicas del mundo, aunque los gases producidos son contaminantes y los combustibles no son renovables.