Según Aristóteles, existen cuatro tipos generales de carácter: el virtuoso, el contingente, el incontingente y el vicioso. El virtuoso toma la decisión correcta y actúa de acuerdo a ella. El contingente también toma la decisión correcta pero en contra de sus deseos. El incontingente sucumbe a sus deseos a pesar de saber que es incorrecto. Y el vicioso siempre elige lo incorrecto de acuerdo a sus deseos.