La temperatura basal se utiliza para diagnosticar la infertilidad posovulatoria. La mujer debe medir su temperatura corporal interna a lo largo de todo el ciclo menstrual para detectar el aumento de la progesterona durante la ovulación. Los métodos anticonceptivos previenen o reducen significativamente las posibilidades de una fecundación en mujeres fértiles que mantienen relaciones sexuales heterosexuales.