El documento analiza cómo la sociedad ha ido apartando a Dios de diferentes esferas como la educación y el gobierno. Argumenta que esto ha llevado a una pérdida de valores y una mayor violencia e inmoralidad. Señala que hemos aceptado cambios como prohibir la oración en escuelas, permitir el aborto sin consentimiento parental y exponer a los niños a contenidos sexuales e inapropiados. Concluye que esto es consecuencia de haber "sembrado" el alejamiento de Dios y ahora "cosechamos" una juventud sin