La resolución 125 impuso retenciones móviles y aumentó las alícuotas a los productores agropecuarios durante el gobierno de Cristina Kirchner, lo que provocó grandes protestas y cortes de ruta por parte del campo. El vicepresidente Julio Cobos decidió el destino de la ley al votar "no positivo" en el Senado para desempatar la votación, lo que significó que la resolución fue rechazada.