El Principito le revela al Aviador que en su planeta vivía una flor especial pero también vanidosa y orgullosa que confundió al Principito con su amor. El Principito decide dejar su planeta y visita otros asteroides habitados por un rey sin súbditos, un vanidoso que desea ser admirado pero no sabe para qué, y un bebedor que bebe para olvidar su vergüenza de beber.