El resumen describe la historia de "El Principito" contada por el autor Antoine de Saint-Exupéry. Narra la historia del Principito, un niño que vive en un pequeño asteroide y visita otros planetas cercanos. Finalmente llega a la Tierra, donde conoce a varios personajes incluyendo un zorro que le enseña sobre la domesticación y la amistad. El Principito extraña su hogar y flor, pero aprende valiosas lecciones sobre la naturaleza humana durante su viaje.

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BACHILLERATO OFICIAL VESPERTINO
“HERMANOS SERDAN”
NOMBRE DE LA ALUMNA: CABRERA
BENITEZ BARBARA KRISTELL
3 SEMESTRE GRUPO “A”
N.L.4
NOMBRE DEL PROFESOR: GUILLERMO
GARCIA FLORES
PROYECTO: “EL PRINCIPITO”
FECHA: 17/NOVIEMBRE/2015
FECHA DE ENTREGA:
25/NOVIEMBRE/2015

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La historia de “El Principito” es muy interesante, esta historia está narrada en
primera persona. Comienza con la historia de cómo el autor después de leer un
libro sobre la Selva Virgen llamado “Historias Vividas” trata de dibujar a sus seis
años una boa comiéndose un elefante; realizo una boa abierta y una boa cerrada.
Todos confundían su boa cerrada con un sombrero lo cual lo hizo sentir muy mal y
renuncio al dibujo pues según las personas grandes de su casa le dijeron que eso
no le serviría de nada en la vida que mejor estudiara Geografía u otro oficio. Y eso
hizo estudio otra cosa y dejo el trauma que tenía con su dibujo número 1y 2.
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Hasta que un día en su trabajo mientras volaba, su avión tuvo una falla
provocando que aterrizará en el desierto; ya estando allí se encontró con el
Principito un ser pequeño pero muy simpático; quien lo despertó. Después de eso
el Principito le conto muchas cosas de su vida como el nombre de su planeta que
era el asteroide B612, y otras cosas características de su planeta.
El principito fue el único que al enseñarle su dibujo este no dijo que era un
sombrero como las demás personas sino que noto que era una boa que había
devorado un elefante, y esto se le hacía terrible y le daba miedo; cuando el
Principito le pidió que le dibujara un cordero, él le dijo que no sabía dibujar y que
para que quería un cordero; que si no le servían unos elefantes o su dibujo de la
boa. A lo que el Principito contesto que no ya que su planeta era demasiado
pequeño y que los elefantes eran demasiado grandes y que ni encimados cabrían
en su planeta, y las boas eran demasiado peligrosas.
El principito estaba muy feliz con el cordero, bueno la caja que le había dibujado
que dentro contenía a su cordero. El principito hacia demasiadas preguntas que lo
estresaban sobre el cordero, los baobabs; y las flores, a lo que él contestaba
cualquier cosa o de una forma grosera. A pesar de que el Principito parecía feliz
con la vida que llevaba, cuando le conto que a él le gustaban las puestas de sol,
que sí podrían ver una, y le conto sobre la vez que vio cuarenta y tres veces
ponerse el sol, y que solo veía la puesta del sol cuando estaba triste; eso lo hizo

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reflexionar y sentirse culpable sobre como trataba al Principito y sintió ganas de
consolarlo, hacerlo sentir mejor y ser lo más gentil posible con él.
El Principito le seguía contando acerca de su planeta y las preocupaciones que
tenía sobre él ya que era demasiado pequeño y no todas las cosas cambian en el
y podían dañarlo como por ejemplo las semillas; hay unas buenas y otras malas;
las buenas darán plantas y frutos buenos pero en cambio las malas darán plantas
malas que puedes perjudicar al planeta. Los baobabs por ejemplo los cuales son
árboles que crecen demasiado y hay que saber ubicarlos a tiempo para que estos
sean cortados y no destrocen el planeta. Por eso nos dice que hay cosas que
pueden ser dejadas para mañana y que no importa mucho que las dejemos o las
hagamos pero el caso de los baobabs es muy diferente pues dejarlos crecer
puede ser la perdición y es una cosa demasiado seria que debe ser cuidada todos
los días sin excusa ni pretexto pues finalmente es algo para su bien y el del mismo
planeta.
El Principito también conto su preocupación por que el cordero fuera a comerse
una flor muy especial para él; no especial por ser su favorita o la más hermosa del
jardín sino especial porque era una flor única, que solo crecía en su planeta y no
en los demás. Le conto como fue que la descubrió y los cuidados que le tenía; así
como que la flor era vanidosa y se aprovechaba de la atención que le tenía para
pedirle, bueno más bien para ordenarle muchas cosas. Haciendo que a pesar de
su buena voluntad de amor llegara a dudar de la flor.
También dijo - “¡No supe comprender nada entonces! Debí juzgarla por sus actos
y no por sus palabras. ¡La flor perfumaba e iluminaba mi vida y jamás debí huir de
allí! ¡No supe adivinar la ternura que ocultaban sus pobres astucias! ¡Son tan
contradictorias las flores! Pero yo era demasiado joven para saber amarla".
El creía que el Principito había aprovechado una migración de unos pájaros
silvestres para poder evadir todos sus problemas así como las dudas que lo
acompañaban.
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El Principito utilizaba los volcanes activos de su planeta que eran dos para
calentarse su desayuno todas las mañanas, el día de su partida arranco los
últimos brotes de baobabs y rego la flor; después se despidió de ella. Al ver que el
Principito se hiba ella se disculpó por ser tan grosera y le dijo que fuera Feliz en su
viaje; pues ambos pensaban que el Principito nunca regresaría.

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Al salir de su planeta el Principito decidió visitar los asteroides cercanos;
primero visito al asteroide 325 tenía un rey vestido de purpura y armiño.
Con ese rey el Principito aprendió lo siguiente: “La autoridad se apoya
antes que nada en la razón. Si ordenas a tu pueblo que se tire al mar,
el pueblo hará la revolución. Yo tengo derecho a exigir obediencia,
porque mis órdenes son razonables.”
En el asteroide 236 se encontró con un vanidoso, el cual creía que todos
eran sus admiradores a pesar de vivir solo en ese planeta.
En el asteroide 237; que era el tercer planeta que recorría se encontró con
un bebedor; esta fue la visita más corta pues el bebedor hundió al Principito
en una gran melancolía.
En el cuarto planeta que era el asteroide número 238, el Principito se
encontró con un hombre de negocios que estaba muy ocupado por lo que a
la llegada del principito ni siquiera levanto la cabeza. Este hombre decía ser
el poseedor de las estrellas ya que no eran de nadie y a él se le había
ocurrido la idea de quedárselas y decir que eran suyas argumentando que
si eres el primero en tener una idea nadie puede aprovecharla puesto que
es tuya. Las estrellas son mías, puesto que nadie, antes que yo, ha
pensado en poseerlas.
El quinto planeta era el más curioso de todos ya que era el más pequeño.
En este planeta apenas cabían un farol y el farolero que lo habitaba. Este
hombre le pareció al principito más agradable que los demás, puesto que
se ocupaba de otra cosa y no de sí mismo como el rey, el vanidoso, el
bebedor, y el hombre de negocios. Pero al final también se marchó de ese
planeta porque era muy pequeño y no había lugar para dos, a pesar de que
para él era el planeta perfecto ya que podría disfrutar de la puesta de sol
mil cuatrocientas cuarenta veces.
El sexto planeta era diez veces más grande que los demás y estaba
habitado por un anciano que era geógrafo y escribía grandes libros. El
anciano le explico las funciones de un geógrafo, y el significado de la
palabra efímero. Fue en este planeta donde el Principito por primera vez se
arrepintió de haber dejado a la flor sola pero después recobro su valor y
pregunto qué planeta le aconsejaba visitar; el anciano le aconsejo visitar la
Tierra.
Entonces el séptimo planeta que visito fue la tierra; esto puso feliz al
Principito porque la Tierra era un planeta único y muy grande. Cuando el
principito llego a la tierra estaba decepcionado puesto que pensó que se
había equivocado de planeta ya que no vio a ninguna persona, hasta que
encontró una serpiente la cual le dijo que se encontraba en el desierto de
África y por eso no veía a ninguna persona.

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El Principito camino mucho en busca de personas; cuando encontró un jardín
hablo con las flores y les pregunto quiénes eran ellas; ellas respondieron que eran
las rosas. El Principito se dio cuenta de que su flor lo había engañado diciendo ser
la única flor de su especie, pero que en realidad solo era una rosa más. Entonces
se dijo a si mismo que el solo tenía una rosa común, y tres volcanes que le
llegaban hasta la rodilla y que uno de ellos probablemente ya se había extinguido
para siempre, que realmente no era un gran príncipe, se tiro en la hierba y lloro.
Hasta que se encontró con un zorro. El zorro era muy agradable y platico con él
durante un tiempo sobre las personas, y su planeta. El zorro le pidió al Principito
que lo domesticara y que solo así consiguiera un amigo de verdad, el Principito
acepto y le pidió al zorro que le dijera como domesticarlo, después de eso le hizo
caso y siguió las instrucciones del zorro. Y así pasó el tiempo hasta que el
Principito tenía que irse y el zorro ya estaba domesticado y se sentía triste por la
partida de su amigo. El zorro se despidió del Principito y le dijo que su rosa era
única porque ella había domesticado; también le dijo que no puede ser más
simple: sólo con el corazón se puede ver bien; lo esencial es invisible para los
ojos.
Después el principito siguió su camino y platico con un guardavía, con un
comerciante que vendía píldoras que quitaban la sed y en la semana ahorrabas
cincuenta y tres minutos. Todo esto conto el principito. También dijo que cumplía
un año de estar en la Tierra y que cuando pasara la estrella con la que llego en
ese momento tendría que regresar a casa, lo malo de todo esto es que ya se
había encariñado con él y verlo partir lo destrozó. Después de seis años conto la
historia de como conoció al principito pero aun lo sigue extrañando.
FIN!.

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PERSONAJES
El principito
El autor (Antoine De Saint)
El Zorro
La flor
El rey
El vanidoso
Un bebedor
Un hombre de negocios
Un farolero
Un geógrafo
Guardavía
Comerciante
“EL PRINCIPITO” AUTOR ANTOINE DE SAINT