La autora reflexiona sobre sus fortalezas y debilidades como docente. Entre sus fortalezas menciona su experiencia en entornos virtuales, años de antigüedad en la docencia, entusiasmo y compromiso para la práctica docente. Como debilidad, reconoce la falta de conciencia sobre el tiempo que demanda la tutoría virtual y las horas de sedentarismo que esto conlleva.