El documento describe un pueblo rural llamado Ubala en Cundinamarca, Colombia. Su principal fuente económica es la producción de panela y caña de azúcar. A pesar de la violencia en otras partes del país, Ubala ha sido un pueblo tranquilo durante los últimos 10 años. El documento detalla la entrega de ayuda alimentaria a 18 familias necesitadas en una vereda remota accesible solo después de cinco horas de caminata.