dia de la madre dia de la madre dia de la madre dia de la madres dia de la madre
NotiDigital
1. NotiDigital
www.notidigital.com EL PERIÓDICO GLOBAL
Septiembre 2015|Año XL |Número 13950| Edición Nacional |Precio: $5.00 pesos
El rostro como máscara
En realidad el rostro humano a este fotógrafo solo le interesaba como
máscara, cada una con la suya unipersonal y unívoca.
Hay fotógrafos que ven el rostro como un
paisaje: cada pliegue un valle, cada arruga un
barranco, una mejilla tersa y luminosa una playa, la
luz de los ojos un amanecer o una caída de la tarde.
Esta clase de fotógrafos salen de excursión con la
cámara al hombro por este territorio de la piel y
disparan el objetivo como lo hacen los cazadores.
Tiran a la pieza que vuela. Alberto Schommer no
pertenecía a este tipo de fotógrafos. No era un
paisajista sino un espeleólogo. Sabía que en el rostro
humano se inician distintas galerías que conducen
cada una de ellas a un estrato del alma. En esa oscura
charca llena de símbolos y peces oscuros se sentía a
sus anchas chapoteando hasta encontrar la mejor
sombra.
Dueño de su oficio…
Tras las sesiones de retratos, le gustaba comentar la jugada.
Muere el fotógrafo Alberto Schomer a los 87 años.
Eran los últimos días de abril y NOTIDIGITAL me había encargado
coordinar una serie de retratos de candidatos políticos que iba a realizar
Alberto Schommer. Muchas personas me habían advertido del carácter
hosco del fotógrafo, por lo que le traté de usted cuando me abrió la
puerta. “No me trates de usted, por favor, llámame solo Alberto”.
Alberto Schommer apenas sonreía. La tristeza había inundado su casa
desde la muerte de su mujer, Mercedes Casla, en agosto de 2013. “Ni te
imaginas cómo la echo de menos”, me dijo. Y añadió: “Ella me impulsaba
a trabajar, pensábamos juntos los proyectos, ahora no tengo casi ni
ganas”. Finalizamos las sesiones a mediados de mayo. Luego, Schommer
me fue llamando cada día para comentar las fotos a medida que se fueron
publicando. Y volvimos a hablar a comienzos del verano. Quería volver a
retratar a Manuela Carmena, Cristina Cifuentes y Ángel Gabilondo. “Voy
a hacer más fotos”, me dijo.
Tras las sesiones de retratos, le gustaba comentar la jugada. Charlábamos
sentados en su rincón preferido, frente a una mesita baja repleta de libros
de sus maestros: Avedon, Irving Penn, Steichen, Cartier-Bresson, Robert
Frank... Desde hoy, ese rincón permanecerá vacío y sus maestros se
sentirán un poco más solos.