El documento describe cómo la tecnología está cambiando el concepto de libro y la industria editorial. El contenido ya no está vinculado al soporte físico, permitiendo una mayor difusión. Esto también está transformando el concepto de lector. La industria editorial debe modificar sus estructuras para adaptarse, por ejemplo mediante la impresión bajo demanda y las librerías virtuales, que aumentan la visibilidad de los contenidos y eliminan barreras.

1. Jorge Franganillo
La industria editorial frente al libro electrónico
Por Jorge Franganillo
Resumen: El libro, la lectura y la industria editorial están experimentando cambios mo-
tivados por el progreso tecnológico. Los contenidos se han desvinculado del soporte y, en
consecuencia, la industria editorial ha necesitado transformar su estructura logística, ba-
sada hasta hace poco en la distribución física. La impresión digital y las librerías virtuales
cubren nuevas necesidades: han aumentado las posibilidades de visibilidad y de difusión de
la producción editorial, y han eliminado barreras geográficas y físicas.
Palabras clave: Libros electrónicos, Industria editorial, Impresión a demanda, Librerías
virtuales
Title: The publishing industry confronts ebooks
Abstract: Books, reading and the publishing industry are experiencing changes motivated
by technological advancement. The content has been separated from the material and, the-
refore, the publishing industry has had to alter its logistic structure, based on physical dis-
tribution until recently. Print on demand and online bookstores are now meeting new needs: Jorge Franganillo, biblio-
they have increased the possibilities of visibility and circulation of editorial production, and tecario y licenciado en Do-
cumentación, es técnico en
they have suppressed geographic and physical barriers. información digital y espe-
cialista en edición electróni-
Keywords: Ebooks, Publishing industry, Print-on-demand, Online bookstores
ca, experiencia de usuario y
Franganillo, Jorge. “La industria editorial frente al libro electrónico”. En: El profesional de recuperación de información.
Es profesor de la Facultat de
la información, 2008, julio-agosto, v. 17, n. 4, pp. 416-417. Biblioteconomia i Documen-
DOI: 10.3145/epi.2008.jul.08 tació, de la Universitat de
Barcelona.
LIBRO Y LECTOR SON Cambia también el concepto
CONCEPTOS QuE ESTÁN de lector –de lector culto– porque
CAMBIANDO. También se está en la era digital esto implica saber
transformado la industria edito- manejar ciertos materiales o uten-
rial, que modifica sus estructuras silios que guardan poca relación
conceptuales y logísticas para con el pasado. Ya no basta con te-
adaptarse al desafío de la mo- ner acceso a internet, contar con
dernidad. El concepto de libro, equipos informáticos y disponer de
relacionado hasta hace poco con una cierta capacitación tecnológica.
el de material impreso, que es el Ahora, además implica adquirir la
universo de los soportes físicos, se cultura tecnológica suficiente para
amplía considerablemente como entender cómo funciona el forma-
consecuencia de las innovaciones to digital: es necesario saber cómo
tecnológicas que permiten multi- se organiza la información, cómo y
plicar la difusión de un texto has- dónde se la puede encontrar, cómo Poema interactivo
ta el infinito. cabe interactuar con ella. “Tocando”, de Orit Kruglanski
Desde la aparición de los au-
diolibros y de los libros digitales, el
El contenido se desvincula
concepto de libro queda redefinido “Un mismo contenido del soporte
puesto que ya no se le puede con- puede estar disponible
siderar sólo como una obra impre- en diversos continentes, Las campañas para fomentar la
sa, o manuscrita, formada por un lectura se diseñan a menudo como la
en diferentes soportes, y
conjunto de hojas encuadernadas, transmisión y el comercio del libro
esa es la gran innovación
sino que ahora el material capaz como objeto. Pero el libro en cuan-
de almacenar y transmitir un cierto
que debe asumir el mundo to continente de información es hoy
conjunto de información puede ser editorial” en día un concepto que cabe sepa-
tangible o intangible. rar del de libro en cuanto contenido.
416 El profesional de la información, v.17, n. 4, julio-agosto 2008

2. La industria editorial frente al libro electrónico
Continente y contenido son nocio- presores que publican bajo deman- y no puede poner un libro concreto en
nes inseparables en el libro impre- da (on demand) dan a conocer sus manos de todos los lectores interesa-
so, pero ahora un mismo contenido títulos a través de internet, y sólo dos. Pero mediante la impresión bajo
puede estar disponible en diversos imprimen ejemplares de sus libros demanda y las librerías virtuales, to-
continentes, en diferentes soportes, según los pedidos que reciben de dos los interesados pueden saber de la
y es aquí donde está la gran innova- los clientes que compran en la sede existencia de un libro concreto, y allí
ción que necesita asumir el mundo web de la empresa o a través de in- donde estén pueden recibir un ejem-
editorial, de una parte, y el infinito termediarios como Amazon. plar impreso o acceder de inmediato
conjunto de los lectores, por otra. a la versión digital.
Es la impresión digital, que así
Efectivamente, la lectura puede elimina dos problemas: las pérdidas Por lo tanto, las librerías virtua-
hacerse fuera de los libros, y es así, económicas derivadas de las devo- les aumentan el número de lecto-
por ejemplo, en el ámbito de la lite- luciones, que a veces inundan los res potenciales porque multiplican
ratura virtual. Gracias a los sopor- almacenes de los editores conven- las posibilidades de difusión y de
tes electrónicos, ciertos creadores cionales. Y la descatalogación: los visibilidad de la oferta, y porque
de las artes plásticas, de la poesía libros continúan visibles en inter- eliminan las barreras geográficas y
y de una prosa de vanguardia han net, todo el tiempo que se quiera, y también las físicas: las editoriales
producido nuevos tipos de obras sólo si hay usuarios interesados en ya no necesitan poner ejemplares
que no habrían podido crear sobre comprar alguno, en cualquier parte del libro tangible allí donde están
papel. Lo ilustran tres casos: del mundo, éste se imprime según los interesados.
la tirada que necesite el cliente, ya
– Las novelas para móviles, Internet es sinónimo de univer-
sea un único ejemplar, mil o los que
que son historias escritas en lengua- salización, pero también de interac-
se necesiten.
je SMS, tan populares en Japón que ción. Las librerías virtuales, además
se han convertido en los libros más de ser una plataforma con una ofer-
El escaparate infinito
vendidos. ta de libros más amplia que la de
El mundo físico es una dictadu- cualquier canal físico de distribu-
– Los poemas para agenda
ra que obliga a ir a una tienda real ción, ofrecen reseñas y comentarios
electrónica, que mueven las letras
para hacerse una idea sobre qué se de otros lectores, y son una puerta
como en un caligrama y permiten
está publicando. Pero esta idea se que cada lector puede aprovechar
las varias lecturas que su autor haya
forma a partir de una muestra sesga- para formar su propio criterio de
previsto.
da, poco representativa, porque los decisión. De esta manera internet
– Los poemas hipertextuales, mecanismos de distribución física no es sólo un depósito de informa-
como los Intermínims de navegació ponen en las estanterías sólo aque- ción, sino que también es un espa-
poètica, de Ramon Dachs, que em- llo que alguien ha querido mostrar cio de diálogo, un ágora universal
plean el hipertexto como forma na- al público, y no muestran lo que no donde todas las personas pueden
rrativa para crear una obra poética. se quiere o no se puede mostrar. La tener voz, donde pueden preguntar
El contenido se ha desvincula- decisión está entonces en manos de y recibir consejo.
do del soporte, y este cambio es tan quien controla el espacio de la tien-
Ese espacio virtual no pretende sus-
notable que afecta al sector edito- da. En cambio, la fuerza de internet
tituir al librero, sino complementar
rial. La logística de la distribución –en cuanto espacio infinito– está en
su labor. Y el soporte digital no ex-
física ya no es suficiente para llegar que la impresión digital y las tien-
cluye ninguna de las sensaciones
al conjunto de lectores. das virtuales universalizan el acce-
que tiene un lector, sino que le aña-
so a los contenidos editoriales.
de otras. Ni tampoco significa una
Libros según demanda Dado que en la Red todo puede sentencia de muerte para el libro
estar disponible, con independencia impreso, sino que busca cubrir las
Estos cambios que las nue-
del soporte, se da visibilidad a todas nuevas necesidades con nuevas ma-
vas tecnologías de la información
las expresiones culturales, y el po- neras de hacer.
imprimen en el proceso editorial
der de decisión pasa entonces a ma-
permiten nuevas técnicas de publi-
nos del lector, que adquiere por tan-
cación. Ahora es posible editar un Jorge Franganillo, Facultat de
to más autonomía de pensamiento.
libro en papel sin necesidad de ha- Biblioteconomia i Documentació,
cer una tirada inicial de un número La distribución en papel, el me- Universitat de Barcelona.
mínimo de ejemplares. Desde que dio tradicional, es incapaz de conec- franganillo@ub.edu
en 1997 apareció el sistema, los im- tar toda la oferta con toda la demanda http://franganillo.net
El profesional de la información, v.17, n. 4, julio-agosto 2008 417