Artes/ObrasMaestras del siglo XVI - tiempos BY: CLAUDIA GINGLIONA RAMÍREZ DIF...
Para elblogiii
1. Somos experiencias.
Hace un año exactamente que pasé por esta idea, pero no profundicé mucho realmente.
Pues bien, hoy voy a profundizar un poco. Hablé de que nosotros… bueno, nuestro cuerpo
no es más una herramienta que usa nuestra esencia para comunicarse con el mundo
exterior y con el resto de esencias.
¿Me explico? Espero que no, prosigo.
A mis 17 años, todas las células o casi todas las células de mi cuerpo se han regenerado y
convertido en otras más grandes y desatolladas, es decir, no son las mismas que cuando
nací ¿Eso no convierte mi cuerpo en un cuerpo distinto al de cuando nací? No sé si
consciente o inconscientemente algunas películas juegan con eso precisamente, el hecho
de que mágicamente tu mente se traspase al cuerpo de otra persona o incluso otro ser
vivo, en estas películas el protagonista suele ir a las personas más cercanas e intentarles
explicar qué es lo que ha pasado, y el conocido acaba con una frase del tipo “¡Joder, eres
tú!” NO, NO ES ÉL, ES OTRA ESPECIE ¿NO LO VES?
Claro que, por otro lado… en algún momento todos hemos tenido que responder a la
pregunta de “¿Qué harías si te transformaras en un/a tio/a mañana por la mañana?” Ni que
decir tiene que todos hemos respondido casi sin pensar y de la misma forma “Fliparlo
mucho y tocarme a ver qué se siente” (Es respuesta es debida a otro tema que ya si eso,
hablaré otro día), Pero esta mañana he estado pensando “Si mañana por la mañana me
despertara siendo otra persona… no sería otra persona.. sería otra herramienta, pero mi
mente sigue siendo la misma, no habría cambiado en nada ¿Realmente nuestro cuerpo
somos nosotros? Pues igual no, porque si sigo pensando igual y razonando de la misma
manera… Pero claro, mi mente, mi razonamiento, mi forma de ser respecto al mundo, no
viene definida, la voy creando poco a poco mediante las experiencias y los recuerdos que
tenemos sobre todo el mundo, ajeno a nuestra nube de pensamiento. ¿Querría decir eso
que nosotros somos puramente nosotros en una formación mental? Osea, nosotros somos
nuestra vida, no nosotros…
2. Me he pasado la vida poniéndola patas arriba en busca de algo que ni sé si quiero
encontrar.
He destrozado cuadernos intentado leer todo lo que en su día escribí plasmando mis
pensamientos, pero luego recordé que no sé leerme la cabeza.
Me he rasgado la garganta intentando cantarte todas mis historias, pero descubrí que no
sé entonar una sola nota bien.
Mis musas intentan dejarme claro que no estarán nunca para mi, pero no dejo de
implorarles perdón por tantas ofensas.
3. Vaya, realmente no sé como encajar esto, es un tema muy difícil el escribir por escribir.
Estoy yo aquí, frente al teclado, sin saber que escribir, con muchas cosas de las que
quejarme y otras muchas por las que dar gracias. Mi madre me acaba de leer dos páginas
de:”Instrumental” Parecía gracioso lo que me ha empezado a leer, pero… al leer la
contraportada se me han quitado todas las ganas de leerlo.
Para variar, no vengo a hablar de nada, no quiero expresar nada, sólo me apetece escribir,
por el simple hecho de escribir, las palabras parecen ser las única que me entienden y
apoyan estos días, sobre todo hoy… Curioso ¿Verdad? Soy yo el que las escribe, soy yo
el que las dedica, incluso soy yo el que las lee habiéndolas escrito otras personas, pero al
final siempre acaban entendiéndome y apoyándome.
“Tengo el corazón y la muñeca abierta”, uno es metafóricamente, lo otro una simple
operación, pero pensé que uniéndolo podría quedar bien, y así ha sido, por lo menos para
lo que yo quería decir y que seguramente vosotros no entendais.
¿Cómo puede el universo estar en expansión y a la vez ser infinito? Para expandirse,
tendría que existir un límite ¿En qué quedamos entonces, ciencia?
Tengo mañana a segunda hora un exámen de lengua y no sé qué coño entra, lengua este
curso me lo estoy pasando por el forro de los huevos, pero casualmente estoy aprobando
más que si le prestara atención. Creo que es por la profesora, por las ganas que le pone a
sus clases, por el como las da, como nos cuenta historias en mitad de las clases… En
definitiva, por esa implicación con el alumno que tiene y que a la gran mayoría… a casi
nadie… que a casi todos los profesores les falta.
Odio querer hablar con esa persona especial y no saber de qué, pero más odio aún el
desinterés que tienen las personas por el mundo. Supongo que es un dilema interno que
debo de solucionar yo solíto, porque de no ser así… bueno, no quiero imaginar como
podría acabar yo mismo.
Son las 22:06, y mi mono de escribir se ha visto parcialmente saciado, pero como me
duele la muñeca, voy a dejarlo por hoy.
Espero que no hayais entendido nada, y haberos hecho pensar.
4. Frustrado por todo aquello que querré decir y nunca seré capaz de escribir.
Jamás pedí más pena para nadie que la vida eterna.
Nunca quise que aquellos ojos desapareciesen delante de mi como si no fueran nada.
Supongo que tengo una extraña ambición por desenfundar la pluma y batirme en duelo
con mis propios miedos, pero eso somos yo y mi extraña manía de perder ante ellos.
He intentado aclararme las ideas de moralidad, pero acabaron por salirse de sus casillas,
ahora están perdidas por alguna esquina de ese cuarto que nunca recogeré.
Mis reyes dejaron de tener coronas, las perdieron jugando al poker con la justicia.
Mis puzles nunca acabaron de completarse, parecen picassos hechos por piezas al azar.