1. FUNDAMENTOS Y PRINCIPIOS DE LA UNIDAD
Efesios 4:3-6
Reina-Valera 1960 (RVR1960)
1 Yo pues, preso en el Señor, os ruego que andéis como es digno de la vocación con que
fuisteis llamados,
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con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en
amor,
3
solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz;
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un cuerpo, y un Espíritu, como fuisteis también llamados en una misma esperanza de
vuestra vocación;
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un Señor, una fe, un bautismo,
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un Dios y Padre de todos, el cual es sobre todos, y por todos, y en todos.
7
Pero a cada uno de nosotros fue dada la gracia conforme a la medida del don de Cristo.
La carta a los Efesios se escribe en unas condiciones muy similares
a las nuestras en el tiempo presente, precisamente para aquel
entonces había: inestabilidad política, injusticia social, cambios
radicales, tensiones raciales y corrupción moral.
Para aquella época el emperador de ese entonces era un hombre
llamado Nerón, un hombre enteramente corrupto, la historia lo
describe como uno de los 8 emperadores más crueles de la historia.
- Así es lo que el Apóstol Pablo está viviendo para aquella época
con la Iglesia primitiva, si de una forma paralela lo analizamos con
el tiempo del siglo XXI nos damos cuenta, que en cuanto a su
escenario de degradación y corrupción en lo social, política y
religiosa no es muy diferente en lo que Usted y Yo estamos viviendo
en el momento presente.
Vemos por todo lado violencia, violencia contra los niños, ancianos,
jóvenes y una sociedad inmersa en la falta de principios morales,
éticos y espirituales como nunca antes en las sociedades nuestros
congéneres lo hayan visto. Observando el paralelismo de las
condiciones similares de épocas, podríamos decir que cuando
Pablo está escribiendo esta epístola, es como si estuviera
escribiéndola a la Iglesia del siglo XXI.

2. Cuando Pablo escribe esta epístola la está escribiendo desde la
cárcel, y esto le da una connotación especial puesto que el no la
está escribiendo desde una oficina con asiento acolchado y aire
acondicionado, sino que la escribe desde la cárcel, por tal razón se
podría uno formular la pregunta. Que le puede escribir un prisionero
a una Iglesia que está siendo perseguida? Que le pudieran decir?
Quizás si fuera uno de los líderes de hoy en día, se estaría
disculpando porque ellos ofrecieron un evangelio de éxito, un
evangelio de prosperidad, un evangelio facilista; pero precisamente
están viviendo otra cosa, disculpen yo no pensaba que ustedes
fueran a pasar por esas tribulaciones, no fue mi intensión así que lo
siento mucho por las pruebas y luchas que les está pasando.
Pero no fue así con Pablo, el no está tratando de excusar el
evangelio que él les predico, el les está diciendo. Hermanos
Ustedes están pasando por esas pruebas yo tengo una palabra
para Ustedes. Efesios 4: 1 ► Os ruego que andéis como es digno
de la vocación con que fuisteis llamados.
Pablo les dice yo sé por lo que ustedes están pasando, porque yo
estoy pasando también por mis propias dificultades, estoy preso
aquí en Roma, por causa del evangelio. Ustedes están siendo
perseguidos, están siendo maltratados, están siendo desplazados,
el Emperador se ha lanzado contra ustedes y les ha dado a algunos
de ustedes muerte.
Mas sin embargo y pese a todas las posibles dificultades que ellos
tuvieron y las dificultades que nosotros podamos tener, o estar
viviendo no es justificación para no estar unidos al cuerpo de Cristo.
Los altercados y las diferencias en la iglesia y en la familia son
muy comunes, la diferente índole de problemas o incomodidades
que podamos tener, no solo tú las tiene, y esto no es excusa para
no tener disponibilidad y compromiso en la formación de la unidad
del cuerpo de Cristo dentro de la Iglesia….
Un principio que debemos tener bien claro, dentro de la unidad
como cristianos, es que la Iglesia se presenta: 1- como un cuerpo,
2- se presenta como un templo, 3- se presenta como un ejército,
con diferentes miembros, cada uno con su función propia y diferente
a la otra, pero con una característica especial que marca la
diferencia y es en estar, solícitos en guardar la unidad del Espíritu
en el vínculo de la paz…

3. 1- El propósito como cuerpo en la Iglesia es reflejar la santidad de
Dios (Efesios 1:4 LEELO) en segundo lugar 2-como templo es
revelar la gloria de Dios, permitir que Cristo sea visto en nosotros,
no solo dentro del templo físico, sino del templo que llevamos
dentro exteriorizándolo al mundo, cuando la Biblia dice en
(Habacuc: 2:14) que la tierra entera será llena de su gloria, del
conocimiento de la gloria de Dios, está hablando que aquellos que
cargan la gloria del Señor, serian esparcidos por todas las
generaciones y lugares en el mundo, por eso donde quiera que
haya un creyente allí está la gloria de Dios presente. Y tercero 3-
como ejército es ser testigos de Cristo.
Que es un testigo? Es uno que demuestra y uno que declara
(1Pedro 2:9 LEELO) Ahora bien entrándonos dentro del tema
fundamental de la unidad, como cosa adversa, una de las fuerzas
más destructivas en la Iglesia es la división y la desunión entre
creyentes; la división entre hermanos a destruido iglesias, a
destruido familias, quizás alguno de ustedes conocen algún caso.
Y en mucho de los casos la desunión ha sido causante de la mofa,
el vituperio del evangelio.
El hombre en su interés de unificar la iglesia a creído que estando
juntos es que estamos unidos, y se hacen diferentes clases de
esfuerzos trabajando en pro de la unidad y hasta se llega a creer
que el hecho que la gente este reunida en un mismo sitio, o
pertenezca a la misma denominación quiere decir que están unidas.
Pero la unidad no trabaja de esta manera.
*En su propia casa, con las tres o cuatro personas que usted
convive y el perro hay desunida. Ni el perro está de acuerdo con
todo lo que se le dice, por lo menos el mío debes en cuando se
revela, se le da una orden y no la cumple…. Entonces
imaginasen si eso es así entre cuatro o cinco personas, como no
será en un lugar donde hay tantas personas con diferentes ideas,
con diferentes pensamientos, con diferentes formas y modos de ver
la vida.
La unidad no se crea porque estamos juntos, algo que no
podemos negar, es la realidad de las múltiples fricciones que hay

4. dentro de la Iglesia del Señor, y esto es evidente porque el mismo
Pablo lo reconoce y le escribe a la Iglesia y le exhorta a que sean
solícitos en guardar la unidad del espíritu en el vinculo de la Paz.
Donde quiera que haya humanos presentes habrá tensiones
también. La palabra solícitos, la definición del griego significa
Disposición mas acción, es decir que ustedes deben estar
dispuesto, pero no solo dispuesto sino que además disponibles para
actuar, y la palabra en español que mejor define esto, es la palabra
proactivo, entonces podemos decir que Pablo les dice a la Iglesia “si
ustedes han de mantener la unidad en el espíritu tendrán que ser
una Iglesia Proactiva” y la palabra proactivo significa actuar con
anticipación para tratar con alguna dificultad.
Las tensiones en la Iglesia siempre han estado presentes, de hecho
no hay un grupo más diverso sobre la faz de la tierra que la Iglesia
del Señor Jesucristo. En la Iglesia se reúnen ricos, pobres,
educados, simples, gentes de diferentes culturas, de diferentes
pasados, de diferentes ideas, de diferentes pensamientos.
¿Entonces como Usted trata de manejar un lugar donde hay tantas
diversidades y situaciones que tienen diferentes ópticas y
diferentes puntos de vista? De una sola manera. CRISTO. Si en
Cristo, la Biblia nos dice en Gálatas 3:28 ► Ya no hay judío ni
griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos
vosotros sois uno en Cristo Jesús.
Tensiones siempre han habido y tensiones siempre habrán. Alguien
podría decir * “hooo yo, no me puedo explicar que esto pasa entre
cristianos”. ¿De hecho a usted no le ha pasado que se haya
sorprendido porque alguien está hablando mal de usted?
Y lo primero que usted dice es: yo no puedo comprender que
alguien esté hablando tan mal de una persona tan buena como soy
yo… yo que me siento hasta orgulloso de ser una persona humilde.
Entonces, decíamos anteriormente, que la unidad no se crea
porque estemos juntos es necesario entender que cuando
hablamos de unidad en la Iglesia, no nos referimos al concepto
donde se confunde el término unidad con unificación. Una cosa es
la unidad de la Iglesia y otra es la unificación de las iglesias.

5. La unidad de la Iglesia es una doctrina bíblica enseñada
claramente por Cristo y por sus apóstoles; la unificación de las
iglesias es un producto del esfuerzo humano para lograr lo que sólo
el Espíritu Santo es capaz de hacer.
La unidad de la Iglesia está inspirada y promovida por el Espíritu
Santo; la unificación de las iglesias es una enseñanza alentada y
promocionada por el hombre aunque le alienten buenas Intenciones
En la unidad de la Iglesia, se establece a Cristo como la única
Cabeza directriz que lleva a cabo su obra a través de un Cuerpo
“concertado y unido entre sí”, por la cohesión que produce el
Espíritu de Dios y el amor que la sensibiliza; en la unificación de las
iglesias se establece como cabeza directriz a los hombres que
llevan a cabo sus propios propósitos, a través de una
superestructura eclesiástica con un barniz de cristianismo.
La verdadera unidad de la Iglesia une nuestros corazones en el
amor de Cristo, donde habrá un objetivo unánime: dar a conocer a
este mundo que el reino de Dios se ha acercado a ellos por medio
de un pueblo representativo cuyo nombre predominante es
CRISTIANO, por medio de una Iglesia a la cual Él no le puso
nombre, sino a la cual llama solamente “mi Iglesia” (Mat. 16:18) y
ante la cual “las puertas del infierno no habrían de prevalecer”.
La verdadera unidad de la Iglesia es una unidad de carácter
espiritual. La Biblia le llama “la unidad del Espíritu”
La verdadera unidad no busca hombres perfectos para lograr una
unidad perfecta; la unidad del espíritu es perfecta en sí misma
aunque trabaje con hombres imperfectos pero que están en
disposición y proceso de perfección y que en obediencia se
proyectan hacia la unidad.
Justamente esta es la idea que aparece en Juan 17:22,23. “La
gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como
nosotros somos uno. Yo en ellos y tú en mí, para que sean
perfectos en unidad,...”.
La unidad de Cristo con la Iglesia es de carácter vertical. Se
produce de arriba hacia abajo. Es la Cabeza la que busca la unión
con su Cuerpo. Es el Cuerpo el que recibe la vida de la Cabeza. Sin

6. Cristo no hay Iglesia, por lo que la iglesia que desplaza a Cristo
muere.
Entonces con respecto a lo anteriormente dicho ¿Cuál es el
propósito de la unidad en la Iglesia?
La unidad del Espíritu en el seno de la Iglesia tiene dos objetivos y
genera dos efectos. Los dos objetivos son revelados por Jesús en
Juan 17:21-23: LEELO 1º “Que el mundo crea”, y 2º “que el
mundo conozca”. Y los dos efectos generados son: 1° “Para
que el mundo conozca que tú me enviaste” y 2°“que los has amado
como también me has amado a mí”.
Entonces siendo este el propósito, de la unidad en la Iglesia, que el
mundo conozca de Jesucristo y que crean en él, como el salvador
del mundo, mostrándonos nosotros como el cuerpo de Cristo, cabe
luego resaltar el interrogante ¿Qué ve el mundo dentro de la
Iglesia? ¿Qué es lo que el mundo oye hablar a la Iglesia?
Tal vez, Mientras hablamos de fe a un mundo desesperado, ese
mismo mundo no ve en la Iglesia su total dependencia de su Señor;
mientras hablamos a las gentes, acerca del amor de Dios, nuestras
propias actitudes, palabras y acciones se convierten en ondas que
interfieren a sus oídos, y velos que cubren sus ojos……
Entonces “La base de todas las denominaciones cristianas debe
ser una Iglesia unida en el Espíritu para que el mundo crea que
tenemos que ser UNO como Cristo y su Padre son UNO”.
¿Cuál es la materia prima para la unidad en la Iglesia? Para
este interrogante debemos tener en claro y bien establecido tres
aspectos: primero: qué es la Iglesia, en el sentido estricto del
término; segundo: qué es la Iglesia como organismo; y
tercero: qué es la Iglesia como organización…… La palabra Iglesia,
designa una colectividad de individuos llamados del mundo, en la
cual todos conviven, se relacionan, se desarrollan, trabajan con un
propósito bien definido, un objetivo bien marcado.
La Iglesia, es un organismo visible, redimido por Cristo, regenerado
por el Espíritu Santo, dentro del cual cada miembro guarda una

7. relación íntima y vital con Cristo, Su Cabeza, y un vínculo estrecho
de amor y colaboración con los demás miembros.
Teniendo esto presente, la materia prima somos todos nosotros los
miembros de la Iglesia con manifestaciones en nuestra
personalidad afectada por - La unidad de mente. – Unidad de
parecer. –Unidad de sentir. – Unidad de proyección. Hech.
1:14; 2:1; Ro. 12:16; 1 Co. 1:10; 2 Co. 13:11; Fil. 1:27.
Esto implica y requiere la vigilancia constante de nuestras
actitudes, sentimientos y aún pensamientos. Un pensamiento
obstinado, un sentimiento orgulloso, una actitud incoherente una
acción carnal pueden ser causa de incisiones dentro del Cuerpo
motivando con ello resentimientos amarguras y divisiones, llevando
totalmente lo contrario a la unidad en la Iglesia.
Conclusión.Hay un adagio popular que dice La unión hace la
fuerza, pero también hay un versículo en la Biblia para ponerlo en
práctica en Eclesiastés 4 12
Y si alguno prevaleciere contra uno, dos
le resistirán; y cordón de tres dobleces no se rompe pronto.