El documento presenta una taxonomía del jugar dividiendo los juegos en cuatro categorías: juegos de habilidad, juegos de azar, juegos de rol y juegos de simulación. Los juegos de habilidad ponen a prueba las habilidades motoras o mentales de los jugadores, los de azar dependen en gran parte de la suerte, los de rol permiten a los jugadores asumir roles de personajes ficticios y los de simulación imitan actividades y sistemas del mundo real.