Las causas fundamentales de la pobreza del Tercer Mundo son las estructuras económicas pre-modernas y de mercado que impiden la competencia y el progreso, así como las actitudes que perpetúan la dependencia y el cortoplacismo. Estas condiciones dan lugar a síntomas como el desempleo y la escasez de capital que provocan el estancamiento económico y la emigración de la población.