20. Que te nos revelaste
en tu Hijo
muy Amado,
Padre Dios:
concédenos ser
hijos en Él y como Él.
21. Que guiados por tu Espíritu Santo,
y hagamos posible
la salvación en nuestro derredor.
nos llenemos de
su fuego
renovador
22. Que la comunión
que vives, siendo
Trinidad Santa,
sea un ejemplo
a seguir,
Y como María,
la criatura que mejor
se dejó poseer
por Ti,
vivamos amándonos.
¡Así sea!
Ámbito Misionero