Si los problemas y los desafíos de tu llamamiento en la Iglesia te abruman, esta solución es para ti

1. Aprender y Enseñar a la
Manera del Señor
Presentación basada en un discurso de Élder David A.
Bednar en el Seminario para nuevos presidentes de
misión.
Provo, Utah, 25 de junio de 2014
Presenta: Óscar Pech
Cuauhtémoc, Chihuahua, octubre de 2015

2. Antes de iniciar, responda estas
tres preguntas en un cuaderno:
1. ¿Cuál es el principal problema que conlleva
su llamamiento?
2. ¿Cuál es, hoy por hoy, su principal desafío?
3. ¿Cuál es su principal objetivo como líder o
sacerdote?

3. Esta es la obra del señor
• Por favor tomen nota de la siguiente frase: “Yo puedo
hacer mi propia obra”, esta frase se usa dos veces en la
descripción de la llegada del Libro de Mormón contenida
en 2 Nefi 27: 20 y 21. Es importante que notemos la
repetición de esta declaración significativa.
• Así como la poderosa declaración del Señor de “Yo
apresuraré mi obra a su tiempo” que se encuentra en
Doctrina y Convenios 88:73.
• Élder David A. Bednar. Aprender y enseñar a la manera del Señor,
en Seminario para nuevos presidentes de misión, Provo, Utah, 25 de
junio de 2014.

4. Hacer la obra del Señor, a Su manera y
con Su poder
• Surgen implicaciones profundas de esta verdad que el
Señor es quien dirige y mueve Su obra adelante, lo cual
intentaré resaltar con una serie de preguntas:
• 1. ¿Mantendremos el paso? Como individuos y
colectivamente como Iglesia, ¿mantendremos el paso con
el apresuramiento del Señor? ¿O insistiremos en que se
hagan las cosas como siempre se han hecho, o de la
manera en que estamos acostumbrados a hacerlas?

5. Hacer la obra del Señor, a Su manera y
con Su poder
• 2. ¿Aprenderemos y Enseñaremos a la Manera del
Señor? Cada uno de los que estamos aquí hoy
¿aprenderemos, nos arrepentiremos, cambiaremos y
enseñaremos de manera más efectiva a la manera del
Señor? ¿O estaremos tan enmarañados en las tradiciones y
patrones del pasado que no podremos mantener el paso
del apresuramiento del Señor?
• Élder David A. Bednar. Aprender y enseñar a la manera del Señor,
en Seminario para nuevos presidentes de misión, Provo, Utah, 25 de
junio de 2014.

6. ¿A mi manera, o a la manera del Señor?
• Para lograr Sus propósitos a Su manera, ustedes
necesitarán dejar atrás algunas, quizá hasta muchas, de
las ideas y prácticas que los ayudaron a tener éxito en
muchas de sus actividades previas. No deben permitir que
su pericia corporativa, legal, médica, financiera, legislativa
o cualquier otra pericia determinen cómo harán la obra
del Señor.

7. ¿A mi manera, o a la manera del Señor?
• Admiro al Elder Dallin H. Oaks por la auto-evaluación que
realizó poco después de ser llamado como miembro del
Quórum de los Doce Apóstoles. Él dijo: “Durante este periodo
de introspección, me pregunté qué clase de apóstol sería.
¿Sería yo un abogado que había sido llamado a ser apóstol o
sería un apóstol que había sido un abogado? Concluí que la
respuesta a esta pregunta dependía de si yo trataría de
moldear mi llamamiento a mis aptitudes personales y
experiencias, o si me sometería al proceso doloroso de tratar
de moldearme a mí mismo a mi llamamiento. Trataría de
desempeñar mi llamamiento a la manera del mundo o
trataría de determinar y seguir la manera del Señor”.
• El Camino del Señor” (Salt Lake City; Deseret Book, 1995), p. 7

8. Ahora pregúntese a sí mismo:
¿Cuál es la manera del Señor?
¿Cómo gobierna Él?
¿Cómo dirige Él a Su pueblo?

9. A Su manera y con Su poder
• “Hace unos años, en Nauvoo, un caballero, miembro de la
legislatura, preguntó a José Smith, ante mí, cómo podía él
gobernar a tanta gente y mantener un orden tan perfecto,
comentando al mismo tiempo que a ellos les era imposible
hacerlo en cualquier otro lado.
• El señor Smith contestó que era algo muy fácil de hacer.
‘¿Cómo?’, preguntó el caballero. ‘Para nosotros es muy
difícil.’
• El señor Smith respondió: ‘Les enseño principios correctos y
ellos se gobiernan a sí mismos’ ”
• John Taylor, “The Organization of the Church”, Millennial Star, 15
de noviembre de 1851, pág. 33

10. A Su manera y con Su poder
• “Muchas veces los caballeros que visitaban a José Smith y a su
pueblo le preguntaban: ‘¿Cómo puede usted controlar tan
fácilmente a su gente? Parece que hacen todo lo que usted les
dice; ¿cómo puede gobernarlos con tanta facilidad?’ Él
contestaba: ‘No los gobierno en absoluto. El Señor ha revelado
desde los cielos ciertos principios por los cuales debemos vivir en
estos últimos días. El tiempo se acerca cuando el Señor
congregará a Su pueblo de entre los inicuos y va a acortar Su
obra en rectitud; yo he enseñado a los del pueblo los principios
que Él ha revelado y ellos se esfuerzan por vivir de acuerdo con
esos principios y se gobiernan a sí mismos’ ”
• Brigham Young, Deseret News: Semi-Weekly, 7 de junio de 1870, pág. 3.

11. Puede ser que usted se diga: “Pero
es que no dejo de enseñar a los
hermanos y ellos no se gobiernan a
ellos mismos”.
Entonces yo le diría: ¿Están —usted
y los hermanos— aprendiendo y
enseñando a la manera del Señor?

12. Ahora observe y piense en la obra de
salvación

13. Y pensando en la obra de salvación,
respóndase estas tres preguntas a
usted mismo:
Como líder de la Iglesia, como
poseedor del sacerdocio, como siervo
del Señor:
¿A qué se le ordenó?

14. La respuesta está en D. y C. 50:13-14
•Por tanto, yo, el Señor, os hago
esta pregunta: ¿A qué se os
ordenó?
•A predicar mi evangelio por el
Espíritu, sí, el Consolador que fue
enviado para enseñar la verdad.

15. ¿Qué es predicar?
• “Cuando usted y yo fuimos llamados y apartados para servir
en la Iglesia, no se nos dio la responsabilidad enseñar, sino la
de predicar. La palabra predicar en nuestro vocabulario
contemporáneo tiene una connotación negativa. Nos viene a
la mente gente despotricando y golpeando el púlpito; no es
eso en absoluto. Predicar es explicar y articular la doctrina de
Cristo por el poder del Espíritu.”
• Élder David A. Bednar, TEACH THEM TO UNDERSTAND“ Ricks College
Campus Education Week Devotional, June 4, 1998

16. ¿Quién enseña, entonces?
• Si usted y yo fuimos adecuadamente apartados, ¿Quién
cumple con esa responsabilidad de enseñar? La respuesta se
encuentra en el versículo 14: “Aun el Consolador que fue
enviado para enseñar la verdad." Somos enseñados por el
tercer miembro de la Trinidad, aun el Espíritu Santo.
• Élder David A. Bednar, TEACH THEM TO UNDERSTAND“ Ricks College
Campus Education Week Devotional, June 4, 1998

17. Ahora, antes de pasar a la siguiente
diapositiva, respóndame esta
pregunta:
¿Entonces, su función como
poseedor del sacerdocio, es
esencialmente enseñar?

18. La respuesta: Sí
• Mosíah 6: 3
• Mosíah 12:25
• Mosíah 18:18
• Alma 13: 1, 6
• Alma 18: 34
• Alma 23: 4
• Etc.
• “Para tener éxito como líder o
maestro (y yo utilizo estos
términos de manera
intercambiable) es importante
que cada uno se dé cuenta y
entienda por completo que él
es un hijo espiritual de Dios… Un
líder en la Iglesia es también un
maestro, y una de las grandes
herramientas en la enseñanza
es el ejemplo.”
Natan Eldon Tanner, “Guiando como
el Señor guió”, en Liahona, enero de
1978, p. 1

19. Dirigir es enseñar
• El Élder Boyd K. Packer señaló que todos los líderes de la Iglesia
sirven como maestros: “El profeta es un maestro; sus consejeros
son maestros; también lo son todas las Autoridades Generales.
Los presidentes de estaca y los presidentes demisión son
maestros; los miembros de sumos consejos y los presidentes de
quórum son maestros; los obispos son maestros; y así es con
todas las demás organizaciones de la Iglesia. La Iglesia
progresa gracias al poder de sus enseñanzas” (Teach Ye
Diligently, edición revisada [1991], págs. 3–4).

20. ¿Está usted satisfecho por cómo
progresa la obra dentro de su
mayordomía?
Si la respuesta es no:
¿Qué es, entonces, lo que necesita
hacer?

21. Volvamos a las tres preguntas
iniciales:
1. ¿Cuál es el principal problema que conlleva su
llamamiento?
2. ¿Cuál es su principal desafío?
3. Hoy por hoy, ¿Cuál es su principal objetivo?
Hasta este momento de la
presentación, ¿ya descubrió cuál
es la solución de las tres?

22. Sí, la solución es aprender y
enseñar a la manera del Señor.

23. Su responsabilidad como líder-maestro
• “Una de las maneras más importantes de
cumplir con sus responsabilidades como líder
en la Iglesia es por medio de la enseñanza.”
• Manual de Instrucciones de la Iglesia, Libro 2: Líderes del
sacerdocio y de las organizaciones auxiliares [1999], págs. 367–
370.

24. • “La enseñanza eficaz es la esencia misma
del liderazgo en la Iglesia”.
• (Citado por el élder Jeffrey R.
Holland, véase “ ‘Venido de Dios
como maestro’ ”, Liahona, julio de
1998, pág. 27).

25. ¿Cómo lograr los objetivos de la obra
de Salvación?
Obra
misional
Retención
de
conversos
Activación
Templo e
historia
familiar
Enseñanza
eficaz
El quinto punto, la enseñanza eficaz, es un
objetivo, pero también es El Medio para alcanzar
los otros cuatro objetivos.

26. 1. ¿Cuáles son las maneras en que usted
puede enseñar como líder?
Con su ejemplo
Siendo bondadoso, como un
representante del Señor
Al ministrar y servir, amorosa y
desinteresadamente
Al vivir una vida digna y sin
mancha

27. 2. ¿Cuáles son las maneras en que usted
puede enseñar como líder?
Cumpliendo las normas y
procedimientos de la Iglesia
Al administrar a la manera del Señor
Al asistir a todas las reuniones de la Iglesia,
incluyendo las clases de Escuela Dominical y
sacerdocio
Al asistir al templo y cumplir con su orientación
familiar

28. Dirigir es enseñar
• Así es: cuando el profeta José Smith dijo: “Yo les
enseño principios correctos, y ellos se
gobiernan…”, implicaba que en buena medida
su enseñanza era a través del ejemplo.
• los miembros no van a hacer lo que usted no
hace.

29. 3. ¿Cuáles son las maneras en que usted
puede enseñar como líder?
Hablando directamente de
los principios del evangelio
Usted enseña a dirigir en las
reuniones de liderazgo
Aconseja cómo vivir en
evangelio en las entrevistas
Es un modelo de líder en su trato
cotidiano con los miembros.

30. Dirigir es enseñar
• Dirigir en la Iglesia significa enseñar, y mejorarnos
como maestros es aprender a enseñar con mayor
eficacia, desde el púlpito, en reuniones de liderazgo
y en circunstancias de persona a persona.
• La enseñanza, el llamamiento más importante, p. 171.

31. Conclusión
• El Señor apresura Su obra, y espera que nosotros
mantengamos Su paso, aprendiendo y enseñando a Su
manera y con Su poder.
• La obra más importante que usted puede hacer como
líder y como sacerdote es como maestro, porque
cuando usted ya no esté presidiendo, habrá dejado un
ejemplo de cómo debe administrarse el reino de Dios
sobre la tierra, y de cómo debe vivir un verdadero SUD.

32. Con nuestro ejemplo enseñamos qué cosas
no son lo suficientemente importantes.
• Si la presidencia de rama no está sentada en clase de escuela
dominical, al lado de su esposa, está enseñando que la clase
(o la enseñanza) no es suficientemente importante.
• Si los consejeros no están con el sacerdocio aarónico en la
hora del sacerdocio, están enseñándoles que ellos no son tan
importantes.
• Si los misioneros no entran a la clase de sacerdocio, están
enseñando que reunirse a platicar en el estacionamiento de la
capilla es más importante que estar con los miembros.

33. POR SU ATENCIÓN,
¡MUCHAS GRACIAS!