El corazón bombea la sangre alrededor del cuerpo en un circuito cerrado a través de contracciones y dilataciones. Funciona en tres fases: la aurícula se contrae, luego los ventrículos se contraen expulsando la sangre, y finalmente todo se relaja. El gasto cardiaco depende del volumen de sangre bombeado por contracción y la frecuencia cardíaca, y es aproximadamente 5 litros por minuto en reposo independientemente del estado físico.