Este documento presenta un resumen de la crisis financiera asiática de 1997. Comenzó con la devaluación del baht tailandés y provocó una fuerte recesión económica en varios países asiáticos como Corea del Sur, Indonesia, Tailandia y Malasia. La crisis se debió a desequilibrios macroeconómicos como déficit en cuenta corriente y una gran afluencia de capital especulativo de corto plazo. El FMI otorgó préstamos de rescate a varios países y se implementaron políticas de ajuste para control
1. CRISIS ASIATICA
Trabajo presentado por:
MAYERLY JEREZ HERREÑO
SERGIO LEONARDO PUERTO PINEDA
DIANA MARCELA PEREZ AVENDAÑO
XB
Trabajo presentado a la docente:
OLGA RESTREPO
UNIVERSIDAD COLEGIO MAYOR DE CUNDINAMARCA
FACULTAD DE ADMINISTRACION Y ECONOMIA
ADMINISTRACION DE EMPRESAS COMERCIALES
FINANZAS INTERNACIONALES
BOGOTA D.C., 27 de octubre de 2008
2. 1. INTRODUCCION.
La crisis financiera de Asia Oriental, estallo con la devaluación del BAHT Tailandés
el 2 de Julio de 1997. Los logros de crecimiento sostenido basados en la equidad
previos a la crisis, fueron reales; tanto es así que las políticas desarrolladas por los
países eran tomadas como ejemplo de lo que se debería hacer. El modelo Asiático
había sido exitoso, tanto en los resultados económicos, como en los avances en el
campo social. Se redujo de la pobreza, se elevaron los niveles de educación y se
buscaba una distribución igualitaria de los ingresos.
Aquellos que habían vendido el modelo asiático como el modelo más apropiado
para alcanzar un desarrollo sostenido liderado por un estado "inteligente" son los
que hoy atribuyen la crisis a la mala suerte. Así no es de sorprender que algunas
explicaciones de las causas de esta crisis tratan de defender posturas tomadas en
el pasado y por lo tanto el análisis de las causas de esta crisis ha tomado tanto o
más espacio que el de las formas de salir de ella Las economías más afectadas por
la crisis (Corea, Indonesia, Tailandia, y Malasia) son las mismas que muchos
admiraban por sus altas tasas de crecimiento.
3. 2. OBJETIVOS
2.1 OBJETIVO GENERAL
Determinar mediante una investigación los antecedentes y las consecuencias que
se presentaron en el desarrollo de la crisis Asiática; así como las acciones que se
tomaron para su solución.
2.2 OBJETIVOS ESPECIFICOS
Identificar los factores que provocaron el estallido de la crisis financiera vivida en el
año de 1997 por los países Asiáticos.
Establecer la incidencia de la crisis Asiática en la economía de los demás países
del mundo.
Analizar el efecto que se causó en las cuentas de las balanzas comerciales de los
principales países Asiáticos afectados por la crisis.
4. 3. EL MODELO DE ASIA
El Milagro de Asia Oriental consistió en un crecimiento Rápido y Sostenible con un
enfoque de Equidad. Se redujo la pobreza, se mejoraron de los servicios sociales y
se aumento el empleo.
En lo que se refiere al éxito de Asia Oriental fueron aquellas políticas
macroeconómicas que generaron un clima propicio para el aumento de la inversión
Privada. Adicionalmente en estos países el gobierno intervino para fomentar el
desarrollo, de diversas maneras: se crearon créditos subsidiarios y orientados a
industrias seleccionadas, se otorgaron subsidios a las industrias en decadencia, se
establecieron Bancos Estatales, la Inversión Pública en investigación aplicada entre
otros, a continuación mostramos un cuadro que representa la inversión interna en %
del PIB.
ASIA: Inversión Interna
( Porcentaje P.I.B )
1,961 – 1,961 – 1,961 – 1,961 –
1,995 1,997
1,970 1,970 1,970 1,970
China 20.6 30.0 34.0 38.2 40.0 35.0
Indonesia 10.4 22.7 28.3 31.3 38.3 31.0
Corea del Sur 20.0 28.0 30.7 37.0 37.0 35.0
Malasia 19.9 26.3 30.6 37.0 41.0 23.0
Filipinas 20.1 27.8 22.0 22.9 23.0 25.0
Tailandia 21.5 26.2 30.6 41.0 43.0 41.0
4. LOS FACTORES DE LA CRISIS.
Toda la crisis económica tienen una serie de manifestaciones, la característica más
relevante fue la brusca reducción de las tasas de crecimiento del P.I.B, tal como se
observa en el cuadro siguiente:
Tasas de Crecimiento del P.I.B.
(En porcentaje)
1,982-
1,992 1,993 1,994 1,995 1,996 1,997 1,998 1,999
91
Tailandia 8.1 8.1 8.4 9.0 8.9 5.9 -1.7 -10.2 4.2
Corea 8.9 5.4 5.5 8.3 8.9 6.8 5.0 -6.7 10.7
Malasia 6.3 8.9 9.9 9.2 9.8 10.0 7.3 -7.4 5.6
5. Indonesia 5.5 7.2 7.3 7.5 8.2 8.0 4.5 -13.0 0.3
Taiwán 8.1 6.8 6.3 6.5 6.0 5.7 6.8 4.7 5.7
Hong Kong 6.1 6.3 6.1 5.4 3.9 4.5 5.0 -5.1 2.9
Filipinas 1.3 0.3 2.1 4.4 4.8 5.8 5.2 -0.6 3.3
China 9.5 14.2 13.5 12.6 10.5 9.6 8.8 7.8 7.1
Japón 4.1 1.0 0.3 0.6 1.5 5.0 1.6 -2.5 0.2
Singapur 7.1 6.5 12.7 11.4 8.0 7.5 8.4 0.4 5.4
Fuente: F.M.I. (2000c 205).
Una de las primeras manifestaciones de la crisis fue el comportamiento del sector
externo de estas economías. Luego existe una segunda manifestación de la crisis,
la depreciación del tipo de cambio nominal de economías afectadas y una tercera
manifestación de la crisis fue la reversión del flujo de capitales privados a la región,
que se convirtieron en insostenible los déficit en cuenta corriente de la balanza de
pagos y que incidieron en las depreciaciones mencionadas.
Financiamiento Externo: Países Afectados1
(Miles de Millones de Dólares)
1,994 1,995 1,996 1,997
Balance en Cuenta Corriente -24.6 -41.3 -54.9 -26.0
Financiamiento Externo Neto 47.4 80.9 92.8 15.2
1. Flujos Privados Neto 40.5 77.4 93.0 -12.1
A. Inversión en Acciones 12.2 15.5 19.1 -4.7
- Directa 4.7 4.9 7.0 7.2
- Portafolio 7.6 10.6 12.1 -11.6
B. Créditos Privados 28.2 61.8 74.0 -7.6
- Bancos Comerciales 24.0 49.5 55.5 -21.3
- Cerditos Privados No Bancarios 4.2 12.4 18.4 13.7
2. Flujos Oficiales Netos 7.0 3.6 -0.2 27.2
-. Instituciones Internacionales -0.4 -0.6 -1.0 23.0
-. Créditos Bilaterales 7.4 4.2 0.7 4.3
Fuente : Radelet y Sach
5. CAUSAS DE LA CRISIS
1
http://www.monografias.com/trabajos11/finte/finte.shtml
6. Las crisis que se iniciaron en Tailandia con una serie de ataques especulativos
contra el baht estallaron tras varias décadas de excelentes resultados económicos
en Asia. Aunque las circunstancias no fueron idénticas en todos los países de que
se trata, las dificultades se debieron principalmente a la combinación de
desequilibrios macroeconómicos (aunque en general se mantuvo el equilibrio del
presupuesto público y las tasas de inflación fueron moderadas), al deterioro de la
balanza de pagos y a la fragilidad del sistema financiero y del sector empresarial.
Los desequilibrios de balanza de pagos obedecieron a una vigorosa afluencia de
capital privado y altas tasas de inversión privada, y se vieron exacerbados, antes de
la crisis,2 por el aumento de valor del dólar de EE.UU., con el que las monedas de
los países en cuestión estaban vinculadas oficial o extraoficialmente.
Varios factores explican la fragilidad de los sectores financiero y empresarial: fallas
preexistentes en las carteras de las instituciones financieras; un endeudamiento en
divisas desprovisto de cobertura, que expuso a las entidades nacionales al riesgo de
sufrir pérdidas considerables en caso de depreciación de la moneda; excesiva
utilización de crédito externo a corto plazo, e inversiones riesgosas con un trasfondo
de burbujas de precios de acciones e inmuebles.
Esos factores se venían acumulando en un entorno de gran afluencia de capital
privado y acelerada expansión del crédito interno en sistemas financieros
liberalizados3, en que la generalizada presencia de garantías públicas implícitas
(además de las que representan los sistemas de vínculo monetario) y el régimen de
supervisión y regulación no permitían hacer frente a los desafíos de un mercado
financiero mundializado.
En ese contexto, la variación en las actitudes de los agentes del mercado podía
suscitar, y en efecto suscitó, un círculo vicioso de depreciación de la moneda,
insolvencia y salida de capital, que fue difícil detener. El contagio se propagó
rápidamente en la región tras la devaluación del baht, pues los inversionistas
tuvieron la sensación de que otros países experimentaban dificultades similares,
que comprometían su solvencia. Al culminar las crisis, gran parte de las instituciones
financieras y las empresas de los países afectados se encontraban en quiebra.
Un Cambio Repentino De Las Expectativas Del Mercado, este cambio de
percepción habría precipitado la salidas de capitales que origino las presiones sobre
el tipo de cambio, las condiciones macroeconómicas se habrían deteriorado, el
pánico financiero por parte de los inversionistas domésticos y extranjeros reforzada
por la errónea respuesta del FMI y de la comunidad financiera internacional.
La Inestabilidad Intrínseca Del Mercado Internacional De Capitales, que tiende a
crear situaciones de pánico financiero; esto se refleja en la actitud de los
prestamistas internacionales quienes, ante una pérdida de confianza en el país
2
www.usergioarboleda.edu.co
3
http://www.monografias.com/trabajos
7. receptor, suspenden sus préstamos en forma masiva sin previo aviso, inclusive a los
deudores solventes.
Entre muchas de las causas que originaron esta crisis y las cuales son interpretadas
de diferentes formas y se plantean varios puntos de vista al respecto, pero en lo que
se concuerda es que el principal error de estos gobiernos fue la liberalización de los
sistemas financieros, esto hizo más vulnerable la economía de estos países ya que
se crearon muchas especulaciones por parte de los inversionistas.
6. LAS ECONOMIAS NO AFECTADAS. 4
Si bien es cierto la crisis asiática afecto a toda la región, como se ha visto, algunas
economías, tales como Taiwán y China prácticamente no se vieron afectadas.
La clave estuvo en la depreciación del dólar en Singapur, pues Taiwán y Singapur
tenían estructuras exportadoras similares (Singapur, deprecio su moneda por la
depreciación del ringgit de Malasia, su principal socio comercial)
Lo ocurrido en Taiwán genero expectativas de que Hong Kong siguieron el mismo
camino, pues las autoridades de Hong Kong respondieron mediante una política
monetaria contractiva, que elevo las tasas de intereses a niveles que lograron
prevenir una salida de capitales. Al parecer esta medida convenció a los
inversionistas de que la mantención del tipo de cambio fijo en Hong Kong era
creíble.
En consecuencia, si un país liberaliza la cuenta de capitales y al mismo tiempo
presenta un tipo de cambio inflexible y un marco regulatorio inadecuado, es un
candidato a una crisis financiera y cambiaria.
Por lo tanto, no siempre la liberalización de la cuenta de capitales es la causante de
todos los males, si no las características que la economía presenta en el momento
de la liberalización.
7. POLITICAS PARA CONTROLAR LA CRISIS5
Se solicitó al FMI que otorgara respaldo financiero a tres de los países más
gravemente afectados por la crisis: Corea, Indonesia y Tailandia. La estrategia
utilizada frente a la crisis tenía tres componentes principales:
7.1 Financiamiento. El FMI otorgó financiamiento por unos US$35.000 millones
para respaldar programas de ajuste y reforma en Corea, Indonesia y
Tailandia; la asistencia concedida a Indonesia se incrementó aún más en
1998-99. Otras entidades multilaterales y bilaterales se comprometieron a
aportar financiamiento por unos US$85.000 millones, aunque no se entregó
la totalidad de esa suma. Por otra parte se adoptaron medidas concertadas
4
http://www.monografias.com/trabajos11/finte/finte.shtml
5
http://www.imf.org/external/np/exr/ib/2000/esl/062300s.htm
8. (en diferentes etapas, tras la iniciación de esos programas, en diferentes
países) para poner coto a la salida de capital privado.
7.2 Política macroeconómica. Se adoptó una política económica más
restrictiva (en diferentes etapas según el país) para detener el colapso de los
tipos de cambio de los países —proceso mucho más avanzado de lo que
podrían justificar los parámetros fundamentales de la economía—e impedir
que la depreciación de la moneda condujera a una espiral inflacionaria y una
depreciación aún mayor. La restricción de la política monetaria fue, como
correspondía, temporal: una vez que comenzó a recuperarse la confianza y
se estabilizaron las condiciones del mercado se redujeron las tasas de
interés. En esencia, correspondía aplicar una política fiscal firme en Corea e
Indonesia, en tanto que en Tailandia se preveía la adopción de medidas de
restricción fiscal para dar marcha atrás al proceso de incremento del déficit
que había tenido lugar el año anterior a la crisis.
7.3 Reformas estructurales. Se adoptaron medidas encaminadas a corregir las
fallas existentes en el sector financiero y el sector empresarial. A través de
otras reformas se procuró mitigar las consecuencias sociales de la crisis y
sentar las bases para la reanudación del crecimiento económico.
Para las proyecciones macroeconómicas en que se basaban los programas
iníciales se adoptó el supuesto de que sería posible restablecer rápidamente
la confianza a través de un marco de medidas convincentes, aunado con
planes de financiamiento por montos elevados. En virtud de ese supuesto se
previó la desaceleración del crecimiento económico, que de todos modos
seguiría siendo positivo. Ni el FMI ni otros observadores previeron la
profunda recesión que iba a producirse: el PIB de Corea se redujo un 7% en
1998, el de Tailandia un 6% y el de Indonesia un 14%.
Además de otorgar asistencia financiera para programas de reforma de la política
económica en esos tres países, el FMI colaboró con otros países de la región que
estaban enfrentando la crisis:
Amplió y aumentó, en 1997, el monto del programa que estaba respaldando para
Filipinas y celebró con ese país un nuevo acuerdo de derecho de giro en 1998.
Intensificó sus consultas con otros países afectados por la crisis y les proporcionó
asesoramiento de política económica con respecto a las medidas que podían
ayudarlos a evitar el contagio. Entre otras cosas, el FMI coincidió con las
autoridades chinas en que debía mantenerse el tipo de cambio de la moneda de
China frente al dólar de EE.UU.
Se dio a las reformas estructurales más importancia que en los programas
habituales del FMI. Los detalles de esas reformas se formularon en colaboración
con las autoridades de cada país y con el Banco Mundial y el Banco Asiático de
Desarrollo.
9. La necesidad de reforma del sector financiero era especialmente apremiante, dadas
las causas de la crisis. En los tres países, los programas tuvieron los siguientes
componentes comunes:
• Cierre de instituciones financieras insolventes, para impedir pérdidas
adicionales.
• Recapitalización de instituciones financieras potencialmente viables, en
muchos casos con asistencia gubernamental.
• Estrecha supervisión, por parte del banco central, de instituciones financieras
en dificultades.
• Más estricta supervisión y regulación financieras para impedir la repetición
de las dificultades que habían conducido a la crisis. Los objetivos consistieron en
restablecer la solidez de las instituciones financieras y aplicar normas de supervisión
y regulación de nivel internacional. No obstante, en todos los casos ese proceso se
realizó en forma paulatina, dada la necesidad de una solución de compromiso entre
un avance convincente y la preocupación de que la adopción demasiado presurosa
de un régimen más severo pudiera perturbar el funcionamiento de un sistema que
estaba tratando de superar la crisis.
La reestructuración de la deuda de las empresas - incluido el establecimiento de
mecanismos de reestructuración viables - se consideró también una contrapartida
esencial para restablecer la solidez del sistema financiero. A este respecto el
avance fue lento en los tres países, con la consiguiente desaceleración del
crecimiento económico.
Las siguientes fueron otras de las reformas ejecutadas:
• Programas de protección de segmentos pobres y vulnerables de la sociedad
frente a los aspectos más nocivos de la crisis, profundizando y ampliando las redes
de seguridad y (especialmente en Indonesia) dedicando considerables recursos
presupuestarios al aumento de los subsidios de productos básicos, como el arroz.
• Medidas tendientes a una mayor transparencia en los sectores financiero,
empresarial y público.
• Medidas encaminadas a dar mayor eficiencia a los mercados y aumentar la
competencia.
8. VARIABLES6
6
http://www.monografias.com/trabajos33/control-capitales-malasia/control-capitales-malasia.shtml
10. • A partir de 1995, varios economistas habían comenzado a preguntarse si los
países del sudeste de Asia podían ser vulnerables al tipo de crisis que había
enfrentado Latinoamérica.
• El principal indicador objetivo fue la aparición de un muy fuerte déficit en la
cuenta corriente. Un examen más cercano hace notar que varios de los países
habían desarrollado finanzas preocupantemente debilitadas: fuerte inversión en las
altamente especulativas empresas de bienes inmobiliarios, financiándose mediante
fuentes externas débilmente informadas, o a través de créditos de instituciones
financieras subreguladas; durante 1996 el FMI y el Banco Mundial advirtieron esta
situación y le comunicaron a los gobiernos los riesgos de esta situación financiera, y
urgiendo la aplicación de políticas correctivas, sin embargo, estas advertencia
fueron básicamente rechazadas.
• El deslice hacia la crisis comenzó con una caída de las exportaciones en la
región, debida parcialmente a la apreciación del dólar (al cual las monedas estaban
fijadas) contra el yen, parcialmente a desarrollos específicos en industrias claves
(que generaron una caída en la competitividad de los tigres asiáticos en ciertos
rubros tecnológicos), y parcialmente a la creciente competencia China. Con las
exportaciones languidecíentes, la sobreconstrucción inmobiliaria se volvió
manifiesta, insertando al mercado en una burbuja inmobiliaria, posteriormente, la
caída de los precios inmobiliarios llevó consigo a los precios de los activos y puso
bajo sospecha la solvencia de las instituciones financieras.
• En este punto se sucedieron crisis financieras domésticas, pero durante la
primera mitad de 1997 los especuladores comenzaron a preguntarse si los
problemas financieros de los países del Sudeste Asiático, especialmente Tailandia,
podía obligarlos a devaluar para reflotar la economía. La creciente sospecha de que
tal movimiento podía llevarse a cabo, a pesar de la insistencia del gobierno de que
no era así, llevo un aumento en la prima de riesgo sobre las tasas de interés, lo que
a su vez incrementó la presión.
• El 2 de Julio de 1997 Tailandia se rindió a las presiones y dejó flotar el baht
(su moneda), esto llevó a una especulación contra otras monedas regionales, y fue
seguido rápidamente después de devaluaciones algo menores en Malasia,
Indonesia y las Filipinas. La ola de devaluaciones, y el problemático panorama
financiero que la crisis reveló, golpeó la confianza de los inversores; en un esfuerzo
por devolver la confianza, todos los países involucrados impusieron medidas de
austeridad fiscal. Tailandia recibió un préstamo de emergencia del FMI y parte del
condicionamiento fue una limpieza del sistema financiero.
• La presión hizo que Filipinas y Malasia hicieran flotar su tipo de cambio.
Luego en Agosto, Tailandia suspendió 42 bancos, Indonesia se sumó a las
devaluaciones regionales cuando abandonó el apoyo a la rupia. En Octubre
Indonesia pidió ayuda al FMI y en Hong Kong el dólar HK se ve bajo ataque.
11. • Un contrapunto interesante es el de Hong Kong, ya que en esa época poseía
un currency board, como el que tenía Argentina en la convertibilidad, el ataque a su
moneda no tuvo éxito y se mantuvo firme saliendo de la crisis en una región que
recién empezaba a sufrir y que, luego de caídas de otros países, iba a ser la que
hizo caer a Argentina.
• En Noviembre, Corea abandonó el tipo de cambio fijo y recurrió al FMI por
un paquete de ayuda. Entre Enero y Agosto de 1998 los organismos internacionales
mostraron en sus informes una caída de la presión en la región que finalmente se
vio plasmada en la baja de las tasa de interés por parte de la FED entre Septiembre
y Noviembre, esta baja de tasas fue tomada como un símbolo que la confianza
estaba regresando y que los capitales no emigraban hacia Estados Unidos.
• La crisis en parte se dio por un exceso de capital por la gran entrada de
dinero durante la primera mitad de la década, no en Inversión Externa Directa, sino
que se produjo en préstamos bancarios e inversión especulativa en los mercados
bursátiles. El boom crediticio fue agravado por la estructura empresarial de los
países asiáticos; en estos países las empresas son familiares o controladas por un
grupo predominante y la gerencia es cautiva de los accionistas, además muchas
empresas poseen participación en otras generando estructuras piramidales, con
este tipo de estructura empresarial los préstamos se realizan entre relacionados y
con pocas garantías, habiendo muchas veces malversación de fondos.
• Los gerentes y accionistas realizan proyectos (generalmente más riesgosos)
para que les generen un beneficio privado en vez de un beneficio a la firma, también
existe apropiación de recursos por parte de los accionistas y grupo controlador,
hacia los grupos minoristas.
• En un mercado donde existía una expansión del crédito y pocas garantías, la
crisis de la balanza de pagos y la pérdida de confianza del público (la caída en la
entrada de capitales), hizo notar la fragilidad del sistema, la fragilidad se ve cuando
se analiza la cantidad de créditos incobrables.
9. SALIDA DE LA CRISIS7
La recuperación económica en la mayoría de los países en crisis fue más rápida de
lo que preveían muchos observadores; se evitó la realización de los escenarios
pesimistas elaborados en el período en que los problemas eran más severos. Una
gestión macroeconómica bien concebida fue esencial para reforzar la balanza de
pagos, estabilizar los mercados financieros y facilitar la pronta reanudación del
crecimiento económico, aunque en todos los países asiáticos en crisis se está lejos
de haber cumplido todos los objetivos de la reforma estructural, los esfuerzos
realizados por sus gobiernos para hacer frente a esos arduos problemas han
contribuido a la vigorosa recuperación lograda.
7
http://www.imf.org/external/np/exr/ib/2000/esl/062300s.htm
12. En la mayoría de los países en crisis se registra un vigoroso crecimiento del
producto real, provocado por el aumento del consumo privado y la exportación, y
algunas nuevas inversiones privadas. Se prevé que en Corea la recuperación
económica que comenzó en el último trimestre de 1998, menos de un año después
del período más penoso de la crisis, suscitará un crecimiento económico del 8% en
2000, y es posible que los resultados superen esas proyecciones. En Tailandia, el
crecimiento económico sería del 5% en el presente año. En Indonesia, cuya
recuperación se vio afectada por conmociones políticas y una insatisfactoria
ejecución de la política económica, el crecimiento económico se reanudó a fines de
1999 y se prevé un crecimiento del PIB real del 4% en el presente año.
Para respaldar el crecimiento económico, los países de la región siguen aplicando,
en general, una política económica predominantemente acomodaticia. En muchos
casos, las tasas de interés real y nominal del mercado de dinero se sitúan por
debajo de las anteriores a la crisis. Las tasas de interés comenzaron a disminuir en
Corea y Tailandia a principios de 1998 y en Indonesia a mediados de 1999, al
reducirse las presiones que sufría la moneda. No obstante, la tasa de aumento del
crédito para el sector privado en la región sigue siendo relativamente moderada, en
parte porque las instituciones financieras se han dotado de mayor capacidad de
evaluación de riesgos y han adoptado un enfoque más prudente en cuanto al
otorgamiento de nuevos préstamos.
A medida que se afianza la recuperación se realiza un programa de consolidación
fiscal; los déficit presupuestarios están siendo eliminados, pese al costo de las
reformas del sector financiero, y los programas vuelven a inspirarse en los principios
de mínimo financiamiento interno y moderación del endeudamiento público. Si bien
se procura incrementar el gasto social, se ha logrado reducir el gasto en proyectos
de infraestructura ineficientes y otro tipo de gasto improductivo, incluidas las
afectaciones presupuestarias militares. Se están adoptando medidas de reforma del
sistema tributario, especialmente a través de la eliminación de exenciones
impositivas, para ampliar la base del ingreso fiscal y remozar la administración
tributaria, en procura de una recaudación más eficiente y una menor corrupción.
La balanza en cuenta corriente sigue siendo superavitaria, en parte debido al
aumento de la competitividad y la fuerte demanda mundial de productos
electrónicos, que contrarresta el aumento de la demanda de importación vinculada
con la aceleración del crecimiento económico. El alza del petróleo tiende a reducir el
superávit comercial en los países importadores de petróleo de la región y promueve
los superávit comerciales de Indonesia y Malasia. Los tipos de cambio han superado
los mínimos registrados durante la crisis, pero en cifras efectivas reales siguen
siendo francamente inferiores a los anteriores a la crisis, lo que promueve la
competitividad.
Se han restablecido las reservas internacionales oficiales, con la consiguiente
reducción de la vulnerabilidad de los países frente a las perturbaciones externas. Al
final de abril de 2000 las reservas de Corea, que en diciembre de 1997 se habían
reducido peligrosamente, llegaron a US$85.000 millones, y el país ha vuelto a
obtener acceso a los mercados internacionales de capital. En Tailandia, el monto de
13. las reservas internacionales supera en más del 100% la deuda externa a corto plazo
pendiente, lo que se contrapone en forma pronunciada con la situación imperante en
1997.
Los precios aumentaron en la mayoría de los mercados regionales de acciones en
relación con los valores registrados en el período de mayor intensidad de la crisis,
pero expresados en dólares siguen siendo francamente inferiores a los niveles
anteriores a la crisis.
Los países en crisis han comenzado a aplicar importantes reformas estructurales: se
han cerrado, fusionado o recapitalizado bancos y otras instituciones financieras en
dificultades y se ha reforzado la supervisión; se han desmantelado monopolios; se
han reducido las restricciones a la propiedad extranjera; las empresas están siendo
sometidas a un régimen más severo de gestión y declaración de datos, y se han
sancionado o modificado leyes encaminadas a reforzar la autonomía del banco
central, la política de competencia, los procedimientos de quiebra y los mecanismos
de lucha contra la corrupción.
10. CONCLUSIONES.
La liberalización financiera interna y externa provoco un boom crediticio, sostenido
con el ingreso de capitales privados externos.
El crecimiento de los préstamos bancarios llevo a un deterioro en la calidad de los
fondos adicionales, lo que precipito una sobre inversión en diversos factores, los
cuales algunos mostraban una saturación en el ámbito mundial.
En consecuencia la apertura al ingreso de capitales y la liberalización financiera, son
opciones validas de política siempre y cuando el sistema financiero interno se
encuentre preparado para poder absorber los flujos de capital. En este caso los
países afectados por la crisis, tuvieron un pobre manejo del ingreso de capitales
privados, el cual constituyo una fuente de desestabilización.
La crisis de Asia nos deja una lección, el cual es que la alusión a los fundamentos
14. sólidos o no de una economía, no solo debe incluir aspectos macroeconómicos, si
no también microeconómicos. Desde luego una ves iniciada la crisis, el pánico
financiero desencadena una corrida bancaria del país; la inestabilidad de los
mercados financieros mundiales lleva a que de manera fácil, los inversionistas opten
por buscar colocar sus fondos en otras economías.
En conclusión, las reformas en el sector financiero y la integración al mercado
mundial de capitales no se realizaron de la manera adecuada. En el ámbito
macroeconómico las políticas deben generar los fundamentos adecuados; esto
significa inflación baja, pequeños déficit fiscales, un déficit en cuenta corriente de la
balanza de pagos sostenible y consistente con el servicio futura de la deuda, tipos
de cambio reales adecuados y un monitoreo del endeudamiento externo del sector
privado
BIBLIOGRAFIA
• www.crisisasiatica.com
• www.usergioarboleda.edu.co/asia/
• www.banrep.gov.co
• www.lablaa.org
• http://www.imf.org/external/np/exr/ib/2000/esl/062300s.htm
• http://www.monografias.com/trabajos33/control-capitales-malasia/control-
capitales-malasia.shtml