2. Helmut Ditsch, el artista
plástico contemporáneo
más cotizado de la
Argentina.
Nació en 1962, en Villa Ballester,
Provincia de Buenos Aires. Es
un artista plástico argentino
contemporáneo. Actualmente,
es el pintor más cotizado de
nuestro país. Sus obras, únicas
en su estilo, se inspiran en
inconmensurables puntos
extremos de la naturaleza. Y
1980-82 Durante su
son elaborados sobre lienzos
que alcanzan dimensiones
Servicio Militar en la
monumentales.
Marina Argentina
3. Durante su niñez
comenzó a
relacionarse con la
pintura de manera
plenamente
autodidacta.
Su primer vínculo con
las bellas artes se
produjo recién en
1988, cuando su
bagaje artístico le
permitió ingresar en
la Academia de
Bellas Artes de Su principal objetivo allí fue estudiar las
Viena (Austria), de técnicas de los grandes maestros de la
donde egresó con las pintura universal, entre ellos: Caspar
más altas David Friedrich y Vermeer Van
distinciones. Delft.
4. En los años noventa, instalado
oficialmente en Viena, su
carrera artística cobró una
dinámica que no se detuvo. En
1977 ya era considerado uno
de los artistas jóvenes
exitosos y, dos años más
tarde, llegó su consagración
con la obra “La Cordillera”,
adquirida por el OeNB (Banco
Central de Austria) en una
cifra record para un artista
plástico argentino actual.
“El hielo y la Eternidad transitoria”
5. En el año 2000 instaló su atelier en Irlanda
completando, en 2005, el ciclo “Grandes
Temas Naturales” (que hasta ese momento
abarcaba desiertos, montañas y hielos) con la
obra “El Mar”, inspirada en el océano
Atlántico.
Glaciar “Perito Moreno”
11. “Una obra de Helmut Ditsch
batió el récord histórico para el
arte argentino”
“El Mar II”
12. El artista destronó del primer puesto a Berni, que
ocupaba ese lugar por “Desocupados”. El cuadro es
el Océano Atlántico mirado desde la costa irlandesa.
Tiene alrededor de 600 tonos de azul diferentes. Lo
pagaron 865 mil dólares.
A fines de los ’80 Helmut Ditsch se fue del país
defraudado con las galerías de arte y los críticos.
Ahora quiere volver, con el mérito de haberse
convertido en el artista plástico argentino más caro
de la historia.
13. La academia local sigue escéptica respecto del valor de
sus obras, esos paisajes monumentales e
hiperrealistas en los que da la sensación de que uno
se puede meter. Y él, que sabe de ese desdén, se ríe y
lo disfruta desde la otra vereda, mientras exhibe el
contrato de venta de “El Mar II” por US$ 865.000
dólares.
La operación, que superó la marca que tenía Berni con
“Desocupados”, se le hizo en Austria. No fue en su
casa, lo habitual en estos casos. “Nunca tuve
intermediarios”, se jacta el artista.
14. El comprador fue Parque de Alquife S.L., una
desarrolladora de proyectos urbanos de Andalucía.
“Uno de sus ejecutivos vino a mi atelier en Austria,
se paró frente a la pintura (de 6 metros de largo por
1,5 de alto) y se emocionó hasta las lágrimas. No
pagó ese dinero porque yo era Helmut Ditsch ni por
un tema de mercado. Su sensibilidad fue lo que lo
llevó a ofrecer semejante suma. La obra era parte de
mi colección privada y no tenía precio. Pero me
pareció que era un buen momento para que se
fuera”, dice el autor.
15. Helmut, de 48 años, explica que esta venta coincide
con un momento personal muy triste. Marion, su
esposa durante casi veinte años, murió de cáncer
hace poco. “Ella fue muy importante en mi carrera y
especialmente en la producción de “El Mar”. Se
enfermó mientras yo pintaba esta obra y algo de esa
tristeza se trasluce.” (…) A la Argentina, por ahora,
viene cada tanto a visitar a su familia y vuelve a
Irlanda, donde vive desde hace una década tras pasar
unos años en Austria.
16. En una de sus tres últimas visitas al país, en enero, en
Villa Ballester (donde se crió) lo declararon Ciudadano
Ilustre.
Algunos miles de afortunados han podido ver “El Mar
II” en vivo, allá por el 2006, cuando se exhibió en la
Feria del Libro.
“El triunfo de la Naturaleza”
17. Por lo demás, muy poca obra de Helmut pasó por la Argentina.
Apenas montó una exposición, en 2001, en el Museo Nacional
de Bellas Artes. “Fue un accidente”, dice irónico. Hoy, la
mayoría de sus 400 cuadros (todos de grandes dimensiones),
se encuentran en edificios gubernamentales y empresas de
Irlanda, España, Alemania, Italia, Inglaterra, Austria y Chile.
¿Sos consciente que con tu venta desbancaste a gigantes como
Berni y Pettorutti? Para mí no significa nada. Lo importante
es ver lo que le pasa al público con una obra mía. (…)
Fuente: Pablo Sigal, Clarín
“Los Hielos”