1. Periódicamente es importante sustituir los filtros de nuestro coche. Con los
filtros nuevos tenemos muchas ventajas como, por ejemplo, un menor
consumo de combustible. En el coche hay varios tipos de filtros, siendo los
más habituales el de aceite, el de combustible, el de aire y el de partículas.
El filtro de aceite va situado en el motor y es muy importante sustituirlo cada
vez que realizamos un cambio de aceite. Con el funcionamiento normal del
motor, se sueltan pequeñas partículas de metal, que pueden circular por todo el
motor por medio del aceite.
Con el filtro de aceite, lo que conseguimos es recoger todas las partículas
metálicas que pueden perjudicar al motor y su rendimiento, por este motivo
es muy importante su sustitución.
Otro de los elementos muy importantes es el filtro de combustible. En los
vehículos gasolina, la misión de este filtro es eliminar las impurezas de
combustible que se encuentran en el depósito. En el caso de los vehículos
diésel, lo que conseguimos es eliminar el agua que está diluida en el
combustible.
En ambos casos conseguimos que el combustible llegue al motor en las
mejores condiciones. Cada vez que realizamos el mantenimiento de nuestro

2. coche es importante revisar el filtro de combustible y sustituirlo en caso
necesario.
En tercer lugar tenemos el filtro de aire. Este filtro consigue eliminar las
pequeñas partículas de polvo y otros elementos, para que no lleguen al
motor. De esta forma, el aire que se introduce en el motor es lo más limpio
posible. Un filtro limpio nos ayuda a mejorar el consumo y la contaminación
de nuestro coche.
Cada vez que realizamos una revisión de nuestro coche es aconsejable echar
un vistazo al filtro de aire ya que, dependiendo mucho de los terrenos por los
que circulamos, se ensucia más o menos rápido.
Por último nos encontramos con el filtro de partículas, que está
especialmente indicado para mejorar la calidad del aire en el interior del
habitáculo. Este filtro se encarga de eliminar todas las pequeñas partículas de
polvo y polen, ofreciendo limpieza en el interior.
El filtro de partículas está especialmente indicado para los alérgicos y es
aconsejable revisar su estado cada vez que realizamos un mantenimiento.