Aumentar el valor de vida del cliente (CLV por sus siglas en inglés) requiere impresionar a los clientes con alta calidad de productos y excelente servicio. También se debe generar compromiso con los clientes mediante estrategias de marketing personalizadas como ofertas y recompensas por lealtad. Finalmente, es importante retener a los usuarios a través de calidad y servicio consistentes para obtener lealtad y recomendaciones a través del boca a boca.