1. AREQUIPA. “Vosotros que
posais la planta altivos en-
trad aquí, por el dolor cu-
biertos que nunca la alga-
zara de los vivos, ha de
turbar la calma de los
muertos", es así como ver-
sa la entrada al Cementerio
La Apacheta. Ubicado entre
los distritos de Socabaya
y José Luis Bustamante y
Rivero, el Cementerio Ge-
neral de Arequipa albertga
cerca de 200 mil difuntos.
La última semana recibió
a miles de personas por
conmemorarse un año más
el ‘día de los muertos’.
Las calles circundantes al
cementerio, como Lanificio
amanecieron el domingo
30 de octubre ocupadas
por decenas de puestos
de venta de arreglos flora-
les. Los comerciantes apro-
vecharon el fin de semana
para ofrecer sus productos
a las familias que visitaron
a su seres queridos. La
atención fue desde las 6
hasta las 18 horas.
A mano derecha de la en-
trada pricnipal, dando la
bienvenida a los visitantes,
se puede encontrar el mo-
nuento al prócer de la in-
dependencia Mariano Mel-
gar, construido para con-
memorar el bicentenario
de su fallecimiento. La oda
“por fin libre y seguro” nos
recuerda el alma de poeta
que llevaba en la sangre.
El Presidente de la Socie-
dad de Beneficiencia Pú-
blica de Arequipa, Edgardo
Calderón Paredes, ha
puesto mucho empeño en
evitar que se expendan be-
bídas alcohólicas en los
interirores del cementerio.
Sin embargo se pudo apre-
ciar a decenas de personas
libando frente a las tumbas
de sus familiares. Una per-
sona recorría las instala-
ciones con un coche de
bebé en cuyo interiror tenía
alrededor de 15 botellas
de cerveza listas para ser
vendidas.
No solo se espera encon-
trar tumbas y mausoleos
dentro del camposanto,
pues muchas historias sur-
gen entre estos lugares.
Una de las cosas que más
llama la atención es un pa-
bellón construido al fondo
ÁLVARO FIGUEROA CH.
alvarofch10@gmail.com
VÍCTOR APAZA. Su tumba es la más visitada en estos días festivos
UNA FIESTA Familiares cantan a sus muertos
CONCURRIDA ASISTENCIA. Miles de personas visitaron a sus difuntos seres queridos por el día de los muertos
El Señor del Santo Sepulcro
Una imagen del Señor del Santo Sepulcro se encuentra en
la Capilla del cementerio, que se terminó de construir el 6b
de abril de 1963 gracias al apoyo de la Sociedad de Bene-
ficencia Pública de Arequipa.
Como es tradicional, esta imagen recorre las calles aleda-
ñas a La Apacheta durante Semana Santa y entre el 1 y 2
de noviembre una replica se exhibe en las afueras del
camposanto donde los fieles pueden encender unas velas.
Circuito
turístico
Las noches del 28 y 31 de
octubre se realizó el circuito
turístico “Mitos y Leyendas”
en el Cementerio La Apa-
cheta. Cientos de personas,
entre niños, jóvenes y adul-
tos se hicieron presentes
para conocer las historias
que esconden las más fa-
mosas tumbas del campo-
santo. La Sociedad de Be-
neficiencia Pública de Are-
quipa promovió esta reno-
vada guía que se viene
dando desde el año 2011.
Una de las leyendas más
conocidas y divulgadas en-
tre arequipeños es la histo-
ria de Mónica.
El molle
Quienes recorren el campo-
santo podrán apreciar que
en gran parte se encuetra el
árbol de molle, según ceun-
tan los cuidadores del lugar,
este árbol sirve como protec-
tor contra sucesos sobrena-
turales como un poltergeist
(fenómeno paranormal).
“Un día para los muer-
tosno es suficiente para
ser recordados, lamen-
tablemnte muchas tum-
bas están olvidadas”.
EVARISTO
PORTILLO
“Víctor Apaza siempre
será considerado un
santo entre los pobres,
por la cantidad de mila-
gros que hace”
JOSEFA
COLQUE
“Siempre venimos a
vender nuestros arre-
glos florales en estas
épocas, entre 10 y 15
soles”.
MAR˝A
CHOQUE
“La Sociedad de bene-
ficiencia trabjará en
conjunto con las muni-
cipalidad para evitar el
ingreso de alcohol”.
EDGARDO
CALDER N
“Víctor Apaza es consi-
derado un santo entre
las personas, muchos
vienen a pedir un mila-
gro a esta tumba”.
JHONY
RAMOS
AREQUIPA
VIERNES 04 DE NOVIEMBRE DE 2016 7 ESQUINAS AREQUIPA
VIERNES 04 DE NOVIMEBRE DE 2016
del cementerio, donde se
enterraban los condenados,
excluidos por la religión ca-
tólica, que eran criminales,
suicidas, extranjeros, de
otras religiones.
PRESENTES. Y como si
nunca se hubieran marcha-
do de este mundo, muchos
reciben la visita de sus fa-
miliares como si de una
reunión normal se tatará.
Este es el caso de la familia
Gómez Chalca, quienes
acompañados de la voz de
Julio Gómez visitan al padre
fallecido en el 2006, Don
Eusebio Gómez. Y al ritmo
de una buena salsa y unas
botellas de cerveza Arequi-
peña recuerdan los gratos
momentos vividos con el
patriarca dela familia.
Mi padre Eusebio murío de
un paro cardíaco” cuenta
su hijo mientras sube la mi-
rada y posa sus ojos frente
a la tumba de su progenitor.
Acompñado de sus hijos y
hermanos, con un parlante
a los pies, canta las can-
ciones que su padre le ha-
bía enseñado.
Adentrándose más entre
los pabellones más anti-
guos, detrás de la Capilla
se encuentra el pabellón
de los judíos. Un área árida,
cuya distribución de las
tumbas llama la atención a
quienes van en busca del
pozo de agua. En este lugar
encontramos a jóvenes sa-
cando valdes de agua que
posteriormente son vendi-
das.Alguno de estos jóve-
nes también trabajan tras-
ladando una escalera, para
aquelas personas que des-
een dejar los arreglos en
los nichos ubicados en las
partes más altas de lso pa-
bellones.
“Trabajamos como personal
dentro del cementerio, es-
tamos debidamente identi-
ficados, como puedes ober-
var” son palabras de Daniel
Puma, quien lleva un cha-
leco verde con las inscrip-
ciones de las sociedad de
Beneficencia Pública de
Arequipa. Así es como al-
gunas, por algunos soles,
estas personas recorren
todo el cementerio durante
todo el día
EL SANTO. “Era sabido
que la sangre de inocentes
servía para hacer milagros”.
Víctor Apaza Quispe se
convirtió en un santo entre
la población, su tumba, ubi-
cada en el pabellón de San
Hilarión es la más visitada
por las personas. Decenas
de flores adornan los pies
de este nicho, y hasta hace
un par de año las velas
acompañaban esta bella
imagen.
El 17 de setiembre de 1971
ocurre el último fusilamiento
en la ciudad de Arequipa,
Víctor Apaza fue acusado
de asesinar a su conviviente
Agustina Belisario Capa-
coyla. La Corte Suprema
de ese entonces dictaminó
la pena capital luego de
haber sido sentenciado a
25 años de prisión en pri-
mera instancia. En las 24
horas posteriores la orden
se debió cumplr, 7 balas
perforaron el pecho de Víc-
tor Apaza, y un tiro de gracia
atravesó su cabeza.
"Muchos vienen, pues lo
consideran un santo, por-
que les hace milagros", ase-
gura una de las personas
que, como todos los años
deja una ofreneda floral en
este pabellón. “Era inocen-
te, lo fusilaron injustamente,
el pobre hombre merecía
el perdón”, cuenta Doña
Josefa mientras mira acon-
jogada la tumba.
“Ahora es nuestro santo,
el santo de los pobres por-
que nos hace milagros” es
otra de las declaraciones
de una de las decenas de
personas que se psotraron
ante la lápida en estos días
festivos.
Los condenados a pena de
muerte no tenían derecho
a un velorio, inmediatamen-
te después de su ejecución
fue conducido al cemente-
rio, sin imaginar que un
mar de gente, entre policías,
periodistas y personas co-
munes esperaban a las
afueras del penal Siglo XX.
Quien fuera su abogado
defensor, César Villalba
Treviños hace mención a
que nunca en la un sepelio
causó tanta conmoción en
la ciudad, ni los funerales
del recordado alcalde Ulrich
Neisser o el Padre Víctor
Barriga pudieron supera la
masa humana que convocó
el entierro de Apaza.
La historia de Víctor Apaza
seguirá viva mientras cien-
tos de personas se acercan
anualmente a dejar un ramo
de flores, así como las hi-
sotiras que el Cementerio
la Apacheta guarda en su
interior, muchos mitos y le-
yendas surgen aquí, los
restos de personajes ilus-
tres descansan en esta mo-
rada. Mientras las puertas
del camposanto permanez-
can abiertas estas historias
trascenderán de generación
en generación
¡El último
descanso!
EN ESTAS FECHAS ES UNO DE LOS LUGARES MÁS CONCURRIDOS
Rodeado por árboles de cedro y de molle elRodeado por árboles de cedro y de molle el
Cementterio General recibe a sus visitantesCementterio General recibe a sus visitantes