1. Cómo Construir una Piscina Natural
Con estos consejos podrás crear una piscina natural en sinonía con el ecosistema.
Augosto/Septiembre 2002
Por Douglas Buege y Vicky Uhland
Aunque ya son bastante comunes en muchos países Europa, las piscinas naturales
están todavía en su infancia en otros lugares. Pero en los últimos años unos cuantos
constructores un creciente número de particulares han aprendido a construir piscinas
sin depender de una masa de productos manufacturados y aditivos químicos. Han
descubierto que es posible construir piscinas que suponen una mayor implicación con
la naturaleza y fusión con el paisaje natural. Las piscinas naturales emplean grava,
piedra y barro en lugar de cemento o fibra de vidrio, y plantas acuáticas en lugar de
los dañinos productos químicos y los complejos sistémas de filtrado mecánicos. Las
plantas enriquecen la piscina con oxígeno, dan apoyo a las bacterias beneficiosas
encargadas de consumir desperdicios y organismos dañinos, y ofrecen un hábitat a
ranas, libélulas y más vida acuática. El resultado es un bello sistema ecológicamente
diverso cuya construcción resulta relativamente barata. (Una piscina natural puede
costarte unos 1800 euros si te encargas personalmente de su construcción, mientras
que las piscinas convencionales pueden llegar a costar más de 7000 euros.) Las
piscinas naturales no necesitan nocivos productos químicos, se pueden considerar de
escasa demanda tecnológica y una vez instaladas sólo requieren un mínimo
mantenimiento. No tendrás que drenar la piscina cada otoño. Excepto por
laesporádica necesidad de relleno, sólo tendrás que llenar la piscina una vez.
Cómo construir una piscina natural – Pág. 1
2. 1 – EXCAVAR
El método más barato y ecológico para
fabricar una piscina consiste en
simplemente cavar un hoyo el el suelo.
Puedes hacer tu estanque tan profundo o
poco profundo como desees, pero en
todo caso, la clave está en crear los
laterales en pendiente: de otro modo la
tierra se desmoronaría. La proporción
debería ser de 30cm en vertical cada
90cm horizontales.
"No se persigue un efecto bañera, sino
algo más similar a un cuenco sopero".
Una de las principales razones por la cual
las piscinas tradicionales se construyen
sobre una malla de acero es para
asegurarse de que las paredes se
mantienen verticales y perpendiculares a
la superficie del fondo de la piscina.
Construyendo una piscina con los laterales
en pendiente estarás deshaciéndote de la
necesidad de cualquier tipo de refuerzo de
acero.
Cómo construir una piscina natural – Pág. 2
3. 2 – ESPACIADO
Reserva al menos el cincuenta por ciento de la superficie de tu piscina para plantas de
poca profundidad, ya sea en un extremo o en un anillo alrededor de los laterales, con
esto eliminas la necesidad de clorina y de los caros filtros y bombas. Ahora querrás
separar el área de tu piscina y la zona de filtrado. Un borde interior a dos o tres
centímetros de la superficie del agua mantendrá a las plantas en su lugar pero
permitiendo que el agua de la zona de natación se mueva hacia la zona de plantas
para su filtrado.
Cuando el agua pasa a través de la estructura figrosa de las raíces, las bacterias
concentradas en las raíces de las plantas actúan como un filtro biológico, eliminando
los contaminantes y los excesos de nutrientes en el agua. Los organismos
descomponedores, que también se encuentran en las raíces de las plantas, consumen
las bacterias eliminando la acumulación de residuos en el agua.
Dentro del área para las plantas, el agua debe encontrarse progresivamente a mayor
profundidad, alcanzando la profundidad máxima de 45 centímetros junto al área de
natación. Los 15 centímetros más externos del área e plantas tendrán una profundidad
de entre 5 y 8 centímetros, y serán la ubicación de las plantas acuáticas más altas. La
vegetación sumergida y flotante ocupará el área más profunda.
Además de limpiar el agua y hacer que tu piscina resulte hermosa a la vista, la zona
menos profunda del área de plantas calienta el agua con rapidez y provee un hábitat a
ranas y muchos invertebrados. Ellos gustan de aguas poco profundas para
establecerse y lo agradecerán comiéndose las larvas de los moquitos.
Cómo construir una piscina natural – Pág. 3
4. 3 – FILTRADO NATURAL
El agua necesita estar en circulación
constante para que las raíces de las
plantas se encarguen de limpiar la
piscina. También necesitas airear el
agua para que los organismos
acuáticos dispongas del oxígeno que
precisan. (Sin la oxigenación
adecuada, el agua de tu piscina se
estancará produciendo fétidas
bacterias anaeróbicas.) El agua se
puede canalizar desde una bomba
hasta la zona de plantas a través de
tubos de PVC. (Se recomienda el uso
de PVC flexible en climas fríos).
En cualquier clima, entierra el tubo bajo la tierra a unos 45 centímetros de
profundidad. El aireamiento subacuático, que utiliza menos energía que las cascadas
fabricadas y hace circular el agua con una mayor eficiencia, implica la difusión de
aire en el fondo de tu piscina. Puedes construirte tu propio aireador, usando un
compresor de aire (1/4-caballo de potencia para una piscina de menos de 4000 m2
) y
tubos de alta resistencia conectados a un difusor. El difusor, que hace borbotear el
aire a través del agua, reposa en la parte más honda de la piscina, donde no suela
haber riesgo de que los nadadores puedan golpearlo accidentalmente. Conecta un
colector de cobre al compresor para regular el aire que es bombeado hacia la piscina.
El aireamiento de la piscina debe tener lugar de cuatro a ocho horas diariamente: por
la mañana, cuando la demanda de oxígeno es mayor, y otra vez por la noche. Coloca
tu aireador, la bomba y la espumadera en un contenedor de plástico, ya sea un cubo o
un macetero grande, y tápalo con un filtro de malla de acero para mantener tu equipo
protegido de los residuos. Hazte a la idea de que gastarás alrededor de 700 euros en la
adquisición de un equipo para la aireación de calidad.
Algunas personas emplean espumaderas conectadas a una pequeña bomba pequeña
para succionar residuos flotantes. Aunque este dispositivo no resulte esencial, debes
considerar la posibilidad de adquirirlo si tu piscina es propensa a acabar llena de
hojas o semillas de las plantas y árboles colindantes. La espumadera elimina los
restos que de otra manera se hundirían contribuyendo a la aparición de algas.
Instalar bombas y compresores puede resultar una tarea delicada porque estarás
colocando dispositivos eléctricos bajo el agua. Esos dispositivos se conectarán al
suministro eléctrico de la casa a través de conductores enterrados. No utilices una
extensión del sistema eléctrico. Permite que un electricista profesional revise o se
encargue de esta instalación.
Cómo construir una piscina natural – Pág. 4
5. 4 – SELLANDO EL ESTANQUE
Una vez que ya has cavado el hoyo para tu piscina y la zona de plantas, tendrás ante ti
un par de opciones, dependiendo de las condiciones de tu suelo, para asegurarte de
que la piscina conserva el agua: puedes aplicar una capa de bentonita para sellar el
suelo o colocar un revestimiento sintético. La bentonita suele ser la opción más
económica aunque no siempre es viable.
La bentonita funciona como un pegamento, uniéndose con las partículas del suelo y
evitando que el agua se filtre hacia la tierra. Algunos suelos pueden contener tal
cantidad de barro que simplemente compactando el fondo del estanque ya será capaz
de retener el agua. Un constructor profesional te puede orientar en este aspecto. Pero
cuidado: la bentonita no se adhiere bien a los suelos arenosos. Particularmente los
suelos arenosos pueden requerir hasta 130 kilos por metro cuadrado, en lugar de la
mitad que es lo que requiere un suelo rico en barro. La bentonita también puede
resultar problemática cuando el suelo periférico es muy seco. En climas muy secos se
recomienda que la bentonita se aplique por debajo de revestimiento sintético cosido
al fondo. Este revestimienro evita que la bentonita se desplace. En climas más
húmedos, la bentonita se puede aplicar directamente sobre el suelo. Antes de tratar tu
piscina con bentonita o cualquier otra arcilla en polvo, apisona el suelo
exhaustivamente. Puedes hacer esto o con un rodillo o una plancha compactadora.
Luego, usando una máscara, esparce una capa de 5 a 8 centímetros de bentonita en
polvo por los laterales y el fondo de la piscina. Compáctalo con un tractor o una
plancha compactadora. Luego aplica otra capa de Pack it down with a tractor or plate
compactor. Then apply another foot of arena de calidad y vuelve a compactar.
Si te decantas por un revestimiento, elige uno realizado con etileno propileno dieno
en lugar de PVC. EPDM es un caucho sintético el doble de caro que el PVC pero que
merce la pena el coste extra. Posee protección frente a los rayos utlravioletas, y a
diferencia del PVC se mantiene flexible durante las épocas de frío. Si tu suelo no
contiene rocas o raíces, elige un revestimiento de 45 ó 60 milímetros. Puedes usar un
revestimiento de 30 milímetros si tu suelo es muy arenoso y suave y si tus invitados
no son propensos a provocar jirones en el revestimiento mientras retozan en la
piscina. Antes de colocar tu revestimiento, compacta el césped y recúbrelo con una
capa de arena o algún material absorbente como viruta de madera o papeles de
periódico. El papel de periódico es una buena opción: cuando se moja, se adhiere al
revestimiento, proporcionando una protección extra si al revestimiento le aparece
algún pequeño agujero.
Después de haber instalado la bentonita o el revestimiento, cubre el fondo de la
piscina con 10 ó 12 centímetros de grava. La grava provee un hábitat para las
bacterias beneficiosas, que ayudarán a biodegradar hojas y otros materiales que se
hundan en el fondo de tu piscina. Asegúrate de que estás usando grava limpia. Llena
un cubo de 20 litros con grava de la que tengas planeado usar. Usa una espita para
Cómo construir una piscina natural – Pág. 5
6. verter aguar entre la grava. Si el agua se vuelve sucia necesitas o bien limpiar la grava
o adquirir otra distinta. Además del recubrir la piscina con grava, mucha gente opta
por constuir escaleras de guijarros para entrar y salir de la piscina. Un muelle en
voladizo sobre el agua también provee un fácil acceso para entrar y salir de la piscina
además de que ayuda a proteger los lados de de ésta.
Para finalizar con los lados de tu piscina, usa la plancha compactadora por el
perímetro. Esto frenará la erosión del suelo pero aún no es garantía suficiente de que
la habrá tierra que caiga dentro de la piscina. Una posibilidad es perfilar los bordes
con rocas, piedras lisas o planchas de madera. One option is to edge the perimeter
with rocks, flagstone or wood planking. Lo mejor, plantar justo al lado del borde y
dejar que sean las plantas las que estabilicen el perímetro. Las plantas no sólo se
ocupan de fijar el suelo, sino también de crear un entorno natural y especial para la
piscina. Si utlizas plantas en lugar de piedra, escoge plantas que prosperen en suelos
húmedos o toma las medidas oportunas para que el nivel del agua esté al menos
treinta centímetros por debajo del nivel del borde para que las plantas no se anieguen.
Cómo construir una piscina natural – Pág. 6
7. 5 – ELEGIR LAS PLANTAS
Asegúrate de elegir plantas
adecuadas para tu clima. Puedes
aprovechar las ofertas de fin de
temporada en los viveros para ahorrar
algo de dinero.
Las juncias (Carex) y los juncos
(Scirpus), ambas plantas acuáticas,
confornab una gran vegetación
emergente para el perímetro de tu
piscina. Puedes considerar también
las aneas (Typha angustifolia) y los
lirios acuáticos, en todo caso
infórmate sobre qué variedades no
atestarán el área reservada para otras
plantas. La pontederia cordata, la
flecha de agua (Sagittaria) y la
onagraria (Ludwigia) son todas
candidatas para la parte menos
profunda de tu piscina. Asegúrate
también de incluir plantas
subacuáticas como puedan ser las
yanas (Elodea) y colas de zorro
(Ceratophyllum) por su elevada
generación de oxígeno.
En aguas de 15 a 45 centímetros de profundidad, coloca una mezcla de plantas
flotantes, subacuáticas y emergentes. Los lirios de agua (Nymphaea) se adaptan a
cualquier profundidad, por lo tanto úsalos con libertad. Flotantes, como las lilas de
agua (Potamogeton) y las lentejas de agua (Lemna minor), se mueven libremente por
la superficie y cubren rápidamente la superficie para plantas.
Una vez que hayas comprado tus plantas, puedes plantarlas en la piscina llena. Cíñete
a un plan, agrupando las plantas de acuerdo a su altura y tipo. Coloca tus plantas
sobre el suelo, fijándolas con toda la grava que necesites.
Cómo construir una piscina natural – Pág. 7
8. 6 – CONTRA LAS ALGAS
Las algas compiten con las plantas por los nutrientes y la luz, Algae compete with
plants for nutrients and light, pero la floración de las algas de primavera suele
disminuir tan pronto como los nenúfares y otras plantas emergen sombreando el agua.
Promueve el crecimiento de las plantas y la disuación de las algas añadiendo plantas
y eliminando fósforo para mantener un pH bajo (de 5.5 a 6.5). El remedio más
sencillo y que conlleva menor riesgo para el ecosistema acuático, es añadir más
plantas, las cuales acaparán los nutrientes necesarios para las algas. Una segunda
opción viene a ser el control del fósforo de la piscina. Los fertilizantes y la orina son
las dos mayores fuentes de este nutriente, así que deberás controlar que tu piscina se
encuentre lo más libre posible de este nutriente. También puedes incrementar las
horas de aireamiento para estimular una mayor actividad biológica.
Si persiste el problema de las algas, puede ayudar el añadir pequeñas cantidades de
paja a la piscina.
Recuerda: tu piscina es un dinámico ecosistema viviente. Si le añades químicos
sintéticos es probable que no consigas que vuelva a recuperar su balance natural.
Cómo construir una piscina natural – Pág. 8
9. 7 – MANTENIMIENTO
Eliminar los residuos
de las plantas en
primavera y otoño
ayudará a prolongar
la vida de tu piscina
natural. Mantén el
nivel del agua
constante y mantente
preparado para añadir
agua siempre que sea
necesario.
Puedes adquirir baratos kits en tiendas de jardinería para analizar los niveles de
nutrientes en tu agua con el fin de detectar posibles problemas.
Además del mantenimiento de la salud biológica de tu piscina, comprueba también
los sistemas mecánicos anualmente. Limpia los difusores con vinagre para vaciar los
depósitos, comprueba los conductos de aire en busca de grietas u obstrucciones y
examina todas las conexiones con la bomba.
Cómo construir una piscina natural – Pág. 9