2. Nos encontramos frente a dos
temas emergentes para el
mundo actual, la ecologías,
frente a los últimas noticias
sobre el calentamiento global,
la tala indiscriminada de
bosques, la pesca
indiscriminada, etc.
Y la paz, frente a una ola
creciente de violencia e
irrupciones agresivas en la vida
de las personas y los pueblos.
3. Es urgente educar a la
humanidad con vistas a la
formación de una
conciencia responsable y
solidaria respecto al "medio
ambiente".
El ser humano se ajustaba
con toda normalidad a los
ritmos de la naturaleza.
Ante el panorama actual,
los hombres y mujeres que
creen en Dios no pueden
desentenderse de la suerte
del planeta.
4. La paz es esencialmente obra de la conciencia clara de los
hombres.
No hay paz sin cultura humana y sin la paz la cultura no podría
sobrevivir.
Una verdadera cultura de la paz se podrá instaurar
únicamente por la humanización de nuestras sociedades.
No existe un objetivo más urgente ni más difícil. Pero no
olvidemos que la cultura es igualmente una forma de
esperanza
5. La paz no es simplemente
ausencia de guerra, ni
siquiera un equilibrio
estable entre fuerzas
adversarias.
Se funda sobre una
correcta concepción de la
persona humana y
requiere la edificación de
un orden según la justicia
y la caridad.