1. Es interesante observar que la historia de la humanidad hubiera sido
diferente si se hubieran presentado de otra forma los hechos.
Y de esa manera bien podríamos decir que:
EN BROMA Y EN SERIO
(para pensar sonriendo)
Recopilación y redacción
por Francisco Arámburo.
Con música de piano.
2. Asimismo Hipócrates y Galeno, los padres de la Medicina, ni siquiera
soñaron con las vacunas, los antibióticos, los hospitales, las transfu-siones
de sangre, la anestesia, los marcapasos, los Rayos-X ni los asombrosos
avances médicos modernos. Es más: nunca imaginaron que existieran los
gérmenes ni los virus. Y si hubieran conocido a Luis Pasteur, lo hubieran
considerado como
una especie de semidiós.
Los faraones de Egipto no conocieron las
grúas, el acero, el concreto, ni contaron con
herramienta pesada para construír las
pirámides... pero vean lo que lograron.
3. ¡Y nada más imaginen lo que hubieran logrado Tales de Mileto,
Sócrates, Platón y Aristóteles si hubieran
contado con una grabadora!
También imaginemos a Virgilio con sus
Églogas y sus Bucólicas.
Y a Horacio con sus Sátiras.
Ah, y las inmortales TRAGEDIAS de Sófocles,
Esquilo, Eurípides y Aristófanes, todos ellos
¡Qué
capturados en discos compactos.
maravilla!
4. Julio César y Alejandro Magno jamás
conocieron los cañones ni la pólvora, así
como tampoco disfrutaron de una buena
pizza, de una película o de la televisión. Y
qué decir lo que hubiera sucedido si en
tiempos de Nerón se hubieran
popularizado los equipos de futbol para
competir en el Coliseo.
5. Otra hubiera sido la historia si los cuatro evangelistas
(San Lucas, San Juan, San Mateo y San Marcos)
hubieran tenido sendas computadoras.
¡Nomás imagínenlo!
Los textos y fotos del momento podrían haberse
enviado directamente y en el instante mismo de estar
ocurriendo los hechos a todos los rincones de la tierra
por internet.
6. También recordemos que ni Cervantes, Dante,
Shakespeare, Dostoyevsky, Tolstoi ni Oscar Wilde
jamás tuvieron
una máquina de escribir.
Es importante darnos cuenta que los Vikingos viajaron
sin brújulas, y que Cristóbal Colón no pudo llevar
alimentos enlatados, ni siquiera una simple
y rústica hielera para transportar unas
cervecitas bien frías para el viaje.
7. A pesar de su poderío y de sus lujosos palacios,
los reyes de Francia nunca supieron lo que era un
cuarto de baño, ni siquiera un sanitario (ni papel). Los
jardines de Versalles eran unos ar-tísticos laberintos
para que las damas de la cor-te pudieran ocultarse y
levantarse sus ampulo-sas faldas para hacer sus
necesidades.
8. Simón Bolívar, San Martín, Napoleón y Pancho Villa jamás tuvieron en
sus manos un rifle AK-47, ni lo imaginaron siquiera. George Wáshington y
Benjamín Franklin nunca pudieron tomar un taxi o manejar una moto para
llegar con rapidez adonde querían ir,
ni contaron jamás con una pastilla para el dolor de cabeza.
Beethoven
Mozart
Beethoven, quien pasó los últimos años de su vida totalmente sordo,
no pudo usar audífonos para escuchar sus propias composiciones
en un equipo de alta fidelidad. Y Mozart, Donizzeti, Verdi y Puccini
no pudieron escuchar nunca sus óperas grabadas en un disco
compacto para disfrutarlas tranquilamente en sus casas.
9. Simplemente imaginemos cuán diferen-te
hubiera sido la Historia si Herodoto, Plinio el
Viejo (Vesuvio), Marco Polo y Bernal Díaz
del Castillo hubieran tenido sendas cámaras
filmadoras para reseñar sus vívidas
descripciones históricas.
Asimismo las seis esposas de Enrique VIII
de Inglaterra quizá hubieran salvado la vida,
o corrido con mejor suerte, si
hubiera existido en esa época
el divorcio.
10. ¡Todo hubiera
sido diferente!
Si las costureras de la Edad Media hubieran contado con máquinas de coser;
si Carlo Magno hubiera tenido unos prismáticos para dirigir sus batallas;
si Hernán Cortés hubiera tenido un diccionario bilingüe y Josefa Ortiz
de Domínguez hubiera conseguido un teléfono celular...
11. Ah, entonces... ¡otra hubiera
sido la historia!
Imaginen lo que hubiera avanzado el mundo si Pitágoras hubiera
tenido una calculadora y Moisés unos lentes obscuros para
protegerse del sol durante su famoso
y largo viaje del EXODO por el desierto.
Si Carlos Lindbergh hubiese contado con radar en su avión y los
zares de Rusia con una televisión para ver las imágenes de las
provincias que se estaban rebelando.
12. Ah, pero lo máximo hubiera sido si se hubieran podido
transmitir por televisión en aquellas épocas pretéritas
“en cadena nacional, en vivo
y a todo color” estos grandes acontecimientos
de la historia:
¡Esos sí que hubieran sido
unos verdaderos exitazos!
El Sermón de la Montaña, la toma de Constantinopla
por los turcos, el Concilio de Trento, la coronación
de Josefina por Napoleón, la toma de la Bastilla
y el estreno de la ópera AÍDA en El Cairo.
13. PERO a pesar de todo, sin brújulas, grúas, concreto, técnicas modernas de
construcción y demás inventos, se hicieron grandes obras.
¡Y vaya que sí!
El Partenón
Chichén Itzá
Palacios y
castillos
La Gran Muralla China
Machu Pichu
El Taj Mahal
14. SIN EMBARGO, en lugar de estar agradecidos por lo que hoy tenemos,
nos quejamos de una y mil tonterías: que no tenemos todo lo que
queremos, que esta vida es “insufrible” y muchas cosas más.
He aquí algunas cosas que hoy nos sacan de quicio:
¡Maldición! Se acabó el rollo de papel; se me quemó el pan en la tostadora;
me cortaron el teléfono; no encuentro mis anteojos; me aprietan estos zapa-tos; no
arranca la batería del auto; no hay estacionamiento; me robaron la antena; está muy
lento el tráfico; el vuelo viene retrasado; que lluvia tan ino-portuna; no se me quita
esta maldita gripe; se fue la luz; hay mucho ruido aquí; callen ese perro; mi reloj se
adelanta; está muy caro el pasaje; se le acabaron las pilas a este aparato; se le
cayó el sistema a la computadora;
se descompuso la televisión; se me desinfló una llanta; no funciona este horno de
micro ondas; ¡uuf! me estoy muriendo de calor; hay demasiada gente formada en
esta ventanilla...
¡y mil cosas más! ¿No es cierto?
¡Pero si eso no tiene mayor importancia!
Y aquí transcribo las sabias palabras de mi padre,
quien las decía medio en broma y medio en serio:
“Como quiera que sea, estamos mejor que si estuviéramos peor.”
15. Ah, pero nadie pone atención (o por lo menos no comenta) tantas
cosas agradables que están a nuestro alrededor
si tan sólo les brindáramos una poca de atención.
Por ejemplo:
¡Que bonito día! Que agradable brisa está soplando; qué precio-
sas nubes; qué bonito está cantando ese pájaro; que bello paisa-je; que
bien huelen esas flores; mmm! qué sabroso platillo; que música tan
hermosa están tocando; que bonita sonrisa tiene esa niña; que bien te
queda ese color. Y en fin: ¡que bella es la vida!
¿Por qué no podemos ser así?
¡Qué bello
atardecer!
16. Hay que meditar que en realidad tenemos más
ventajas, facilidades y comodidades hoy en día que
las que tuvieron nuestros antepasados, y habría que
darle gracias a Dios por eso.
Hay que reconocerlo.
Todos deberíamos hacernos esta pregunta: “¿Merezco más de
lo que tengo, o tengo más de lo que merezco?”
Fin
REFLEXION FINAL: Nuestro paso por este mundo es muy corto y
no deberíamos perder el tiempo en quejarnos
ni en criticar la vida. Ella hace lo que puede...
y lo que nosotros le permitimos que haga. Medítenlo.
faramburo@aramburosuites.com