Johannes Gutenberg inventó la imprenta en 1440 en Europa utilizando moldes de letras de metal movibles. La invención tuvo un gran impacto social al permitir la producción masiva de libros, pero también llevó a un mayor control de la información impresa por autoridades religiosas y civiles, quienes requerían permiso para publicar y en algunos casos imponían castigos como multas o la pena de muerte para quienes no cumplieran.